Samuel.

Estaba procesando todo lo que le diría a mi padre de mi supuesta novia, durante años no traía una novia a casa, papa dirá (ya era hora hijo). Otra cosa rondaba mi mente, quien en su sano juicio no a consumado su matrimonio, Freya realmente es una tonta si piensa que no habrá noche de bodas, yo necesito que ella quede embarazada, quiero cumplirle ese deseo a mi padre. Además ella actúa como si nunca había besado a un hombre, tiene una niña de 8 Años y pareciera como si no tuviese ninguna experiencia. Es mejor dejar mis pensamientos de lado iré a ver a mi padre.

Entro a su habitación, se encontraba recostado leyendo unos de sus libros al verme sonrió, me senté aún lado de la cama, mi padre es un bueno hombre a sus 60 años sigue siendo fuerte y dedicado, lástima que su corazón es muy frágil y debe cuidarse.

-¿Cómo se ha sentido, papá?- le pregunto.

-Muy bien hijo y tú que tal como te fue