Después de haber perdido a una de sus hijas Elena sentía que una parte de ella se había ido con Freya, su pequeña luz ya no estaba, ya había pasado un mes desde lo sucedido y Frida aún no ha despertado del coma. 

-Buenos días señora Elena ¿Cómo se encuentra la bebé?

-Bien, pero muy glotona, ya se está acabando la leche que me recomendaron para ella.

-Qué bien que se alimente, será una niña muy sana, bueno me retiro si ve algún cambio en Frida no dude en llamarnos. 

-Mil gracias por ayudarme y permitirme quedarme las 24 horas al lado de mi hija.

-No es nada señora, debería de tomar un descanso y luego volver.

-Lo haré doctor- sin decir más el médico salió de la habitación donde se encontraba Frida, Elena depósito a la bebe en el cunero se le acerco a Frida y le dio un beso en la frente, se notaba pálida su cabello muy largo y su rostro un poco diferente ya le habían quitado la venda de los ojos, ahora Elena sólo le pedía a Dios para que ella despierte y poder ver la vida, será doloroso darse cuenta una vez que despierte de la muerte de su hermana.

Elena salió del hospital rumbo a su trabajo donde era mesera, le habían dado unos días libre por la muerte de su hija Freya.

-Hola jefa, que tal esta todo por aquí.

-Pues extrañándote ¿Cómo te encuentras?

-No muy bien, pero debo salir adelante por mi nieta y por Frida.

-Qué bien, me dejas cargarla, que linda se parece mucho a su mami- Elena empezó a llorar nuevamente. -Lo siento Elena.

-No, discúlpeme, es solo que es muy difícil para mi ver la realidad al ver morir a mi hija y ahora la otra que no despierta del coma, que hare y ahora como trabajaré con la bebe, con quien la dejaré- Verónica la dueña del restaurante es una mujer muy buena y amable ella abraza a Elena y le dice.

-No te preocupes, ella se quedará acá con nosotras, aquí ella tendrá una pequeña familia claro que si tú permites que la cuidemos y demos amor.

-Jefa Muchas gracias por todo, no sé cómo pagarte todo la comprensión que ha tenido conmigo.

-Elena no es nada, te estimo y quiero que trates de sonreír y estar bien ah y otra cosa dime Verónica no jefa.

-Si Srta. Verónica- pasaron quince días y Frida aún no despertaba, Elena después de su trabajo llegaba al hospital a verla. De repente escucho los pitos de la maquina que conectaban con el cuerpo dormido de su hija se acercó y vio como su hija empezaba a despertarse Elena tocó el botón para informar que se le necesita un médico.

-Hija mía por fin ha despertado- Frida aún no había abierto sus ojos pero se sentía extraña, trataba de hablar a su madre pero no lo logró, el médico entró y pidió un poco de espacio la madre de Frida se alejó veía como el médico la revisaba y le hacía preguntas a Frida. 

-Frida, habré los ojos sin miedo. 

-No es nece...sario- dijo con dificultad, sentía la boca pesada. -Yo soy cie...ga, aca...so no lo sa...be- pausaba a cada nano segundo por la dificultad de hablar. –Diga...me donde me encuentro, donde está mi madre y mi hermana.

-Lo diré todo con detalle, pero primero habré los ojos- Frida habría los ojos, tan lindos verdes como el color Esmeralda. Asombrada se encontraba al ver todo a su alrededor

-Yo...yo puedo ver, pero co...mo no entiendo- Elena se le acerco el abrazo y le dijo

-Mi amor, ya puedes ver ya todo estará bien.

-Mama, tu eres mi ma...ma, eres muy linda- balbuceo feliz.

-Bueno me retiro señora, la dejo con su hija aún no se puede sobresaltar, recuerde que su corazón es nuevo y hay que ver la reacción.

-Si doctor, Hija mía, mi pequeña.

-Mama, que pasa con mi corazón.

-Luego te lo diré, sólo quiero que no te sobresaltes, necesitamos hablar Muchas cosas- Frida sólo veía a su madre contemplando lo linda que era y estaba deseosa de ver a su gemela, ella se preguntaba cuanto tiempo llevaba en el hospital tenía tantas preguntas que ella no sabia por donde empezar de repente el llanto de un bebé la saco de sus pensamientos.

-Oh pequeña, se me olvidaba.

-Mama, y ese bebé quien es- pregunta confundida.

-Hija, es tu sobrina. 

-Mi... sobrina, ella es la bebe de Fre...ya, madre tráela quiero verla sentirla- Elena le tendió a la niña y vio como su hija la veía. El cuerpo de Frida aún estaba débil pero sostenía a la niña.

-Oh no lo puedo creer... es como decirte, nunca pensé que vería a mi bebe porque es mía también, mamá lla...ma a mi her...manita, dile que la quiero ver donde esta porque no viene- Elena bajo la cabeza y negaba una y otra vez, empezó a llorar. –Ma...dre que sucede porque estas haci di...me.

La bebe empezó a llorar Elena se levantó y llamo a una de las enfermeras pidió de favor que si se la podían cuidar por un momento y darle su mamila, la enfermera salió junto con la beba y dejo a madre e hija solas.

-Ele...na, por que no dices nada, anda lla...ma a Freya por que no llamaste a Freya que venga por la bebe.

-Hija, tu...tu hermana murió en el parto- lo dice en un hilo de Voz. El rostro de Frida se desfiguro al oír semejante cosa.

-Que estas di...ciendo, eso no es ve...rdad, mama por favor dime que no es verdad, noooo mama mi hermana ¡Noooo! ¡Porque ella, por que! ¡No lo creo!

-Hija por favor no te alteres, hija mía mi amor, lo siento pero es la verdad.

Frida sentía que se le desgarraban el alma empezó a llorar y gritar con dificultad. El doctor que le atendía entró y le puso un sedante para que se tranquilizara.

-Frida, debes estar tranquila, acabas de despertar del coma- asiente con la mirada perdida, ya tranquila Pregunta nuevamente.

-¿Cuando murió?

-Hace más de mes y medio.

-¿Cuánto tiempo llevo aquí?

-Dos meses y veinte días mi amor, tu hermana tuvo a su hija hace 45 días y murió junto a su bebé muerto.

-Me es...tas diciendo que Freya estaba embarazada de... dos bebés madre y uno murió con ella, no madre porque la vida estas injusta.

Elena le contó a Frida como sucedieron las cosas, ella lloraba a mares nunca en su vida pensó llorar como lo hacía hoy al darse cuenta que su hermanita murió.

-Hija, no quiero que sufras más mi amor, pero tienes que saber cual fue la voluntad de Freya antes de morir.

-Como se supone que ella sabía que iba morir- dijo Frida con lágrimas en sus ojos.

-Sí, ella lo sabía, yo le daba esperanza pero al parecer se dejó vencer ya que se dio cuenta que su vientre estaba muy infectado por el bebé muerto dentro de ella.

-¿Porque tenía que ser haci? ¿Por qué? Que mal había hecho ella para sufrir de esa manera mamá... cual fue su deseó. 

-Ella pidió que sus ojos y su corazón fueran para ti.

-Freya, porque, no no no.

Nuevamente Frida sentía todo el alma y el corazón destrozado, se decía una y otra vez que por que su hermana hizo todo eso por ella, se acordó cuando Freya le decía "Te daría mis ojos si fuese necesario y mi corazón para que sientas cuanto te amo".

Frida lloraba a mares, poso una mano es su pecho y se tocaba el rostro sintiendo como sus lágrimas caían de eso hermosos ojos verdes que le pertenecía a Freya, a su pequeña Freya quien ella prometió poder proteger y a la vez no logro proteger. Quedó dormida de tanto llorar. Transcurrieron 15 días, él médico la revisaba constantemente. Ya la encontraba bien le daría el alta en una semana más.

-Doctor, como se encuentra.

-Está bien, pero debe de alimentarse y empezar las terapias.

-Pero su cuerpo no se nota muy débil, creé usted que tenga dificultad en un futuro- él médico negó y le sonrió a Elena.

-Tal parece que su hija es una niña fuerte, no se preocupe ella puede caminar y sostenerse pero es importante la terapia.

-Iré a buscarle algo de que comer, gracias por todo.

-Bien, me retiro.

-Hija, quédate unos minutos con la bebe, te iré a buscar algo de comer- Frida levantó el rostro en señal positivo, Elena salió en busca de comida para su hija.

Frida se levantó con dificultad y se le acerco a la bebe le tocó la manita y le dijo

-Ahora serás mi hija pequeña, te prometo que te cuidaré y te amare como tu madre me amo a mi y yo se que donde ella esta me sigue amando y nos cuidará desde el cielo a las tres- se fue despacito al baño y se vio su rostro en el espejo. -Está soy yo Freya, ya no seré más Frida ahora soy ella pero diferente, hermana tu memoria estará siempre dentro de mí, serás mi sombra y la que me acompañé, siempre te amare y no permitiré que nadie nos haga daño absolutamente nadie.

Ella se arreglo el pelo se lavo los dientes y salió a ver a la bebe que dormía plácidamente.

-Hija, aquí te traje leche y algo de frutas para que desayunes. 

-Madre quiero que desde hoy me llames Freya, ya no soy más Frida, Ok. Solo te pido que no me preguntes por que esta decisión, Frida murió ya no está, ahora está soy yo una nueva vida empieza para nosotras y no permitiré que nadie se atreva hacernos más daño quiero que la niña sea mi hija yo quiero ser su mama.

Elena se le acerco el brazo.

-Hija mía, esta bien yo solo quiero que estés bien y que sigamos adelante, tu hermana se debe sentir muy feliz al saber que tu seas la madre de su pequeña, quiero mostrarte un video y unas fotos que ella te dejo antes de morir.

Elena busco entre sus cosas la pequeña cámara y le dio reproducir, Frida ahora llamada Freya veía el video y lloraba al ver el rostro de su gemela eran tan idénticas que nadie las podría distinguir sólo su madre. Tocó la pantalla de la cámara como si estuviera tocando el rostro de su hermana ella escuchaba atentamente lo que Freya le pedía antes de morir.

-Mamá, mi hermanita se veía muy feliz.

-Si hija, ella murió muy feliz, me dijo que te ama con todo el alma y que tú y yo no nos sintiéramos solas por que ella siempre estará con nosotras.

Ellas se abrazaron y lloraban juntas prometiéndose salir adelante.

-Siempre estarás acá en mi corazón hermana- se dijo a si misma señalando su corazón.

Los días pasan como viento en popa, fueron a visitar la tumba de Freya dejaron flores y salieron de allí, Frida veía todo a su alrededor, nunca imagino conocer la luz del día, levantó el rostro y señaló con su dedo hacia el cielo.

-Madre el cielo es azul e infinitamente alto. 

-Si mi amor, ahora veraz todo lo que no podías ver antes.

Salieron del cementerio en busca de la bebé la habían dejado con Verónica la jefa de Elena caminaron a una nueva vida.

-Ahora yo las cuidaré- lo dice en un murmullo.

El sufrimiento es efímero hermana, nuestras almas siempre estarán unidas nada ni nadie nos logrará separar, sé que en el cielo estas y desde allá nos Guardaras junto a nuestro padre celestial. Te amo hermanita, eres mi otra mitad y jamás saldrás de mi corazón tu sombra siempre me acompañará, no te diré adiós y si no hasta pronto.