Magnus estaba muy feliz cuando Blake comenzó a ceder.

Al ser dos mujeres famosas, diosas que tenían lindas figuras, muchas personas a menudo intentaban coquetear con ellas.

No pensó que hoy tendría la oportunidad de acostarse con estas dos mujeres.

Las dejó ir una vez que empezaron a ceder y dijo: “Es bueno que lo entiendan. ¡Ahora quítense la ropa!".

Tianna se sentía incómoda pero no tenía otra opción. Solo pudo empezar a desabotonarse la ropa.

Magnus, que bebió bastante vino, se emocionó aún más al ver sus delicados rostros. Dijo con impaciencia: “¡Eres demasiado lenta! ¡Deja que te ayude!".

Luego miró a Blake, que estaba a su lado, y dijo: "¡Tú también, quítate la ropa por tu cuenta!".

"¡Ayuda!", Blake apretó los dientes y gritó. No pudo detener los pensamientos de su corazón y salió corriendo.

“¿Estás tratando de morir? ¿Cómo te atreves a desobedecerme?”, Magnus no esperaba que esta mujer fuera tan terca. Inmediatamente corrió hacia ella y la agarró por su pelo largo, tiran