Al darse cuenta de mi silencio que duró más de lo debido, continuó:

— Me gustaría hablar contigo y con Milano, más tarde hoy, si es posible.

"¿De qué se trataría?"

"Quiero hacerte una propuesta".

- ¿Una propuesta? Arqueé una ceja, confundida y curiosa.

"¿Podrías venir al Partenón después del mediodía?"

"Yo... Bueno, si es breve, puedo." Pero no debo demorarme, ya que Liah y yo tenemos la intención de partir hacia Alpemburg más tarde hoy.

— Prometo ser breve, aunque quiero que te quedes más tiempo.

- Desafortunadamente no puedo. Liah tiene sus compromisos allí y estoy en negociaciones para abrir mi empresa en las próximas semanas y será también en Alpemburg.

"¿Vas a vivir allí?"

- Sí.

"Yo... todavía me gustaría hablar con ustedes dos".

"Estaré allí justo después del mediodía", le aseguré .

Me levanté de la cama, mientras Merliah miraba por la ventana de vidrio, observando el paisaje urbano desde el último piso del Hotel. La abracé por detrás, apoyando mi cabeza en su hombro.

“Estás tom