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CAPITULO 30
CAPITULO 30Juliana podía perder su herencia, era algo que le preocupaba, el dinero había sido un Dios para ella desde que era una niña, necesitaba casarse con el.Su abuela que adoraba a Rodrigo, puso aquella cláusula antes de morir esperando que fuera suficiente para que su nieta se casará con el, nunca imagino que aquella muchacha de buena sociedad engañara al galán y terminará en esta situación tan bochornosa para todos.Bebe una copa de trago, se sienta en el estudio de Rodrigo y derrama una lágrima, no es para menos, su vida se ha convertido en un constante desenfreno que ella misma no sabe cómo manejar.Juliana siente que ama a Rodrigo, pero este reto personal que se ha impuesto de superar a Amelia, de ser mejor que ella la está volviendo loca porque no ve resultados.Regresa a la habitación, en ella se encuentra Rodrigo que se ha cambiado de ropa y se encuentra en cama, fingiendo que duerme.Rodrigo sabe que ama con todas las fuerzas de su alma a Amelia y que sin ella no puede
CAPITULO 31
Capitulo 31Amelia leía aquellas hojas llena de mentiras y de engaños como si de su vida se tratara.—¿Esta información es verdad?— estaba temblando, ante sus ojos tenía la respuesta que desde hace meses y durante su cautiverio fue difícil de encontrar, que se había convertido en eso que ella no podía cerrar y le daba miedo revelar.— Según la investigación que hice, tu hijo en este momento está en manos de la familia, Quevedo, son una familia muy importante, dudo que sepan de tu secuestro, adoptaron a tu hijo en una fundación — Raquel era una gran mentirosa, y sabía que podía manejar mejor que nadie la cabeza de una Amelia llena de miedo y de dolor.—Tengo que ir por el, la Justicia me tiene que apoyar en este momento, ellos tienen un bebé que nunca fue dado en adopción — Amelia estaba decidida a pelear por la custodia de su hijo, acariciaba a través de la fotografía del niño, todo lo que ella deseaba, ese niño era su vida.—¿Y que futuro le vas a dar?— Raquel de inmediato empezó el
CAPITULO 32
CAPITULO 32Rodrigo la tomo de la cintura, se la llevó de allí de inmediato mientras ella sollozaba llena de miedo y de rabia.Amelia se sentía protegida en sus brazos y era lo único que necesitaba para ser feliz o por lo menos para dejar de sentir esa tristeza que parecía ahogarla.Rodrigo la subió en su vehículo, manejo mientras la tomaba de la mano y ella lloraba.—¿Que te sucedió?¿Que te hizo Sebastián?— el pensaba que su hermano de nuevo había pasado sus límites con ella, no era algo nuevo y le daba rabia que ella se quedará con un hombre que no la amaba como se merecía y que parecía ser un enemigo.— Nada, quizás que fue el peor error de mi vida — Amelia tenía una lágrima en el ojo, sabía que Sebastián había sido su salida más desesperada.— Por ahora creo que lo mejor que podemos hacer es pensar solo en tu bebe, se que él es el peor padre que le pudiste conseguir a tu bebe, pero.... Tu eres la mujer perfecta para ser madre de esa críatura — Rodrigo se acercó y le dio un beso.L
CAPITULO 34
Capitulo 34Lo que los dos estaban viviendo en aquel vehículo era especial, para Rodrigo poder volver a sentir la piel suave de la mujer que amaba con todas las fuerzas de su corazón era inolvidable.Los dos sabían que todo esto era prohibido, qué hacer el amor en aquel vehículo lo único que iba a hacer era traerle muchos problemas.Amelia lo único que deseo era poder vivir durante un momento la felicidad que le había quitado Sebastián, mientras que para Rodrigo todo esto que estaba sucediendo era un sueño que quería cumplir.Amelia se acababa de entregar a los brazos del único hombre que amaba, ese que le había regalado la felicidad que ella quería desde hace mucho, el mismo que ella deseaba tener en su vida y el padre de su hijo.— Yo te amo, y se que en medio de lo que estamos viviendo la palabra amor es difícil, pero me gustas y quiero que sepas que nunca dejare de amarte — ella tomó un poco de aire y le dio un beso en los labios mientras se colocaban la ropa.El sabía que lo que
CAPITULO 35
CAPITULO 35Francisco lo primero que hizo fue empezar a llamar a una ambulancia, mientras que Amelia y resto de la familia salieron corriendo de inmediato para intentar salvar a Rodrigo pero era prácticamente imposible llegar hasta el vehículo.Sebastián se había quedado en shock, sencillamente se arrodilló en el piso y con la mirada completamente en blanco parecía que había decidido escapar a su propio mundo donde él no había sido el causante de la muerte de su propio hermano.Los paramédicos y las ambulancias llegaron de inmediato para intentar rescatar a Rodrigo que se encontraba dentro del vehículo atrapado, aunque era una misión de alto riesgo.Todo parecía haberse convertido en el verdadero infierno que no quería vivir Amelia, no dejaba de sentirse culpable porque Raquel se lo había advertido en muchas oportunidades.—¡Todo esto es tu culpa!— empezó a gritar Juliana mientras la agarraba fuertemente de los brazos dejando una marca de sus dedos impregnada en la piel de Amelia.Ell
CAPITULO 36
CAPITULO 36La idea para Raquel había sonado demasiado tentadora, de inmediato decidió consultar con su abogado sobre la posibilidad que le estaba planteando Juliana en medio de lágrimas.El abogado le dejó en claro que el hijo legítimo de Rodrigo es decir Sofía, sería la única heredera de la familia debido a los problemas que había tenido Sebastián.— la única manera de que Sofía tenga que dividir su herencia es que aparezca otro heredero — el abogado no sabía que Amelia estaba embarazada de Rodrigo.Raquel de inmediato se dio cuenta que las palabras de Juliana tenían razón, sí Amelia llegabas a saber esta información, a pesar de que Rodrigo sobreviviera, había una posibilidad que se quedara con la herencia que durante tanto tiempo le había costado mantener.Las palabras de Juliana se convirtieron en una profecía donde ella se quedaría en la calle y era algo que no podía permitir, la sola idea de quedarse sin nada se convertía en ese escalofrío que recorrió su cuerpo y que le demostr
CAPITULO 37
CAPITULO 37La cara de Amelia lo decía todo, el miedo se metió dentro de su pecho y dentro de su corazón, Rodrigo estaba muerto, el hombre que amaba con locura, ese que la lleno de amor desde el primer momento que le regreso la oportunidad de ser feliz después de una vida de dolor, el padre del bebé que estaba esperando estaba muerto.La mujer se desmayó en los brazos de Francisco, el la cargo hasta la habitación y colocó un poco de alcohol en su nariz para que recuperará el sentido.—¿Fue una pesadilla? No puede ser verdad — Amelia sentía como su garganta temblaban mientras Francisco suspiraba.— Lo siento, sabíamos que esto podía pasar, créeme que a mí también me duele, era mi amigo — Francisco estaba deshecho.Amelia se levantó, tenía que verlo, tenía que estar con el por última vez, por lo que le pidió a Rodrigo que la llevara a la casa de Raquel.— Necesito verlo por última vez, además de cuidar de Sofía — Ella sentía que tenía la responsabilidad de cuidar de la niña, después de
CAPITULO 38
Capitulo 38Amelia tenía miedo de lo que venía en su vida después de la muerte de Rodrigo porque no sabía cómo iba a continuar su vida sin el hombre más importante de su vida.El significado mucho para ella prácticamente era lo más importante que había tenido dentro de su corazón durante todo este tiempo y ahora sín el y sin la pequeña Sofía lo único que le importaba era poder continuar hacia adelante.En medio dentro de su corazón lo único que le interesaba era poder cuidar de su bebé y se había dado cuenta que se seguía manteniendo este mismo ritmo de vida lo único que iba a hacer era perder la única señal que le quedaba del amor de Rodrigo.Cuando llegaron al hospital Francisco estaba muy nervioso por todo lo que estaba sucediendo porque lo único que le interesaba era protegerla le había prometido a su mejor amigo a pesar de todos los desaveniencias que había habido entre los dos que lo haría.— creo que lo mejor que puedes hacer por ahora es descansar y créeme que vas a contar no
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