Mirarlo introducía en Alex unas ganas de vivir intensas, una esperanza única. No importa los problemas que tuviera en esta vida, haría lo imposible por luchar por él.
—¿Te encuentras mejor?
Alan apareció en la habitación que Alex había mandado a arreglar para su hijo. Alex no le dirigía la palabra, solo había simulado estar bien con su hermano el día del entierro de Ruth, para no levantar sospechas. Si alguien descubre la verdad (en especial Matthew) podrían quitarle a su hijo.
—¿Seguirás sin hablarme?
Alex depositó a su hijo en la cuna cuidadosamente y lo tap&o
—Estamos reunidos esta noche para una importante misión— decía Dylan mirando a todos—. Es algo de suma importancia.—Habla antes de que me duerma maldita sea—gruño Alan—¿Puedes decir una oración sin maldecir a alguien?—le reclamó Lucy.—Cállense, esto no trata de ustedes— dijo Rosali.—Prosiguiendo— decía Dylan—. La misión de la que les informo es ...¡redoble de tambores!—gritó Dylan dramáticamente.Rosali empezó a golpear la mesa imitando el sonido de los tam
—¡¿Qué?!— gritó Jeremy totalmente enojado—. ¿Tú estás bromeando cierto?—Jeremy, ellos son mates y ...— intentaba explicarle José.—¡Mates mis huevos! — Jeremy se acercó a José—. ¡Ellos recién se conocen!, ni siquiera saben sus nombres completos uno del otro ¿y los llevaste a vivir juntos? ¡¿Tú estás loco?!—Pero Lauren estaba muy afectada...— José intentaba defenderse.— ¡Primero deben conocerse mejor! — Jeremy ya estaba a punto de un colapso— ¡Voy a traerla ah
—¿Desde cuándo ella está aquí?—preguntó Oliver—Hace 10 años—hablo el alfa Velkan—. Es la mate de Mihai, unos de mis mejores hombres.—¿Quién deja que su mate haga un misión tan peligrosa?—habló irritado—. Si no hubiéramos venido , ella ya estaría muerta junto a sus hijos.—Mihai está en coma—habla Nick.¿En coma?—Ella se desmayó porque su mate tuvo un problema cardiaco, pero ya lo establecimos—habló el alfa Velkan—, pero é
Todo estaba oscuro, estábamos en un bosque repletos de Pinos que estaban cubiertos de Nieve, el lugar parecía mágico. Si no estaríamos próximos a enfrentarnos a un gran número de hombres Lobos estaría tomando fotos. Al frente de nosotros había un descampado donde según el alfa Velkan siempre se libran las peleas.—¡Ya los escuché!—Alan grita en medio de un silencio y después ríe como maniático—. Salgan que los estoy esperando.—¡Alan!—lo recrimina Matt.—¿Qué?—dice—. Acabemos con esto de una vez, tiñamos este hermoso paisaje blanco de mi color favorito ¡
—¡Llévense a los niños!—ordenó el alfa Egor, era el alfa de la manada rusa que conocí en el entierro de Ruth.Lucy empezó a agitarse e intentar romper la soga con la que la tenían amarrada a la silla. Intentaba gritar, pero también le pusieron cinta en la boca al igual que a mí.—Pero miren que tenemos aquí.Me quedé impactada cuando la vi entrar a la habitación.—Así es como debe estar alguien como tú— me dijo Elizabeth—. Amarrada como la perra que eres.—Cállate Elizabeth —
Toqué la puerta desesperada, estaba totalmente cansada después de correr hacia la casa de Alex, tengo tanto miedo que no puedo controlarme.—¡Alex!— gritaba tocando fuerte — ¡Alex!—Por la diosa luna... ¿Por qué tocas así...— Alex abrió la puerta quedando sorprendido—. ¿Qué te sucedió? Por la diosa ¿Quién te golpeó Rosali?Le explique a Alex todo lo que pasaba, él estaba totalmente fuera de sí, cogió a su hijo y salimos de su casa para ir a buscar a Lauren.Cuando llegamos a la casa de Matthew nos encontramos a Jonny intentand
—Wow—dice Jonny—. Esto es impresionante.Después de horas adentrándonos en el bosque, llegamos a una cabaña muy pequeña, pero debajo de esta hay todo un refugio resguardado de alta tecnología y con todo tipos de cosas.—Es como si estuvieran preparados para un ataque zombi—dice Lauren mirando el lugar—. ¿Esas son armas?—No las toques—dice Alex—. Son peligrosas.—¿No deberíamos intentar comunicarnos con alguien?—digo.—Han cortado todas las señales— dice Alex revisando una computadora&md
—Ustedes se quedarán aquí— dije alistándome para salir.—Discúlpeme, pero usted solo nos está acompañando en esta misión, no tiene la facultad de darnos órdenes.El líder del grupo de rescate me miraba molesto mientras los demás estaban algo incómodos por la situación.—¿Alguna vez han entrado al palacio?Todos se quedaron callados.—Conozco perfectamente este lugar, sé cómo moverme, donde ocultarse , no necesito un mapa como ustedes—me acerque al cadete—. La vida de las princesas