Capítulo 11Violeta San MarinoTomo un sorbo de la taza de café que me dio el desconocido y comienzo a tomarla despacio debido a lo caliente de esta. Una vez el líquido toca mi boca, no puedo evitar saborearme por el rico sabor que deja. Aparte, él lo había endulzado con un poco de miel y canela como me gusta. Es como si hubiera adivinado que lo tomo así.Abro los ojos rápidamente al notar que los tengo cerrados y al hacerlo, fijo mi vista en el hombre misterioso. El cual, también está tomando su café y hasta ahora no ha dicho ni una palabra. Me pregunto si el café tendrá mejor sabor si lo pruebo de su boca.A raíz de ese pensamiento, no puedo evitar sentirme algo avergonzada. Si embargo, me pongo a mirarlo por unos segundos y me pregunto a mi misma el motivo que me impide hacerlo. Que yo sepa nada en mi vida me retiene como para que no pueda probar esos labios tan carnosos.Doy un último sorbo de mi taza y me levanto despacio para no marearme como hace unos minutos. Camino despacio
Capítulo 12 Violeta San Marino Mientras esperamos a que el dolor pase un poco, él no ha dejado de acariciarme ni de besarme y todo buscando hacer que me relaje antes de retomar su labor. Por eso cuando me siento lista y segura de recibirlo por completo, muevo mis caderas indicando que me haga suya. Quiero que un hombre de verdad me haga tocar el cielo y no me deje caer en un abismo. Las embestidas y las caricias llevaban mi cuerpo al éxtasis total, haciéndome vivir lo inexplicable entre sus brazos. Con mis uñas araño su espalda y enredo mis piernas aún más en su cintura. Además, beso y aprieto su pecho sintiendo que el mismísimo infierno lo llevo por dentro. Con este desconocido esta noche he experimentado sensaciones y posiciones que nunca imaginé que existieran. Cosa obvia que solo pensaría una ex virgen como yo. Siento como sus embestidas suben aún más de nivel y mi vientre vuelve a contraerse, para que luego ambos alcancemos el clímax juntos. Sintiendo como el uno le pertenece
Capítulo 13Ades Zisis Tal vez hayan escuchado de los imperios del gran Hermes Zisis, uno de los hombres más poderosos de toda Grecia por su gran capacidad para los negocios. Pues ese gran hombre; es mi padre, el cual nos ha dejado una incalculable fortuna a mis hermanos y a mí ¿Se preguntan cuantos hermanos tengo? Son dos, mi bella melliza y el menor; Apolo. Los cuales están tan capacitados como yo para llevar las riendas de la empresa familiar y mantener el imperio en lo más alto como siempre ha estado. Hace poco menos de dos meses yo mantenía una relación con Aralia Lombardo, una de las modelos más famosas de Italia. Sin embargo, como siempre sucede, cada vez que tengo una pareja; pues lo nuestro no resultó para nada bien. Ya que ella; al igual que todas las mujeres a mi alrededor, solo estaban conmigo por mi dinero y mi poder. Para así después poder tener un apellido que llevar y una tarjeta de crédito que gastar en banalidades como siempre suele pasar.Así que cansado de esa si
Capítulo 14Ades ZisisAhora; estoy sentado en la barra tomando unos tragos de algún cóctel que me preparó el cantinero, no es que este borracho o algo por el estilo. No obstante, debo de admitir que algo mareado si estoy. No sé que hora es, pero creo que ya debería irme porque al parecer Apolo no va a regresar. De seguro; anda con la rubia falsa, esa por la que me dejó tirado. Sin embargo, justo cuando me estoy yendo. Siento como alguien grita e insulta a alguien más.De inmediato; busco con la mirada para ver que es lo que pasa, ya que no puedo permitir que hago malo suceda y es ahí que la veo a ella. La misma chica con la que tropecé en el hotel está tarde. Ella estaba tratando de soltarse de un tipo borracho que la estaba molestando, al parecer desde hace rato. Aun así; no sé si él sea algo de ella, pero la necesidad de ayudarla nubla todos mis sentidos sin importarme nada. Es que; hasta incluso, estaba dispuesto a todo por ella.Al llegar hasta donde están los dos; en dos simple
Capítulo 15 Violeta San Marino El sol calienta mi piel y broncea mi cuerpo, mientras que el aire fresco del mar me hace sentir en las nubes. Escucho el sonido de las olas rompiéndose en la orilla y esta paz que hay a mi alrededor, hacen que quisiera quedarme a vivir aquí para siempre. No tengo ganas de volver a mi casa para que al regresar, todos los problemas estén ahí y esperando por mí.– ¿Dime Violeta, de dónde eres?– me pregunta Alis sacándome de mis pensamientos.– Soy de California ¿Tú eres griega? – pregunto para hacer algo de conversación.– No, para nada; soy mexicana. Sin embargo, me mudé aquí hace muchos años antes de que mis padres fallecieran. Ellos vinieron a vivir aquí por cosas del trabajo y así... ¿Cuándo aprendiste a hablar griego?– Lo hice con mi hermano y mi padre hace muchos años antes de que él también falleciera. Era uno de sus idiomas favoritos y se convirtió en el mío también con solo escucharlo hablar a él.– Pues me alegro de que tengas un lindo recuerdo
Capítulo 16 Victoria San Marino Estoy a punto de cerrar la puerta de mi habitación después de haber hecho el maratón de mi vida hasta aquí y antes de poder hacerlo, siento que algo me lo impide. Es ahí que veo las grandes manos de Ades sosteniendo la puerta de la habitación, la cual abre y cierra una vez adentro sin ningún tipo de esfuerzo. – ¿Qué haces tú aquí? – pregunto retrocediendo unos pasos lejos de él sin saber por qué. – ¿Quiero saber por qué te fuiste esta mañana sin despedirte siquiera? ¿Hice algo que te lastimó ayer? ¿Por qué saliste corriendo hace un momento cuando me viste en la playa? – preguntaba él sin dejarme contestar y cada vez se acercaba un poco más a mí. Este hombre seguía teniendo muchas preguntas y yo, había olvidado las respuestas o al parecer había olvidado como hablar ¿Qué me está pasando? Yo nunca me había puesto tan nerviosa frente a un hombre; sin embargo, este desconocido provoca sensaciones en mí que no entiendo. Ni siquiera por el infeliz de Er
Capítulo 17Ades ZisisYo sabía que la volvería a ver, lo que no sabía era que tan pronto lo haría. Cuando la vi en la playa; me fijé que no me reconoció, pero al sentir su tacto con el mío. Pude fijarme que ella también sintió la corriente eléctrica que pasó por nuestros cuerpos. Lo que me dio entender que ya se había acordado de lo que pasó entre nosotros y eso me hacía sentir el hombre más afortunado del mundo.Sin siquiera decir nada, ella soltó mi mano como si mi tacto quemara y salió corriendo en dirección al hotel. Miré a mi hermano quién me veía con su cara desconectada al igual que Alis y sin decir nada, salí corriendo rápidamente detrás de Violeta. Debo admitir que saber el nombre de la mujer que me dio el privilegio de ser el primer hombre en su vida, me gustó mucho.Trate de correr para alcanzarla; pero para cuando llegué al hotel, ella se estaba montando en el ascensor. Me fijé rápidamente en el piso que ella marcó y me subí en el otro ascensor libre, debía llegar rápido
Capítulo 18Ades ZisisRecuerdo claramente el momento en que nos vimos.Ese momento; cunado chocamos, puede percibir por sus ojos que no estabas bien. Sin embargo, eso no me impidió darme cuenta de que era la mujer más hermosa que jamás había visto. – Violeta. De ante manos; quiero aclararte, que yo no soy el tipo de hombre que se la pasa llevando a la cama a cuanta mujer se le cruce por delante. Yo; soy del tipo que busca a la mujer indicada para formar una familia y tú, has hecho que mi curiosidad se despierte. Quisiera saber si eres le indica para mí, es lo único que te pido.Veo que su rostro palidece por unos segundos. Tal vez no debí ser tan directo desde el principio; tal vez, ella no se ha planteado la idea de ser una mujer casada o ser madre a estas alturas. Hay mujeres que creen que salir embarazadas es lo peor del mundo, ya que supuestamente destruyen su perfecto cuerpo. No obstante; si el día de mañana, yo encontrase a una mujer que no le importara tanto esa estupidez del