Un ruido secó del otro lado de la puerta fue lo que logró que Oliver abriera los ojos, despertando por completo y en ese preciso momento. No encendió las alarmas en su cabeza, pero si fue obligado a salir de la cama, siendo un tanto rápido, pero no desesperado. Y antes de alejarse, devolvió la mirada en el chico que aun seguía durmiendo muy plácidamente. A estas alturas, Oliver ya estaba más que informado que Matt era de sueño pesado, a diferencia suya que tenía el sueño ligero.Encaminándose hacia la puerta, luego de haberse puesto sus calzoncillos, Oliver no esperó ni un segundo en abrirla, maldiciendo inmediatamente por lo bajo al dar con el amigo de Matt levantándose del piso alfombrado, y ese no estaba solo, sino que Troy, su guardaespaldas, estaba haciéndole compañía, ayudando al chico a ponerse de pie.Correcto. ¿Qué mierda hacían estos dos frente a su puerta a esta hora de la mañana? Oliver estuvo por preguntárselo, pero el amigo de Matt fue más rápido.—Intente atacarlo por l
Una vez la lujuria abandonó sus cuerpos, por el momento, ellos decidieron que ya era hora de desayunar, pero dudaron mucho si tener un desayuno en la cama o ir directamente hacia el comedor. La primera opción fue la victoriosa, por dos simples razones; Tenían que hablar y aquello no iba a ser posible si es que no se encontraban solos. Era un tema completamente de pareja, y por lo tanto, en este caso, más de dos era multitud. De todas formas, obviamente Matt luego se encargaría de comentarle de todo lo hablado con Oliver a James. Ya saben, era una cosa de amigos.Entonces, fue por esa razón que ambos seguían dentro de la habitación, algo negados a salir, como si hubieran tenido la pelea del siglo y estaban pronto a la reconciliación del año, lo cual si, estaba siendo algo mucho exagerado. Lo primero, habían hecho casi por completo las pases, teniendo mucho sexo de reconciliación; Y lo segundo, estuvieron separados y enojados, sobre todo Matt, por un solo maldito día. Si eso no era exag
James no estaba para nada seguro de hacer cierta llamada, siendo lo último que hubiera querido hacer por lo que le quedaba de vida. Teniendo suficientes razones para no hacerlo, pero no suficientes opciones. Simplemente dos, y esta, por lo visto, estaba siendo la mejor a tomar. Y era absolutamente agobiante, porque él sabía que debía de mantenerse al margen de aquel hombre; Rayner aun era alguien bastante misterioso y peligroso, aunque un tanto directo y no parecía hacer uso de mentiras, al menos James no las notó.Así que ahí estaba él, con celular en mano encerrado en uno de los cuartos de baño. Ya era de noche, las diez y cuarto para ser exactos, y él se había escusado con un:—No me siento bien, debe de ser por culpa de las palomitas de maíz— Luego caminó con prisa hacia el primer baño que encontró en su camino.—Debí de llamar antes...— Murmuró dudoso, yendo hacía dos horas atrás, cuando se encontraba a solas en la sala de cine con Matt. Luego de un par de minutos, ellos no volvie
James no estaba bien, y su malestar -incomodidad- no se debía del todo a que tenía a Rayner frente suyo, sino que no le hacia mucha gracia, ni mucho menos le agradaba, estar nuevamente mintiéndole a Ryan. Al menos le consolaba el saber que no le había mentido del todo, solo omitiendo ciertos hechos; Como el que se encontraría con un hombre lo suficientemente peligroso como para alarmar a cualquiera. Genial.Mirando hacia todos lados, James dio con unas cuantas personas, estaban en un lugar muy público ahora, y cerca de la cafetería en donde trabajaba Emily. Ella había ingresado al trabajo hace tan solo unos quince minutos, él mismo se encargó de escoltarla, por así decirlo. Luego de ello, James tomó su maltratado celular, reviendo la ubicación enviada, y se dirigió a donde cierta persona estaba esperándole. Estaban en una pequeña plaza ahora mismo, ambos sentados en una de las bancas con una vista bastante agradable. Los niños correteaban felices, siendo ruidosos y todo eso. James s
Por las mañanas y parte de la tarde, la mansión Hiddleston solía ser bastante tranquila y silenciosa, siendo los de seguridad y empleados los que se encontraban, y por supuesto, ellos no eran ruidosos. No todo el tiempo al menos, cuando los de seguridad no se entretenían pasándose de copas en medio de una un juego de cartas, solo para pasar el tiempo. Pero no pasaban de ser ruidosos. Y esto solo ocurría cuando ningún propietario, o huésped, del jefe estaba presente. En este caso, ahora mismo, la mansión Hiddleston no se encontraba abandonada. James solía ser el único en quedarse, él y Bigotes. Y bien, James se entretenía hablando con la ama de llaves o el cocinero, este último le aconsejaba un par de cosas sobre las preparaciones de diversas comidas. Por lo que poco a poco, James estaba volviéndose un tanto bueno, solo, por ahora, sabiendo cocinar lo básico. Un básico al menos delicioso que dejaría a muchos muy satisfechos.James también perdía el tiempo junto a Bigotes, el minino c
Habían pasado unos, aproximadamente, veintidós minutos desde que tanto como James y Matt hablaron con Troy, y ellos esta vez no se callaron ni se guardaron nada. Siendo lo más informativo posible. Lo cual era esencial si es que querían que Troy tuviera éxito en el rastreo de Rayner. Aun así, Troy no había dicho nada, es decir, no fue claro en si se tomaría las molestias de buscar al hombre o no.Pero James sabía que Troy lo intentaría, porque él era un buen hombre, al igual que un buen amigo. Y por ello, James se había permitido relajarse, y puede que no del todo, pero algo se estaría haciendo para dar con el paradero de Rayner. No habrían brazos cruzados. Y de hecho, James estaría ayudando, en lo que sea que pueda o este a su alcance; al igual que Matt. De todas formas, James esperaba que el hombre estuviera haciendo algo por su lado, intentar escapar o algo por el estilo. Eso, uh, sin duda sería de gran ayuda.Dejando aquel pensamiento de lado, James volvió a su ahora parlanchín ami
James ni siquiera lo pensó dos veces, no dudando en lo absoluto en atender la llamada aun siendo un número completamente desconocido para él. La cosa era: Podría tratarse de Rayner. Puede que el hombre haya encontrado una manera de comunicarse y esta estaba siendo si gran salvación. Excepto que cuando James atendió no se escuchó nada del otro lado, solo un ruido sordo y con ello la llamada finalizó. Habían sido segundos, no más de cinco o seis. Y con solo esto, James supo que había sido Rayner en un intento de contactarse con él. Claramente fallando en sus planes. Algo sin duda arriesgado. Y joder, ¿Rayner no se había metido en más problemas, verdad?... James no quería pensar en ello, pero sabía que era una gran posibilidad. —¿Qué fue eso?— Preguntó Troy, ya al lado del chico preocupado. —No lo puedo afirmar al cien porciento, pero creo que fue Rayner tratando de dar una señal de vida— Su celular fue rápidamente arrebatado de su mano. —¡Hey!— —Que idiota— Gruñó Troy mientras revi
Había sido una noche un tanto intranquila, dejando a algunos fue de sus habitaciones por un par de horas, tal fue el caso de Oliver y Ryan. Estos fueron informados de que algo no estaba yendo del todo bien con respecto a los de seguridad, y no todos fueron sospechosos, solo lo que James había señalado. Y en total solo habían sido tres hombres los investigados de pies a cabeza, desde su nacimiento hasta ahora. Y ciertamente hubieron un par de datos sospechosos, información que no coincidía del todo, y otros que simplemente no coincidían en lo absoluto. Como el grave hecho de que esta estaba siendo su primera vez en este tipo de trabajo, cosa que contradecía enormemente su CV. Por supuesto que solo bastó con ello para que Oliver se pusiera en marcha con mucha más investigación. Y Ryan claramente también se involucró. Fue de este modo que ambos se encontraron ocupados hasta tardes horas de la madrugada, volviendo a sus camas casi de manera sigilosa. Tal vez Matt no despertó cuando Ol