Viendo la figura de Ella mientras se alejaba volando, Alejandro frunció el ceño y cientos de emociones llenaron su corazón.

En ese momento, un anciano de la familia Cabello, dio un paso adelante y le susurró a Fane: “Joven Amo Fane, ¿de verdad va a dejarla ir? ¿Así de fácil? ¿Y si vuelve a su clan y les cuenta a los demás lo que pasó aquí? Por nuestra seguridad, ¡sugiero matarla ahora! ¡Está herida y no es rival para usted!".

Sin embargo, la propuesta del anciano fue recibida con una mirada fría y cruel de Fane. “¿Desde cuándo somos fanáticos de no cumplir con nuestra palabra? ¡Le prometimos perdonarla!”.

Fane dejó de hablar y una sonrisa seca apareció en su rostro. “Además, ¡nos dio mucha información útil! Información que podría salvar nuestras vidas. Si no nos hubiera dicho todo eso, habríamos salido descuidadamente y habríamos entrado en el territorio de la Guardia de la Alianza. Y si entramos en su territorio, ¿crees que tendríamos una oportunidad de vivir?”.

“Fane tiene razón.