Havanna

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¿Debería de dejarme llevar? Me emociona la idea… no sé. Quisiera experimentar. Pero antes, entro a la habitación y paso al baño. Prepara lo que tengas que preparar Gabriel, yo estaré preparándome.

Una vez adentro, me desnudo, abro la regadera y me baño con lentitud, dejando caer el agua en mi cuello y en mi cara, tratando que se lleve toda la tensión del día hasta el momento, necesitaba esto, les estoy dando mucho tiempo para que decidan qué sucederá cuando salga.

Salgo en toalla, con el cabello húmedo y te veo a ti primero, esa mirada me fascina. La complicidad en ella es obvia, y me muerdo el labio. Ya sé que decidiste tú, al menos; doy unos cuantos pasos y veo que ella está tendida en la cama apenas cubierta por la sabana, se ve muy sexy, ti