La brisa fría de la noche entra por los pequeños espacios de las puertas de cristal haciendome despertar , han pasado horas en las cuales los besos caricias y placer nos embargaron totalmente, Liz duerme plácidamente a mi lado ,observo detenidamente su bello rostro , sus largas pestañas , sus labios rosados y carnosos, ese pequeño y casi invisible lunar que se esconde en su línea del cabello por sobre su ceja  ,acaricio su clavícula con la punta de mis dedos y mi mirada recorre su cuerpo perfecto, amo la forma en que la tela de las sábanas blancas cae por la curvatura de su cintura hasta sus caderas , una pesadez se posa en mi pecho y por un instante siento la necesidad de llorar , sigilosamente me levanto y tomo su chaqueta , me la coloco y mientras subo el cierre voy hacia una de las puertas de cristal, la atravieso y saliendo al balcón , apoyo mis manos en el barandal mientras observo la luna sobre mi y le pregunto :

- como llegamos hasta aquí?