Doménica Su regreso sacará de inmediato a ese perro del camino de mi hijo. Y todavía tengo que resolver esa estúpida petición de Kayon, Valentina no querrá ir a la cárcel a verlo. Pero hasta que se fuera, podría ser bueno para mí, seguramente se enfrentarían y de una vez ella saldría de nuestras vidas. ¡Lo veré mañana!Kayon estaba en su celda acostado en esa cama dura, donde había pasado los últimos 20 años, estaba recordando ese día en que lo había perdido todo, cerró los ojos y parecía volver a la vida.— ¡Papá, voy a patear ahora!— Sí, hijo con bastante fuerza, como te enseñé.— ¡El almuerzo está listo!— Vamos a entrar en Doménica. — Karen estaba sentada esperando jugando en el suelo y era una niña hermosa y muy inteligente.Benicio corrió con el balón bajo el brazo.— Ya te pedí que no corrieras entre los muebles, ¿no tienes miedo de golpearte la cabeza? — advirtió Dominica.— ¡Soy una mamá superheroína, nunca me lastimo!Kayon entró y tomó a Karen en sus brazos, dándole vario
Kayon quería gritarle y quitar ese pecado que ni siquiera existía, del corazón de ella y de Benicio, pero si decía la verdad, se condenaría a prisión nuevamente y se llevaría a Domenica con ella.— ¡Perdóname por todo Valentina, por favor! Sé que es difícil preguntar, pero créeme, mírame a los ojos. ¡Mirar! — Gritó y siguió hablando. — No quería matar a tu madre, la amaba y estaba dispuesto a dejarla ser feliz contigo y Donato… aunque en ese momento cuando cometí ese crimen, también sentí odio por ti. Pero esa furia no salía del corazón, ¡era algo diabólico!Valentina recordó cómo había sido Benicio cuando fue víctima de esa posesión.ValentinaBenicio ha mostrado una furia sobrenatural contra mí, pero no sé qué pensar. ¿Qué pasa si Kayon ha pasado por algo similar en el pasado?— No sé qué suponer.— Tienes buen corazón, entiendo por qué Benicio sufre tanto por perder… ¡Ya no sé! Es demasiado pronto para tratar de perdonarme, pero piénsalo. ¡Por favor piensa! — Intentó tomar su mano,
Los cuatro fueron a su casa.— Mamá trae el vino que compré y la cena que pedimos. — le preguntó Salazar a su madre, visiblemente feliz a pesar de todo.Todos cenan en esa hermosa mesa, pero la tristeza reinaba en los ojos de Valentina, y solo podía pensar en Benicio.— ¿Me acompañas un momento? — Salazar tomó la mano de Valentina y la llevó a su habitación, se agachó y recogió un joyero.— ¡Esto es para usted!— Gracias, pero no puedo aceptar tu regalo. — dijo ella, devolviéndole.— ¡De ninguna manera, aceptarás que sí y abres!Suspiró y abrió esa caja y observó los dos gruesos anillos de oro.— No deberías haber comprado esto.— ¿No te gustó? — preguntó tocándole la barbilla, Valentina miró hacia otro lado.— Sabes que nuestro matrimonio no es como los demás.— Lo sé, ¡pero una alianza te hará entender que ahora es mío!— ¡No soy tu Salazar, no me hables como si fuera una cosa!Salazar tiró de su mano con fuerza, puso el anillo en su dedo y luego puso el suyo en su dedo, con la mism
ValentinaNecesitaba pensar bien qué hacer, si me iba con mi abuela Carmem, Salazar se lo cargaba todo con Benicio y hasta con su familia. Necesito ganar tiempo para alejarme de aquí, pero cuando Benicio y su familia también estén a salvo.Todavía estaba sentada en la cama cuando Kesia llamó a la puerta.— Valentina, ¿puedo pasar?— Usted puede, señora.— ¿Todo bien?— Sí. — respondió Valentina con frialdad.— Aquí tienes una muda de ropa. — Kesia supo que por su expresión abatida algo andaba mal.Valentina se duchó, se vistió y se fue a su casa.— Valentina hija, pasé una noche sin dormir, pensando en ti y en lo que podría estar pasando.— ¡No te preocupes por mí, abuela, necesito que confíes en mí, como yo confié en ti antes!— Confío, pero dime ¿qué quieres?— Me voy a vivir con Késia y Salazar. — Dolía dejar a Carmem que era una verdadera madre para ella, pero necesitaba ganar tiempo para que los dos pudieran escapar a salvo de ese lugar.— ¡Si esta es la solución que encontraste,
Salazar salió de la ducha con el pelo mojado, se puso un perfume ligero y Valentina estaba leyendo uno de sus libros universitarios sin prestarle atención a él ni a lo que estaba haciendo. Salazar se quita la toalla y se pone ropa interior y shorts, pues esa noche hacía mucho calor, y se sienta en la cama masajeando uno de los pies de Valentina.— Seguimos de luna de miel, puedes dejar tus estudios para después, ¡mañana es domingo mi amor!— Tu habilidad para disimular es admirable, ¿has olvidado lo que me hiciste ayer?— ¡Perdóname reina, pero me retaste y no olvides que fuiste tú quien me apuntó con un puñal!— Para mostrarte de lo que soy capaz. — Ella dijo.— ¡Yo también te mostré ayer de lo que soy capaz Valentina!— ¡Entonces veremos cuál de las fieras devora primero! — lo retó Valentina y él no pudo admitirlo, la jaló del talón haciéndola acostarse en la cama y saltó encima de ella con todo.— ¡Ay idiota! Lastímame.Me dolerá más cada vez que me desafíes.— Sé inteligente Salaz
Dos meses después…Valentina siguió viviendo con Salazar aun sin amor, pero había aprendido a tratar con él. No hacían el amor con tanta frecuencia como a él le hubiera gustado, pero ella trató de mantenerlo tranquilo y nunca volvió a amenazar su vida ni la de Carmem.Kayon estaba de regreso en el clan y eso había causado malos sentimientos entre él y Carmem, quien aún se mostraba reacia a aceptar su presencia entre ellos. Benício seguía sufriendo por Valentina como ella por él, Kayon se sentía sofocada por tantos secretos y culpas, mientras Doménica estaba llena, porque tenía a su esposo de vuelta y su hijo estaba lejos de Valentina, como siempre quiso.Adriana ya tenía un bulto después de 4 meses de embarazo y siempre usaba ese embarazo para que Benicio se sintiera atado al compromiso de estar con ella, había logrado volver a acostarse con él, porque a pesar de que Valentina estaba con Salazar de alguna manera lo hacía querer tomar venganza.Era domingo y Valentina estaba jugando co
Finalmente, Benicio se convence de ir tras pensar y confiar en las palabras de su padre, Karen lloraba como una niña por alejarse de Salazar. Aunque sabía que las posibilidades de algo con él eran nulas.Empacaron todo de la noche a la mañana y se fueron… Amanece y las especulaciones sobre la partida repentina de la familia, ya estaban esparcidas.ValentinaKayon se los llevó, gracias a Dios… ahora necesito encontrar la forma de escaparme con mi abuela. Dejar este clan y correr como un cobarde nunca fue una opción para mí, pero no puedo condenar al niño que tengo a llevar una vida miserable como la que estoy teniendo.Salazar se enteró de su partida, estaba feliz ya la vez con más miedo. — Mamá, de ahora en adelante quiero que te quedes cerca de Valentina, saldré y la recogeré todos los días en la universidad. — ¿Por qué esto ahora, hijo? — Sabes que Kayon se llevó a la familia de aquí. — ¿Crees que ella pueda ir tras ellos?— Tal vez mamá, ya no sale sola de esta casa y mucho me
Carmem se fue y todavía estaba tratando de entender la dinámica de esos crímenes y misterios, si fuera realmente cierto habría odiado a Kayon por haber eliminado injustamente a su hija. Sí, no lo habría hecho solo y mucho menos de buena gana.Valentina hacía todo lo posible por encontrar una salida para escapar de allí, pero Salazar nunca la dejaba sola, ordenaba que la vigilaran día y noche. Hasta que un día, un hombre muy elegante llega al campamento y todos lo miran intrigados por el motivo que lo podría llevar allí.— Hola señora, mi nombre es Antenor Sales y soy abogado, ¿me puede decir dónde puedo encontrar a Benício y su hermana Karen Aguirre Coimbra? — pregunta saludándola con un apretón de manos.— Lamentablemente, no puedo ayudarte, porque ya se fueron hace rato. — respondió ella, había una inmensa curiosidad creciendo dentro de ella y de todos en ese lugar, ¿qué haría un hombre tan elegante allí buscándolos?— ¡Dios! ¡Llevo muchos meses buscándolos y ahora pensaba que por f