Robert imitó la expresión del anciano. “Tienes razón. Habría estado bien no asistir si Fane solo estuviera celebrando un cumpleaños, pero ese pequeño mocoso tuvo que animarse y organizar una boda en su lugar. Probablemente quería darle una sorpresa a Selena. Por eso hizo todo esto. ¡Pero nos lo está poniendo difícil!”.

Un hombre de una familia aristocrática de tercera clase intervino: “¿A quién le importa? Él ni siquiera se molestó en decírnoslo. Estará bien aunque no vayamos. La familia Gold envió las invitaciones hace mucho tiempo. Será una pena si no nos presentamos. Creo que deberíamos asistir a la boda del Joven Amo Gold”.

Robert asintió con la cabeza, sonriendo. “Sí. Vayamos primero a la boda de la familia Gold. No debe de haber sido fácil para Fane reservar un hotel tan grande como ese. ¡Probablemente habrá otros que asistan a su boda!”.

En un instante, todos acordaron ir al hotel de seis estrellas.

“Papá, Fane fue quien reservó el hotel de siete estrellas. Incluso inclu