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Capítulo 4: atracción

Roma

Después de la presentación Elliot nos presenta a un agente que nos va a mostrar toda la agencia y decir todo lo que tenemos que saber.

-Chicas, este es Adrián- dice al tiempo que el chico se da la vuelta para observarnos, al mirarme me da una mirada de arriba a abajo con descaro y se queda mirándome un rato para después mirar a Sofia a la que también le echa una miradita- el les va a enseñar los pisos de la agencia.

Al terminar de presentarnos a Adrián nos deja solos.

Es morocho de ojos verdes. Esta bueno, Lo voy a anotar en la lista de polvos.

-ustedes deben ser las famosas agentes- dice el morocho- tenía curiosidad de conocerlas, son el nuevo tema de conversación en todo el edificio- dice.

-¿acaso no lo éramos antes?- le pregunto sonriendo coqueta.

El me devuelve la sonrisa del mismo modo y procede a mostrarnos el edificio, este cuenta con 5 pisos de los cuales uno es subterráneo. Nosotros estamos en el quinto piso que es el de investigación, en este están todos los especializados en informática, ósea los hackers. Está lleno de escritorios con computadoras y pantallas grandes. Acá también está la oficina de Elliot.

El cuarto piso es el de planeación, aquí hay  algunas oficinas y hay una parte que es mas grande en donde está una mesa gigante en la que mínimo caben 20 personas, también en fondo hay una pantalla.

El tercer piso es el de entrenamiento, es un salón gigante en el qué hay un ring que es para las peleas cuerpo a cuerpo y a los alrededores hay máquinas expendedoras de bebidas y comida, estantes con toallas y una estantería llena de armas blancas.

El segundo es el de infiltración, en este hay todo tipo de ropa, pelucas y maquillaje para las infiltraciones.

Y el último piso que es el subterráneo es el del armamento, en este están todas las armas que se usan cuando salimos en las misiones.

Cada uno en la agencia tiene una especialidad que es en la que más trabajan, pero también para estar aquí se tiene que saber de todo un poco, están:

Los hackers:  investigan todo y sacan información.

Los estrategas: arman estrategias y planean todo.

Los combatientes: son los que pelean cuerpo a cuerpo, ya sea cualquier tipo de arte marcial.

Los infiltrados: intervienen en las misiones como un agente encubierto con una identidad totalmente diferente.

Los francotiradores: están especializados en las armas de fuego y disparan a grandes distancias.

Yo soy una muy importante agente ya que soy una de las pocas que están especializadas en más dos áreas. Tengo el mismo grado de conocimiento en las cinco de cinco áreas, soy francotiradora, combatiente, infiltrada, estratega y hacker.

Sofia es hacker, infiltrada y estratega es muy buena en las tres áreas. Todavía no domina muy bien las armas de fuego ni el combate cuerpo a cuerpo.

-bueno señoritas, hasta aquí llegó el recorrido- nos dice Adrián después de enseñarnos todo el edificio- ha sido un gusto conocerlas, pero yo me tengo que ir, me encantaría volver a verlas- dice eso último dándome una mirada pícara y marchándose.

-ese tipo estaba buenísimo- me dice Sof mirándome- ustedes dos se estaban comiendo con la mirada.

-ya lo añadí a la lista- le digo sonriendo juguetona.

-¿a la lista de polvos?- asiento.

-hay que buscarte candidatos y candidatas a tu lista- le digo emocionada.

-estoy de acuerdo, aunque ya sabes cuáles son mi tipo- me dice.

-obvio que lo se, ¿quien me crees?- le digo fingiendo indignación y poniéndome una mano en el pecho.

-a ver, decime como me gustan los hombres- me dice entornando los ojos.

-los hombres te gustan rubios y rusos o alemanes- le digo segura.

-¿y las mujeres?

-todo lo contrario, te gustan las latinas morochas y pelinegras- le digo sonriendo triunfadora.

-te salvaste- me dice sonriendo complacida.

Siento como vibra mi celular en el bolsillo trasero y lo saco. Es un mensaje de Elliot.

-les voy a presentar a los agentes con los que van a trabajar, las espero en el piso de planeación, supongo que ya se aprendieron los pisos.

Sofia me pregunta qué pasa y le digo lo que Elliot.

Subimos al cuarto piso y primero tocamos la puerta, escuchamos un "adelante" y avanzamos. Al entrar nos encontramos con 7 personas además de Elliot, son cinco hombres y dos mujeres. M****a que los siete están buenísimos. No soy bi pero les doy a las chicas igual.

-señoritas- nos saluda Elliot- tomen asiento- nos pide y obedecemos- bueno, ya les había comentado que ustedes iban a trabajar con un grupo de personas de su mismo nivel- asentimos- le voy a ir presentando a cada uno- dice mientras empieza a nombrarlos- el es Santiago Méndez, es colombiano y es uno de los mejores hackers que tenemos- dice mientras señala a un tipo castaño de ojos negros y piel morena- Demon Demir. Turco especializado en el combate cuerpo a cuerpo- señala a un pelinegro con ojos de un profundo azul de tez blanca- Maximilian Vittalle. Un italiano. Excelente estratega.- es un rubio, tiene heterocromía, un ojo de color azul claro mezclado con verde y el otro color miel- Matt Holm, es un sueco y el mejor francotirador- es pelirrojo de ojos color miel y piel blanca- Akira Kimura, un japonesa especializada en las artes marciales, es una combatista- señala a una chica con rasgos asiáticos con cabello color azul y ojos miel-  Adela Gonzales. Una gran infiltrada venezolana- es una pelinegra de ojos color azul eléctrico (aunque creo que usa lentes de contacto) y piel morena- por último pero no menos importante, Asher Schmidt, un Alemán combatista e infiltrado- es un rubio de ojos color chocolate.

Con eso termina su presentación, debo admitir que tengo un bi panic con estos hombres y mujeres. Son todos igualmente de atractivos, nunca vi tanta belleza junta, Fuera de la mía y la de sofia.

-chicos, les presento a las dos mejores agentes- dice Elliot empezando a decir nuestra información- esta que está aquí es Roma Doubront, una agente francesa especializada en las cinco de cinco áreas, es francotiradora, combatista, infiltrada, hacker y estratega- continúa ahora con Sof- y ella es Sofia Roldent, agente rusa especializada en tres de cinco áreas, es una infiltrada, hacker y estratega- termina con nuestra introducción.

Todas las miradas están en nosotras que estamos sentadas y sonrientes seguras de nosotras, Sofia me habla con la mirada y yo le devuelvo el gesto. Desde que nos hicimos amigas nos lanzamos miradas que tienen mucho significado y solo las entendemos nosotras. Es como si nos leyéramos la mente. En este momento está pensando lo mismo que yo y es que de acá nos vamos, pero no sin antes comernos a alguno.

Al final de la reunión Elliot nos dice que tenemos el día libre a todos, pero que mañana venimos con todo.

-oigan- nos habla la venezolana, creo que se llama Adela- ¿que les parece si hoy nos vamos todos esta noche a tomar algo y así las conocemos un poco más?- propone mirándonos. Más específicamente mirando a Sofia.

La miro y ella asiente.

-claro- le contestó por las dos mirando a la pelinegra- nos vemos esta noche, les pasamos nuestros números y ustedes nos mandan un mensaje con la hora y el lugar.

Les damos nuestros números y nos marchamos después de despedirnos de todos.

-¿¿viste lo buenos que estaban todos??- me habla sofia cuando salimos del edificio- ¿es que estamos en un mundo paralelo o que?

-si los vi Sofia, si te das cuenta tengo ojos- le digo sacando a relucir mi sarcasmo y ella me fulmina con la mirada- me agarro bi panic- le digo lo que pensé cuando los vi.

-que suerte que a mi ya no me pueden agarrar esos ataques porque ya soy bi- me dice haciéndome reír.

Nos dirigimos a nuestro departamento. Deben ser las una de la tarde. Nos encargamos algo para comer y en la tarde charlamos un poco. Me llega un mensaje.

Desconocido:

-hola Agente, soy Adela, nos vemos a las ocho en esta dirección.

La agendo y miro la ubicación que mandó, no está tan lejos de acá, esta como a diez cuadras.

-¿quien era?- me pregunta Sofia- ¿no será tu amante no?

-ups, me descubriste- le digo siguiéndole el juego- era Adela, dice que nos espera a las ocho, ya me mando la ubicación, no está tan lejos- le cuento.

-¿es la venezolana?- pregunta

-si, es ella- le digo y veo cómo se le va formando una sonrisa- ¿te gusta no?

-obvio que si, ¡ya la anoté en mi lista!- dice emocionada.

-¿viste al otro candidato?, parece que te los hubiera mandado Dios mismo en bandeja de plata- le digo recordando al rubio alemán.

-¿como no verlo?, es exactamente mi tipo y la venezolana igual, esos dos ya están en mi lista de polvos- dice- lo malo es que no recuerdo su nombre, ¿tú sabes?

-creo que era algo como Ash pero no me acuerdo de cómo seguía- le digo pensativa y mirando a otro lado- habrá que esperar a que lo llamen por su nombre o si no, vamos diciendo nombres que empiecen así y vemos si gira la cabeza.

Sofia se echa a reír a carcajadas.

-o le podemos preguntar su nombre- dice todavía riéndose.

-me gustan más las otras opciones- digo convencida.

La tarde nos la pasamos hablando de la agencia y los que la componen. Cuando ya falta una hora nos empezamos a arreglar.

Yo me decido por una pollera de cuero negra, un top negro manga larga que tiene unas tiras que unen en la espalda y unos tacones del mismo color.

Sofia se decide por ir de negro igual, pero a diferencia de mi, ella se pone un vestido manga larga que se le ciñe a su figura y unas bucaneras negras.

Las dos mostrando nuestras esbeltas figuras.

Llegamos al bar y al entrar nos encontramos a los chicos en una mesa cerca de la barra de tragos. El bar es bastante lindo, tiene luces de colores, una pista de baile que está explotando de personas, una barra de tragos y mesas.

-¿cómo están?- pregunta Sofia mientras nos sentamos.

-bien, gracias- le responde la venezolana.

Yo estoy al lado del rubio de ojos diferentes, quien me habla a los segundos de sentarme.

-no nos hemos presentado formalmente- me habla el italiano- un gusto, soy max- me tiende la mano y yo se la recibo sonriente.

-Roma- le digo haciendo contacto visual, me parece que este va a ser el primero que me voy a tirar- ¿hace mucho que están en esta agencia?- le pregunto no sabiendo que decir mientras un chico deja tragos en la mesa y se sienta. Es el colombiano.

-yo estoy hace dos mes, los demás creo que hace más tiempo- dice agarrando dos tragos de la mesa y ofreciéndome uno- si les preocupa que no nos llevemos bien ya les digo que somos bastantes agradables, excepto el- señala al pelinegro de ojos azules- es un hijo de puta.

Me rio. Si supiera que yo también lo soy. Ya me agrada el pelinegro y ni cruzamos palabras. Aunque viéndolo así cómo está quiero cruzar lenguas, no palabras. Se ve buenísimo.

-¿como se llama?- le pregunto mientras me tomo un trago de mi bebida. Sabe rica. Creo que tiene whisky.

-el es Demon- dice mientras me mira con una sonrisa coqueta- y dime, ¿tienes novio?- casi me atraganto con la bebida. Es directo.- lo siento si fui muy directo- me dice mientras me recompongo y le respondo.

-no pasa nada y no, no tengo novio- le hago saber- ¿y tú tienes novia?- le pregunto mirándolo a sus peculiares ojos. Son impresionantes. Lo hacen todavía más atractivo.

-no tengo- me dice correspondiendo el contacto visual, cada vez se acerca un poco más. Me pone que me corresponda el contacto visual. No pregunten porque, pero lo hace.

-que bueno- le digo acercándome a sus labios.

Sellamos nuestros labios mientras coloco mis  manos en su cabello y el en mi cintura. Empezamos a hacer movimientos sincronizados. Me muerde el labio ligeramente y yo abro un poco más la boca dándole acceso a mi lengua e intensificando el ardiente y lento beso que nos estamos dando. Besa muy bien.

Así es como empezó la noche.

Después de habernos besado nos tomamos un par de tragos más y lo último que recuerdo es estar subiéndome a un taxi con él en dirección a mi departamento.

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