~Kendal~
Pequeña. - Suspiro porque se que esto me dolerá mucho pero es lo que tengo que hacer, irme y esperar que ella tome la o las decisiones y haga lo que mejor que crea, ¿La amo? Si, pero eso no significa que tenga que mentirle y mantener una relación a escondidas con ella ya que si mi tío descubre todo lo que hice lo nuestro tendrá un final sin marcha a volver y prefiero tomar el riesgo de que sea ella quien elija sobre nosotros.
- Cuando leas estos papeles y cuando sepas quien soy en realidad nada de esto será igual y eso me da miedo y mucho, pero es lo que me toca y debo aceptarlo tal cual, ya que no puedo cambiar nada de lo que ya he hecho.
Hola...
La verdad espero que estén disfrutando de esta historia...
Después de escucharla decir una barbaridad de cosas que no le presto mucha atención y dejarme la ropa que tengo que usar en la noche encima de la cama ya preparada se va dejándome solo y pensativo.Tengo que saber si ya Blanca vio los papeles y sobre todo la carta que le deje explicándole quién soy en realidad o por lo menos que se haga una idea.No voy a negar que estoy nervioso y sobre todo inquieto por saber qué pasará esta noche en la dichosa cena de compromiso.No dejo de mirar la foto que tengo de nosotros cuando estábamos en la cabaña.*- ¿Qué haces?- Quiero
~Blanca~Miro todos los papeles que Kend me dejó dentro del sobre. - Dios, es prácticamente todo lo firmado por mi padre. - Digo en voz alta mientras me encuentro con todos los papeles tirados por la cama.Esta mañana cuando me levante Kend ya no estaba conmigo pero tampoco me dio tiempo de revisar el sobre que me dejó ya que tenía que ir a la empresa con papá. Mii tío se sorprendió cuando me vio llegar y más aún cuando papá le dijo que entraba a trabajar, por su cara pude ver que eso no le sentó muy bien que digamos, no le dimos mucha importancia y como me había dicho mi padre yo no tendría autorización para buscar ningún papel sin su autorización ni la de mi tío.
- Cariño que se hace tarde.Escuchar a mi padre gritar desde las escaleras para que me de prisa e ir a un lugar donde no tengo mucho deseo de estar, la única persona que me anima en ir es Kend, que aunque no esté aquí pidiéndolo me imagino lo impaciente que estará para verme como lo estoy yo por verlo a él.- Ya estoy papá.Se queda mirándome mientras bajo con este vestido que tanto le gusta y que me regaló para uno de mis cumpleaños.- Te ves hermosa, cariño. - Cariño quizás no lo recuerdes pero aquí está Samu, perdón. - Dice mi padre sonriendo mientras él le reclama con la mirada. - Kendal.Escuchar a mi padre mencionar su nombre con tanto cariño hace que todo dentro de mi se revolucione, lo miro a los ojos y puedo ver súplica en ellos.¿Qué hago? ¿Digo todo aquí? ¿Espero a que me explique? ¿Qué me dirá?- Blanca cariño, ya se que estas molesta con tu primo por desaparecer, como tantas veces me has dicho que se fue y para no volver, pero estamos aquí celebrando que volvió y su compromiso con Paola.Mi padre habla siCapítulo 38
Después de cenar están todos muy entretenidos hablando y riendo y las veces que le he mirado disimuladamente está mirando a la mesa y Paola al lado tratando de llamar su atención, aunque podía demostrarle que yo podría tener más poder en él que ella, levanto mi ceja al pensar así y sale una pequeña sonrisita.- Samu. - Lo llamó y él de inmediato levantó la cabeza para mirarme. - ¿Cómo está la tía Sandra?Al preguntar puedo notar mucha tensión entre Samuel, mi padre que está a mi lado y llevo mi mirada a él, ¿Qué ha pasado? Después de mirar a su padre y yo al mío nos miramos y tienes sus ojos cristalinos. Entro a la casa y detrás de mí entra Andrés, desde que me encontró no hemos hablado de nada salvo cuando le pregunté si quería venir a casa para tomar algo. Al entrar me dirijo directamente donde está el mueble bar, busco dos copas de whisky y le entregó una a él.No deja de mirarme y sé que no entiende nada pero tampoco creo que sea la persona idónea para contarle todo lo que me ha pasado, pero por el momento si lo es para tratar de olvidarme de todo aunque sea por una noche o un rato.Mientras el sigue con la misma copa que le serví, yo ya llevo cinco y tengo la copa número seis en la mano.- No te voy a pedir que me cuentes nada si noCapítulo 40
Después de ducharme y estar presentable para la larga conversación que tendré con mi padre y bajo a desayunar para encontrarlo sentado con su café, periódico y su ceño fruncido.- Buenos días. - Me atrevo a decir y lo veo levantar la cabeza para afinar sus ojos en mí y después volver al periódico y decir buenos días entre los dientes.Ok, no es la primera vez que estamos en esta situación, yo con cara de arrepentida y mi padre con el ceño fruncido y demostrándome su enfado.- Papá. - Empiezo pero él solo levanta la cabeza para mirarme y hacerme entender que en el momento no quiere escucharme.
- Peque.No se que siento cuando le escucho llamarme así, pero si antes estaba sin respirar bien ahora se añade mi corazón a galope y no puedo controlar ni uno ni otro.- Pequeña, entiende a tu papá que sólo quiere cuidarte.Me dice cuando está detrás de mí y doy la vuelta para quedar frente a frente y por más que trato de tranquilizarme no puedo, puedo sentir como mi pecho sube y baja y mi boca se va quedando seca.- Se que ahora tenemos que actuar como si casi no nos conociéramos pero tenemos que ayudar a tío para que salga bien librado de