”Imposible. Ella podría robarte de mis manos, a nadie le importa. Después de todo, ¡no tienes que preocuparte por el dinero si te vas con ella! ¡También es bueno para ti tener una esposa gorda!", Selena se puso emocional pero no quiso admitirlo. Se volteó y caminó hacia la casa.

Ella no esperaba que una mujer se confesaría y propondría matrimonio a Fane, justo después de sus pocos días de regreso a casa.

Al principio Selena pensó que era la joven rica que usaba una máscara y tenía una linda figura.

Si Fane tuviera una relación con la mujer, ¿la abandonaría a ella y a su hija? Ella sería la broma más grande del mundo.

No tenía idea de que sería la señora gorda, Sharon George.

“Aunque está gorda, tiene una buena fundación. ¡Será una noticia vital cuando Sharon se convierta en una bella dama después de tres días!", Fane sonrió con indiferencia y rápidamente recordó algo. Se golpeó la cabeza y exclamó: “Mierda, me olvidé de recordarle que no le dijera a nadie cómo la ayudé a adelgazar