Sonó el teléfono en el instante en que Adeline pensó que no sería capaz de sostener por más tiempo su fachada fría, Cam quedó muy quieto esperando su respuesta, cuando ella no dijo nada él se separó de ella y tomó el teléfono para preguntar

• ¿Sí?
• Señor Black, sus abogados están aquí para la reunión
• Hazlos pasar por favor
• De acuerdo señor

Segundos después ingresaron dos hombres de unos cincuenta años de edad, ambos se veían muy serios y poco amistosos, “Vicky” entró en acción

• Señores es un placer finalmente conocerlos
• ¿Usted es?
• Victoria Howland, “la prometida” — agregó sarcásticamente
• Ahh, así que es real, pensábamos que el señor Black la había inventado — ella les brindó una sonrisa arrebatadora
• Mi prometido es muy reservado, no me extraña que les sorprenda a todos verme aquí, hemos mantenido nuestra relación en secreto debido a mi vida profesional, — ambos ab