—Eres terco como una mula —gruño Gabriela—. Tienes que hablar con mi tía Catrina, mi mamá me dijo que aún sigue echa un mar de lágrimas desde que le contaron que te enteraste de todo.
Estefan gruño en respuesta.
—Déjalo Gaby —Joon se metió un poco de nueces a la boca—. Es como hablar con una pared, este tarado no entiende.
Jose intentó hablar, pero Gabriela le metió una cuchara de sopa en la boca impidiéndoselo.
Habían pasado ya varios días desde que Alan se había ido y de que destituyeran a Jaime. Aunque Jose ya se encontraba muy bien, Gabriela no le había permitido levantarse de la cama.
En principio le había gustado recibir todos las atenciones de su mate, pero ya empezaba a cansarse de no poder hacer algo solo como comer. Miró a su alrededor, todos los mocosos habían veni
—¡Una semana! —Noel empezó a bailar de manera muy graciosa—. ¡Una semana y se termina la escuela!—¿Por qué estás tan feliz por eso? —gruño Lana—. La próxima semana se acaba la escuela y no tengo la menor puta idea de qué hacer con mi vida.—Yo tampoco —dijo Candace con gesto triste—. Supongo que me convertiré en una protectora del bosque o algo así, tendré que hablar con el Alpha Víctor para que me de permiso de quedarme en la manada y de aprender algo de los chamanes.—Te lo dará de todas maneras —Theo le sonrió a Candace—, le caes muy bien.—¿No entienden lo que pasará la próxima semana? —dijo Noel emocionado—. ¡Será la gran luna! ¡Muchos de nosotros encontrara a su mate!—Yo supongo que tendré un puesto
—¿Qué observas tanto? —preguntó Liam curioso.—Mira tú mismo.—Es Bael —Liam suspiro—. Ese tonto seguro está pensando si debe entrar.—Seguro no lo hace por el comportamiento de Estefan.—Creo que iré a traerlo —dijo Liam intentando levantarse.—No —Leia lo detuvo—. Creo que iré yo.—¿Sí? —preguntó Liam algo confundido.—Es tu cumpleaños y todos notarán si no estas. Es mejor que yo vaya y lo traiga, además que hablaré con él primero, no cruzamos palabra desde un encuentro nada amistoso hace algunas semanas.—¿Sí? —volvió a repetir Liam como un tonto.—¿No te molesta cierto?—¡Para nada! —Liam se aclaró la garganta, ya que había sona
—No es posible —Concetta lo miraba como si estuviera demente—. No es posible que hubiera tantos vampiros dentro de esa iglesia sin que mi gente lo detectara. Está bien que uno o dos vampiros se mezclaran, ¿pero 30 o 40?, eso es imposible, estás loco.Alan puso los ojos en blanco.—Y si fuera cierto —dijo Concetta escéptica—. Entonces con más razón deberíamos llamar a mi hermano. No creo que podamos…—¿Has olvidado quién soy? —le interrumpió.— ¿Ahora eres un demonio completo cierto? —dijo burlándose—. ¿Es verdad que te salen cachos?Alan gruño.—O me ayudas o te mato, es tu decisión —respondió él.Alan no podía matarla, pero eso ella no lo sabía.—Te has vuelto un cascarrabias total —bufo Concetta&mdas
—Tienes que avisar —Concetta lo miró con ceño—. No puedes hacer esto tu solo Alan, sé que eres muy poderoso y todo, pero esto no solo iría en contra de los hombres lobos, esto iría contra la vida de cualquier ser viviente en la tierra.—¿Crees que no lo sé?—Tienes que hacer una reunión de manadas —Concetta empezaba a desesperarse—. Cada manada puede buscar en sus áreas correspondientes y…—¡No se puede hacer eso! —Alan señaló los cuerpos de los hechiceros muertos—. Eso pondría de sobre aviso que iremos por ellos y también podría llegar a oídos de seres que los buscarían para sacarle provecho, ¿te imaginas un demonio bebe completo en manos equivocadas?Concetta paró de caminar por aquel oscuro y terrible lugar, miró todo a su alrededor y s
—Creo que no puedo respirar —Noel se agarró del brazo de Theo—. Voy a llorar de la emoción.—No seas exagerado hombre —Theo lo empujo—. Me costó mucho planchar este traje para que tu vengas a arrugarlo.—¿Y porque lo planchaste tú? —se burló Noel—. ¿Por qué no lo mandaste a una tintorería?—¿Una qué?Noel puso los ojos en blanco.—¿No hay tintorerías en el reino?—Seguramente —Theo lo miro confundido—. Si supiera de qué hablas seguro lo sabría.—¿Es que hacían todo por ti?—Bueno —Theo se encogió de hombros—. Tenía criados que hacían todo por nosotros, ¿Qué te puedo decir?Noel bufo.—Maldito niño rico.Theo lo fulmin&oacut
—¿Por qué tengo que hacer esto? —gruñó Liam, algo insólito ya que solía estar sonriendo la mayoría del tiempo—. ¿Por qué yo siendo el príncipe heredero tengo que organizar los estúpidos bailes?—Para que estés diciendo tu puesto es que la cosa está fea —hablo Gabriela ingresando, sacándose los grandes lentes de sol y levantando la mirada.Liam miró a su prima y detuvo su impulso de gritarle.—Es casi mediodía y tú debías estar aquí desde las ocho de la mañana para ayudarme.—A las ocho me levanto y me toma un buen rato desayunar, elegir qué hermosa ropa ponerme, con qué accesorios combinarlo, qué zapatos me sacara mejor figura y que tipo de maquillaje colocarme —Gabriela lo miró como si estuviera loco—. ¿Sabes lo dif
—Los odio —Gabriela bufo mientras caminaba hacia sus primos—. Los estadounidenses son unos imbéciles.—¿Qué dijeron ahora? —preguntó Liam.—Me preguntaron si me alimento de niños —espeto Gabriela.—¿Enserio? —Liam intentó no reírse.—No hay manera de que sea alfa de esos territorios —Estefan negó con la cabeza—. Los mataría después de algunas semanas.—Menos mal no sabes coreano —dijo Joon tomando un poco de ponche.Bael llegó a ellos con su gesto común de aburrimiento.—Hay algunos chicos que están preguntando si van a servir carne de cebra en el festín —dijo curioso y miró a Liam—. ¿Pediste alguna carne rara?—Deberías decirles que se las serviremos y se las meteremos por el…
Estefan miró indignado como Bael corría dejándolo con el bulto de su gemela.—Sácame de aquí por favor —susurro Gabriela.*Ella está cerca* dijo Abaddon en su interior con alegría *Al fin estará aquí*Estefan miró a Joon, un olor espectacular salía de él.—Nos vemos donde siempre nos encontramos ¿sí? —dijo Estefan mirándolo suplicante.—Llévatela ya —dijo Joon alterado.Estefan desplegó las alas y voló con rapidez al área del bosque donde solían pasar tiempo Joon y él, donde había un pequeño lago.Gabriela se retorcía en sus brazos.Antes de aterrizar sintió una sacudida dentro de él. La luna ya había salido y él aterrizó con prontitud de manera violenta. Soltó a Gabriela y empezó a gritar cuando todos los huesos de su cuerpo empezaron a romperse.Ya era un lobo transformado cuando se dio cuenta de que alrededor de ellos había un fuego negro y corrosivo. Un fuego que salía de la misma Gabriela.Noto que a Gabriela le había aparecido una especie de chispa en la frente de la cual empeza