SEGUNDO LIBRO. –¡Lea!–Escuchó mi nombre de su dulce voz.–¡Lea!–Me grita con fuerza y desesperación.–¡Lea!–Es la voz de Jasper. Yo lo miró y veo que está muy angustiado, mientras mi madre me detiene con fuerza. Por otra parte, George y el padre de Julia lo alejan de mí, mientras yo lloro con fuerza al ser separada de la persona que amo.Después solo abro mis ojos y me doy cuenta, que fue solo un sueño. Mi frente está sudada, mientras que todo mi cuerpo se siente descompensado. Quiero gritar con fuerzas, pero al final me doy cuenta de mi realidad. Jasper y yo ya no están conmigo.Ya han pasado seis meses desde la última vez que vi a Jasper, en un hotel de paso rumbo a Atlanta. Muchas cosas han pasado desde que él se fue, o más bien, desde que lo alejaron de mí. El tiempo se ha ido como el agua, mientras que aún no lo puedo olvidar.Así que después de despertar, me levanto de la cama, mientras lentamente voy caminando hacia mi ventana. Ahora veo un nuevo jardín, ya que mi madre se ha s
Pero en este momento había muchas más cosas que aclarar. Hoy sería la audiencia de Max Duston, contra todas las chicas a las que había abusado. La primera persona en hablar sobre el tema y poner una denuncia, fue Julia, quien le abrió la puerta a muchas más chicas, para poder hablar sobre el tema. No podía creer que había tantas chicas que no habían hablado del tema, solo por estar en una comunidad cristiana. Yo misma al ver a tantas chicas abrir sus bocas, decidí hacerlo de la misma forma, yendo a testificar.La sala en donde se llevaría el caso de Duston, estaba llena de personas, había muchas familias de la comunidad que estaban ahí para poderse apoyar los unos a los otros. Era la primera vez que veía a toda estás personas, reunidas en otra parte que no era la iglesia.Yo fui acompañada por mi madre, quien aún seguía siendo bien vista entre la gente, mientras que George era la persona más odiada, ya que él hizo que la comunidad volviera a creer en la familia Duston, solo por dinero
Las dos tuvimos que ir a una de nuestra cafetería favorita, en donde siempre nos contábamos nuestros secretos. Pero esta vez era diferente, ya que a pesar de que teníamos muchas ganas de decirnos cosas hirientes, nadie dijo nada, hasta que llego la camarera con nuestros cafés.–Buen provecho. –Dice la camarera, dejando nuestros cafés en medio la mesa, mientras las dos permanecemos calladas.–Lea, lo siento mucho. –Se disculpa mientras toma mi mano de la nada. –Sé que no debí de haberte dado la espalda, cuando más necesitabas. –Me comenta mientras derrama algunas lágrimas. –Pero me sentía confundida, aún no me cabía en la cabeza que Jasper y tú habían tenido un romance. Y menos que estabas embarazada de él. –Yo misma la miró con algo de indiferencia. Me había costado muchas lágrimas haber pasado por tantas cosas, cómo perder a un hijo y en este momento, no estaba dispuesta a llorar más.–Pero tienes que entender que yo perdí a una hermana, tenía que estar del lado de mi familia.–Ahora e
Después de esa plática con mi mejor amiga, las dos bajamos por una gran escalera, para poder entrar al gran salón. Y cuando entro a la habitación, puedo ver a una persona, que se hace notar con mucha luz entre la multitud.El joven está vestido de soldado, mientras tiene una boina que comprueba que ha estado en una escuela militar. Todos están orgullosos de verle, mientras que a su lado hay alguien que le hace compañía. Julia trata de detenerme al ver a esa persona a su lado, pero yo no puedo más, corro con todas mis fuerzas hasta llegar a donde él estaba, para tocar su hombro, esperando ese reencuentro que tanto he fantaseado en mis sueños. El rencuentro del amor de mi vida. Y cuando nuestros ojos se juntan, me puedo dar cuenta que una bella mujer le toma del brazo, mientras ella también me mira con los ojos bien abiertos. Todo por lo que había pasado, se había roto al ver que Jasper se la estaba pasando muy bien al lado de esta misteriosa mujer.–¡Lea!–Dice el joven cadete mientras
Al subir a mi habitación, solo vi que era tan patética al guardar toda la ropa que el joven había dejado, que era estúpido como me había obsesionado con una manta, y como había perdido mi tiempo en esperarlo. Así que empecé a tomar todo, para poner sus cosas en bolsas de basura mientras mis lágrimas recorrían mi cara. Pero no puedo negar que la parte más difícil, fue tirar la manta azul, que representaba a mi hijo perdido.–Adiós. –Murmuré entre lágrimas, para después dejar todo en el basurero. Y cuando regresé a mi habitación, me di cuenta que todo estaba más limpio. Ahora podía ver una luz, que durante seis meses no vi. Por fin mi mente estaba un poco más clara, aún seguía lamentando mucho lo de Jasper, así que decidí escribirle una carta. Tome una hoja de papel blanca y una pluma, sentándome en mi escritorio, mientras miraba hacia el cielo oscuro.“Pensé que era posible. Traté de olvidar. Lo intenté todo en el pasado. Intenté volver a empezar, porque sabía que tú eras el único pa
Por la mañana, me levanto alrededor de las siete de la mañana. Tomando un baño y poniéndome un traje, que mi madre me había comprado, ya que las mujeres que trabajaban en el edificio comercial de Birmingham, usaban un uniforme de falda corta negra y un saco entallado. El uniforme me quedaba muy bien, aunque lo único que me molestaba, eran los grandes tacones que tenía que usar.Para ir al trabajo, se suponía que usaría el auto de mi madre, pero por el frio de la noche anterior, el auto no quiso arrancar, así que tuve que tomar un Uber, para poder llegar a el centro de Birmingham. La ciudad que era mucho más poblada que nuestro pueblo en Cadwell. Se me hacía muy curioso ver la ciudad por la ventana, disfrutando las tantas cosas que se podían hacer en esta ciudad. Al llegar a mi destino, puedo ver un gran edificio de grandes ventanales. Era bastante imponente ver como toda la gente, usaba el mismo uniforme que yo. Así que, al salir del auto, puedo sonreír un poco más, ya que esto pare
En ese momento, me sentía más confundida que antes. El auto se detuvo enfrente de la casa, mientras yo miraba la parte baja del auto, pensando en lo que Jasper había dicho, pero cuando estaba a punto de hablar, puedo darme cuenta que Jasper se ha bajado del auto y está entrando a la casa.Así que no tuve otra más, que seguirle los pasos hacía la casa, quizás para poder hablar sobre el tema, pero cuando entre a casa, me pude dar cuenta que no podía hablar con Jasper. El lugar estaba completamente adornado, como si de una fiesta se tratara. Supongo que no estaba tan lejos, ya que cuando llegue al comedor, pude darme cuenta que se daría de nuevo un banquete en nuestra casa.–¡Lea!–Dijo mi madre vestida con uno de sus bellos vestidos color gris.–¡Qué bueno que has llegado a casa!–Me dice como siempre, con una gran sonría en sus labios pintados de color carmín.–¿Qué es lo que pasa?–Le pregunté confundida, mientras dejaba caer mi bolso al suelo. Así que mi madre sin ánimos, da un suspiro l
La cena se había convertido en un todo desastre, así que cuando el tema de la boda volvió a relucir en la mesa, decidí acompañar a el señor Maxwell a la salida, ya que él se tenía que retirar.–Lamento mucho que mi hermano, se haya comportado de esa forma. –Le comentó mientras caminamos por el frio jardín.–No se preocupe señorita Thompson, su hermano es bueno debatiendo. –Me comenta mientras me mira cada vez más. Yo misma trago saliva, sintiendo como su mirada, recorre mi cuerpo en este hermoso vestido rosa.–Supongo que tiene talento, quería estudiar leyes. –Murmuré mientras ya estábamos enfrente de su auto negro.–Supongo que aún su hermano, no lo quiera admitir, compartimos el amor por las leyes. –Me comenta mientras yo estoy mirando hacía el suelo, tratando de evitar su mirada. Hasta que él posa su mano sobre mi barbilla, alzando mi cara hacía la altura de la suya. –Parece que está un poco perdida, señorita Thompson. –Yo solo mofo un poco, ya que en realidad él no sabía, cual per