12- Tu señora.

Todavía no puedo entenderla actitud que he visto en Erik en estos días, es como si no le interesara en lo absoluto por lo que Storm ha tenido que pasar. Cómo es que piensa que a Storm no le pasó lo mismo que a mi hermana, por supuesto que no le pasó lo mismo, lo de mi hermana fue un solo día, terrible, pero solo fue un día, en cambio Storm estuvo lejos por tres meses con esos malditos.Mi hermana no dejaba que la tocaran o que se le acercara un hombre, sin embargo aceptaba el toque de las mujeres, Storm es todo lo contrario no acepta ningún tipo de acercamiento o rose, lo que me hace pensar en todo el dolor que ha de tener por dentro.¿Habré hecho bien en pedirle que se case conmigo? Podré..— Darren..— el llamado por parte de mi mano derecha me impide seguir en mis pensamientos.Volteo mi mirada hacia él y me encuentro con un par de ojos oscuros como la noche

13- El acuerdo.

DarrenVer nuestras manos unidas y que no le afecta en gran medida me hace pensar que no me equivoqué en insistir para que fuera mi esposa. Al principio cuando me recordó sobre mi heredero me quedé un poco sorprendido ya que no había pensado en eso, mi meta era solamente que aceptara pero vi lo bien que en estos días se ha adaptado a mi compañía así que volví a insistirle que la esperaría. Lo que de verdad me sorprendió fue cuando me dijo que no quería dejar a su familia por lo que por el lado cínico y desgraciado de mi persona le recordé lo mal que la habían tratado su familia, lo incómoda que se sentía en este lugar. Lo sé, soy un desgraciado por jugar esa carta pero no me interesa, no cuando en estos momentos la tengo tomada de mi mano y aceptando ser mi señora....-Me pueden explicar qué está pasando aquí?- interr

14- Una historia.

Storm— Hija, tú, tú sabías sobre el acuerdo — me pregunta de una vez mi padre.— Sí, lo sabía desde hace tiempo. Tú y el padre de Erik estaban hablando sobre eso una tarde así que los escuché.— miro a Erik y suelto una risa algo estúpida y niego con mi cabeza debido a que ese fue el comienzo de todo.— Por eso fue que empecé a fijarme en Erik y a ilusionarme con él y al ver como me trataba se podría decir que llegué a sentir algo. — digo mientras recuerdo como parecía una boba tratando de llamar su atención o recibir algún elogio de su parte, que estúpida era.— Entonces sabes que este matrimonio que tienen planeado tú y Darren no puede ocurrir. — las palabras de sacan de mis pensamientos, lo que me hace recordar.— Dime una cosa padre, qué iba a pasar mañana una v

15- Ya estás a salvo

Darren Escuchar aquella historia de la boca de Storm me hicieron sentir varias cosas y una de ellas fue admiración porque de alguna manera supe que esa historia era mucho más que un simple cuento, era el relato de forma resumida de las cosas que tuvo que vivir y presenciar. Parece mentira que ella pudiera salir de allí por lo menos viva y sin perder la cabeza. Por otro lado uno de los sentimientos que sentí fue enojo e ira por no haber podido ayudarla, por no haber buscado más por no haberla encontrado y haberla ayudado cuando me necesitaba.... Me dolió el corazón.... Voy llegando a mi habitación cuando en medio de la noche siento un grito de terror provocando que cada pelo de mi cuerpo se pusiera de punta y que mi corazón se detuviera por un segundo para después salir desbocado. “Storm” fue lo único que vino a mi mente por lo que sin pensarlo emprendo a correr por aquel pasillo solos alumbrados por unas simples velas. “Qué habrá pasado?

16- La despedida

Storm Me despierto de un sueño profundo, aliviada de que anoche no me haya despertado por causa de una de as pesadillas que siempre me acompañan. Cuando empiezo a ser consiente de donde estoy, me doy cuenta de que mi cama se mueve de forma suave y que no es suave como normalmente, al contrario se encuentra algo dura pero cómoda a la vez y que esta suelta un calor reconfortante. Empiezo a tocar de forma suave con mi mano toda la superficie cuando de pronto mi mano es detenida por el contacto de otra. — Por mucho que disfruto de este despertar creo que es suficiente por el momento.— escucho una voz algo ronca que me hace abrir los ojos e incorporarme de forma rápida. — Darren.— digo de forma sorprendida. — Buenos días a ti también.— dice con una sonrisa en los labios y yo solo puedo tragar de forma ruidosa producto al estado de sorpresa en el que me encuentro.— — ¿Qué, qué haces aquí?- pregunto con nerviosismo mientras me ta

17- Enemiga

Storm Durante todo el viaje mi cabeza recreo diferentes formas de recibimiento en este clan, una y otra vez pensé en lo que pasaría y en cómo las personas me recibiría, pero nunca, nunca, me pasó la idea de que vería a una mujer abrazando y besando en mi propia cara a mi marido. —Tracy—dice Darren una vez que se logra liberar del agarre de la mujer. —Darren por fin llegas, no sabes cuanto te extrañamos.—dice con una voz melosa que me obliga a evitar poner los ojos en blanco.—Estábamos tan preocupados por ti, en especial yo que no veía el día en el que regresaras, la espera se me hizo eterna.—intenta volver a abrazarlo pero esta vez lo evito tosiendo falsamente sin dejar de mirarla, ya está bueno tantas muestras de cariño. Al escucharme voltea a verme y con una mirada de total desprecio me mira de arriba a abajo, otra persona que no le agrada mi vestimenta. —Dis

18- Celos y besos

19- Primer enfrentamiento

DarrenCada contacto que hacía su respiración en mi cara, cada caricia de sus manos por mis brazos o cabello, unido a cada movimiento de nuestros labios hacía que mi sangre se agitara y mi corazón se acelerara, descubriendo que Storm provoca exactamente en mi lo que su nombre significa, una tormenta. Nunca he podido llegar a sentir con un beso lo que con los suyos estoy sintiendo y no hablo del deseo, el deseo existe y lo sabe cada llama de fuego que recorre por mi cuerpo, hablo de los sentimientos, de los sueños que me hace querer llegar a tener con ella a mi lado.Me alejo con pereza y a la vez reticencia ya que lo que en realidad quiero es llegar a fundirme en ella pero soy consiente de que por muy bien que ella se encuentre en estos momentos, no está lista para dar un paso tan grande como el de entregarse voluntariamente.—mmm.—la escucho y la miro atentamente