Madeline terminó de decir eso, sin dudarlo. Su mirada penetrante recorrió el rostro de Jeremy, antes de alejarse.

Jeremy agarró la mano de Madeline, haciendo que se detuviera en seco.

Ella lo miró, fríamente. "¿Qué ocurre? ¿Quieres castigarme con tus formas bárbaras? Jeremy, no soy esa Madeline que te permitirá insultarla y humillarla más. ¡No te tengo miedo!".

Ella miró los ojos profundos del hombre, sin miedo. Había una expresión invulnerable en sus ojos, que la hacía parecer tan dominante y arrogante como un monarca.

Jeremy no estaba enojado. Sus ojos apasionados estaban fijados al rostro impecable de Madeline, mientras la miraba directamente.

En realidad, él ya sabía que las cosas que ella dijo eran mentiras.

Él solo tendría la oportunidad de acercarse a ella, mientras continuara mintiéndose a sí mismo.

De cualquier forma, el día de la verdad se le vino encima, finalmente.

Después de permanecer en silencio, Jeremy dijo con una pequeña sonrisa en su rostro: "Tengo una pregun