ALASKASoy yo la que llama Abel para disculparme. Debí marcarle antes pero ayer, definitivamente no era yo. O si, ya no se, lo que si es cierto es que ahora me maldigo por dejarme llevar.—Perdóname amor por no llamarte antes —me limpio las lágrimas—lamento preocuparte de esta manera. Intento no sollozar para no llamar su atención y agravar mi situación con el.—Cielo sabes que te amo mucho, no vuelvas hacerme eso, pase una noche de mierda pensando lo peor. —Te amo, te amo mucho de acuerdo.Sonríe, le encanta cuando le digo así y es que necesito decirlo para convencerme. Es a el a quien amo, a quien deseo, es Abel el hombre de mi vida y quien desata mis pasiones.—Yo también, sabes que eres mi vida por ello no hagas cosas que ponen en riesgo tu vida, no sé qué hubiese pasado si Bruno no está a tu lado. Su inocencia me parte el alma. —Sí, fue bueno conmigo—no quiero hablar más de eso—tengo que darme una ducha y volver al trabajo, quiero terminar lo más pronto posible para volver co
ALASKATome el primer vuelo de Venecia a Roma. Mi novio me recibe y camino arrastrando la maleta. Esquivo a las personas tomando la salida donde espera Abel.A veces el mismo universo nos envía señales para enseñarnos que no estamos solos y veamos que pasamos la vida observando otras cosas y no a las personas correctas. Abel es la persona correcta. Es un viaje comercial, no pude dejar de pensar, condenarme por lo sucedido y me siento fatal. Mi novio me espera recostado en el auto y apenas me ve, Sonríe abriéndome los brazos. —Mi amor —Dios mío, me besa apasionadamente. La expresión de alegría por verme me hace sentir más horrible, Consigo seguirle el beso con el pecho cargado, lleno de sentimientos contradictorios porque si bien lo quiero, ya no siento que lo amo como antes. —Te extrañe mi vida —une su cabeza a la mía —¿como te fue? ven para que me cuentes los detalles. Preferiría no hacer eso, pero al subirme al auto le cuento como fue el tema de las grabaciones, y que eso sí me
ALASKA Mi hermana es la primera en recibirme cuando ingresamos a casa. Abel por supuesto me acompaña y abrazo a mi pequeña revoltosa mientras le doy varios besos en el rostro. La amo demasiado, ella es mi vida. —¿Como te fue en Venecia? dime—como desearía que las personas dejaran de preguntarme. Eso lo único que causa es que me atormente más de lo que ya estoy. —Perfectamente mi amor, después hablamos de eso. —No la atosigue con lo mismo Camila—es mama—déjala respirar. Mi hermana saluda Abel que trae una tarta de manzana. Mamá es otra que elegantemente me recibe y me sorprende, no sé qué ha pasado con el tema de la infidelidad de mi padre. Pero se ven que las cosas van mejores después de todo. Tras de infiel y pésima novia, mala hija también. —Tu como siempre de caballero—Mamá abraza a mi novio después de recibir el regalo. —Siempre es un placer cenar con ustedes, sobre todo cuando es usted la que cocina. —Todo lo hice yo—alardea mamá, Abel siempre ha rescatado esa saz
ALASKAMe pongo de pie para abrazarla, a papá también y todos hacemos lo mimos. En verdad me alegra demasiado la noticia, despejando mis dudas del amor que mi padre sentía por mamá porque siempre, lo único que note en este hombre fue un amor incondicional hacia mí mamá. Terminamos de comer en una tensión horrible, la noticia minimizo todo, pero aun así, todo se estropeo con la pequeña discusión.Casi no pasó la comida y el postre nadie quiere. De la mesa pasamos a la sala donde con música suave bebemos una copa de wiski, pero cada quien repartido. —Cómo íbamos de bien, tenía tu novio que abrir la boca para complicar las cosas. Se queja mi hermana y niego.—No es culpa de Abel—le habló a Camila para que no diga cosas que no son culpe a la persona equivocada—es papá que no puede entender que ambas queremos cosas diferentes.—A veces quisiera ser hombre o que me gustara lo que él quiere para verlo feliz, creo que lo defraudados hermana—No te sientas así, yo pasé por lo mismo que tú,
ALASKACamino de un lado a otro en la sala de espera del hospital. Mi padre lo están atendiendo por urgencias mientras mi hermana intenta calmar a mamá que no para de llorar y yo de sentirme fatal. —Tomate esto mi amor—es Abel –Te hará sentir mejor.No recibo nada, ahora no soy capaz porque la angustia tiene un nudo en mi garganta que no me deja ni hablar. Casi no puedo ni respirar con este profundo sentimiento de culpa que me embarga.—No quiero, gracias mi amor.—Por favor nena, te hará bien. Niego volviendo a lo único que me mantiene cuerda en este momento y es caminar. Abel le lleva la bebida a mamá que se toma menos mal. Creo que es aromática o algo así, para calmar los nervios.El cargo de conciencia no me deja en paz y es que le dije palabras muy hirientes a mi padre y si algo le sucede es mi culpa, solo mía. No debí decirle todas esas estupideces y descargar mi frustración con el que solo quiere lo mejor para mí. Los minutos se hacen largos y mi única opción es pedirle al a
ALASKA La semana a pasado y con eso, Bruno llega hoy a la empresa. Pará colmo, mañana mi novio viaja a presentar el proyecto y aunque deseo acompañarlo, debo atender algunas cosas aquí. No quiero volver a quedarme a solas con Bruno, saben lo que se desata cuando estamos a solas y no quiero volver a cometer el mismo error. Papá ya está mucho mejor. Y eso es algo que debo agradecer ya que debe tener unos cuidados muy específicos. El pre infarto es un aviso y le estamos prestando mucha atención. Mamá lo cuida, ya ha dejado encargados de la empresa para poder tomarse con calma su recuperación y me comprometo ayudarlo mientras el vuelve al ruedo. Le deje claro que esto que hago es mientras se recupera y puede confiar en dejar a cargo a una persona responsable en el cargo. Por esa razón no puedo acompañar a mi novio. Lo bueno es que no me mantendré aquí todo el tiempo. Que estuviera en Venecia me dio el tiempo para pensar con más claridad y contradictoriamente estoy peor porque no de
ALASKA Para cuando me doy cuenta estoy envuelta en documentos ya que pedí a su secretaria todos los registros de este año. Jesus, esto me tomara mínimo dos días sin parar. Nunca he tocado las finanzas de mi padre, por ello si quiero ayudar, debo empaparme de todo. Se me consumen los minutos, prácticamente toda la mañana empapandome del tema y pensaría que es difícil pero no, de hecho si me decidiera a tomar el mando, sería menos agotador y con menos responsabilidad pero no es algo que me llene completamente. —Me iré almorzar señora, es mi hora de descanso, desea algo antes de que me vaya. —No te preocupes, ve a tu descanso que estoy bien. Asiente saliendo de la oficina. Este es un espacio pequeño donde llegan la información de todos los negocios de mi padre. Los hoteles, restaurantes, e inversiones. No son más de diez trabajadores que reducen la carga laboral simplificando las cosas, sin embargo, sigue siendo un trabajo de mucha responsabilidad. Me pongo de pie para servirl
ALASKA Mi menor amiga camina de un lado a otro sin poder creer lo que yo acabo de soltarle. Simplemente dije... Le fui infiel a Abel. —Pero no entiendo Alaska, tú lo amas, siempre entre lo dos he visto ese amor incondicional y leal. Si pero las cosas cambiaron desde que lo conoci a el. —Ese es el problema Mariana, ya no sé si lo amo como antes. Suelta el aire tomando mi mano y llevándome al sillón para estar más cómodas. No olvida la botella de vino porque esto con agua o en seco no puedo pasarlo. —A ver amiga—suspira —¿quién es el hombre? —Me da miedo decirlo. Niega tomándome de la mano, dándome un leve apretón mientras me mira a los ojos —Tranquila solo confía en mí. —Bruno—le suelto de una vez —¿Cual Bruno?—aún no capta el nombre. —Bruno Vitale, su mejor amigo, y ahora socio. Se lleva la mano a la boca cubriéndola completamente impresionada. —Mierda—exclama —pero no entiendo, a ti no te gustaba de hecho lo odiabas por el ser como es. —Pues al parecer deb