Las yemas de los dedos de Madeline que estaban acariciando suavemente la foto de Jeremy se detuvieron bruscamente.

Aunque aún no había visto a nadie, ya había aparecido en su mente un rostro que la hacía sentir abominable.

"Tch, ¿estás muy triste?". La voz triunfante de Lana se extendió desde lejos hacia ella. Madeline levantó sus fríos y hermosos ojos e impidió que Lana entrara. "Vete, no eres bienvenida aquí".

Lana cruzó sus brazos con una sonrisa en su rostro "Soy una amiga del Sr. Whitman, y ahora que ha muerto, es normal que venga a mostrar mis respetos".

Se adelantó mientras hablaba, dejando las flores que traía.

Madeline sujetó la muñeca de Lana para evitar que le ofreciera las flores. "Lana, no pienses nunca que puedes hacer lo que quieras sólo porque eres de la pandilla Stygian Johnson”.

"Este no es el País F, ni el territorio de la pandilla Stygian Johnson. Mi marido no necesita que una sinvergüenza como tú le presente sus respetos. Abandona este lugar ahora mismo".

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