Los cambios en la vida pueden ser para bien o para mal, a veces las decisiones de un padre pueden llegar a cambiar el destino de su hija, eso es lo que trataba de hacer el padre de Serena, quería lo mejor para su hija, aunque eso signifique que su hija lo odie por ello.
—Porque tengo cambiar todo solo porque a tus jefes se les da la gana de enviarte a un pueblo de mala muerte.
—Hija, es una gran oportunidad para nosotros, —dijo su padre emocionado porque lo habían ascendido en cambio Serena maldecía a sus superiores porque le arruinaron la vida—Pasaré menos tiempo en casa, pero el pago será bueno como sheriff del Burkecsville, ya verás que amaras este pueblo.
Serena no pensaba lo mismo, sus amigos, todo lo que conocía lo dejó en San Francisco para mudarse a un pueblito que poco a poco es consumido por la naturaleza, cree que es estúpido pensar que hay futuro para alguien como ella en un lugar como ese «Seguramente su jefe le lavó el cerebro a papá»
Cambiar de escuela es algo que no le agrada ni un poco a Serena ya que la pone más nerviosa, no quiere ser la típica chica de la que todos se burlan por ser la nueva, para ella seria genial que fuera como en las películas o series que ha visto donde la nueva es segura de sí misma y que no les teme a los problemas, pero ella no es así
Suelta un suspiro decepcionante porque esta es su triste realidad. Si hay un problema, Serena sale corriendo más rápido que “flash” porque incluso sus amigos sabían que es la primera en salir huyendo de cualquier conflicto, es extrovertida pero cuando siente la confianza en sí misma, pero con los extraños se siente intimidada, es de esas que son inexistentes para todos y que solo tiene una o dos amigos nerd
Al ver el rótulo “Bienvenidos a Burkecsville” sus manos se aferran al cinturón de seguridad porque después de horas de viaje en auto habían llegado a lo que ella llama su “maldición”.
—Y he ahí nuestra casa —el señor Hernández veía con tanta felicidad la casa que estaba frente a ellos a un costado izquierdo—Vamos Serena.
El entusiasmo en su voz era notorio, pero Serena solo quería que fuera una horrible pesadilla, sus ojos observan los alrededores, solo había un vecino al otro lado de la calle, pero la casa estaba frente de la suya, pero al parecer, estaba deshabitada.
«¿Qué fue eso?»
Los ojos de Serena se quedan fijos en una de las ventanas de la casa, juraba haber visto algo moverse dentro de la casa abandonada.
—Genial —masculla Serena con molestia la emoción de mis palabras —Solo llevo unos minutos aquí y ya me estoy volviendo loca
—Serena—el señor Hernández la abraza y besa su frente —Se que no es lo que esperabas, pero ya verás que te gustará las libertades de vivir aquí.
—¿Que? ¿Me dejaras salir sola?
—Puede que sí, de todos modos es menos peligroso que en la ciudad —«eso es lo único bueno que tendré de aquí porque en la ciudad papá era el que iba por mí después de salir de clases» —Después de todo, ¿que podría pasar en un lugar como éste?
En la ciudad, Serena siempre le reprochaba a su padre el que sus amigos se fueran caminando a casa y ella no.
—Claro.
Serena estaba inquieta, ya que es su primer día de clases, caminar por los pasillos mientras todas las miradas caían sobre ella, la tenía con los nervios de punta.
«¡Quiero salir de aquí!»
Todos la miraban de diferentes formas, como si fuera una criatura que salió del mar o como si tuviera algo extraño como una enfermedad contagiosa
«Ignóralos, Serena, ignóralos»
Mientras estaba en clase, Serena escucho leves risas de parte de sus compañeros y cuando volteaba a ver a su alrededor, ellos fingían que escuchaban al profesor.
«Como odio este lugar»
Saliendo de clases, caminó tranquilamente por unos minutos hasta que sintió que alguien la empujó intencionalmente por suerte sus reflejos fueron rápidos y pudo sostenerse del marcó de puerta antes de caer. Al ver a los que intentaron humillarla, vio a un grupo de chicas.
—Ups, no te vi.
Ellas se fueron riéndose, conoce muy bien lo que estaba pasando, lo vio en su anterior secundaria porque hacían lo mismo con los nuevos, la han elegido como su entretenimiento.
—No les prestes atención —él cuerpo de Serenase paraliza cuando observa al chico que le ofrece su mano «Es lindo» —Solo son unos tontos que no saben cómo comportarse.
—Si lo sé, solo porque soy la nueva.
«¡No puede ser, es tan hermoso que no me la creo»
—Soy Oliver —Serena se encuentra inmóvil observándolo fijamente —¿Segura que estas bien?
—Perdón, —estaba incrédula de que estuviera hablando con un chico lindo como él —Soy Serena.
«¡no puede ser hice un amigo y es el más guapo que he visto!»
—Habrá una fiesta en los cultivos de los Wenssel, ¿te animas a ir?
«¿Qué?,¿Acaso me está invitando como a una cita?»
Le pareció extraño que la invitara de forma repentina.
—No lo sé…
—Si somos amigos, no deberías rechazar mi invitación.
«Ya decía que era muy bueno para ser cierto»
—OK, —fue decepcionante para Serena ya que era una salida de amigos.
—Paso por ti a las siete.
Se marcha dejando su corazón ilusionado y con una decepción en ella porque creía que solo su mente, en su imaginación alguien como él la invitaría a una cita
Cuando llegó a casa, su papá no estaba, dejó una nota que llegaría tarde porque tenía doble turno «¡Genial!» consideraba que era una suerte para ella ya que podría volver a casa sin que sepa que salí.
Podrían imaginar lo nerviosa que estaba, se encontraba a solas con un chico lindo dentro de su auto, «dios ayúdame con estos nervios» «porque se ve tan bien, acaso no estaré siendo ingenua» mueve su cabeza en negativa para quitar esas tontas ideas de su cabeza
—Llegamos. —su sonrisa era deslumbrante la contagia de inmediato, su corazón da un vuelco de ansiedad cuando lo ve aproximarse a ella de forma tan amenazante como si fuera a besarla, las mejillas de Serena de enrojecen y espera que haga su movimiento. —Tenías una basura en el cuello
Serena palidece aún más de la vergüenza y estaba segura que su cara tomó otro color porque estaba imaginando cosas que no pasarían jamás.
Lo siguió detrás y al solo llegar se percata de que es popular, tan popular que todos sabían quién era y cuando me veían a ella se preguntó a si misma «¿Qué demonios hago aquí?, había algo extraño, todos traían guantes de látex»
—¡¡Es hora de comenzar la iniciación!!
Todos gritan emocionados poniendo más nerviosa a Serena. Al darse cuenta de lo que estaban por hacer sin pensarlo se dio la vuelta para salir corriendo, pero Oliver la detuvo
—¿A dónde vas Serena? La fiesta recién comienza y tú eres la invitada especial que todos esperábamos, ¡¿No es así chicos?!
Cuando dijo eso el corazón de Serena latía desenfrenadamente, gritaba aterrado porque planeaban algo con ella y no sería nada bueno.
—¡Muchachos traigan la caja!
—¡No, no, espera...!
—Bienvenida Burkecsville Serena. —susurró con burla. —¡Háganlo ya!.
—¡Noo!...
Todos comenzaron a arrojarle basura que olía a muerto mientras llorando se agacha para cubrirse de ella, sintiendo tanta repulsión por lo asquerosa que es, se odiaba así misma por haber confiado en una cara bonita. Llena de rabia, cuando vio su oportunidad salió corriendo, cuando se vio en medio del bosque, se detuvo, se encondió detrás de un árbol, sintió el hedor que se desprendía de ella por la basura que le arrojaron. Rechinando sus dientes comenzó a llorar colérica. Después de llorar comenzó a caminar buscando la carretera pero estaba perdida, no podía salir del bosque.
El crujir de unas ramas al ser pisadas por alguien llama la atención de Serena, el miedo la invade ya que el bosque es mas tenebroso y sombrío por la noche. Sintió que algo la estaba acechando desde la oscuridad.
—¿Hol…
«Mierda, no. Como demonios se me ocurre hablar»
A lo lejos pudo ver que algo se movió entre las sombras, las ramas en el suelo crujen con mas frecuencia, Serena entrecierra sus ojos mientras observa un punto fijo, totalmente paralizada observa un par de ojos rojos
—Serena…Al escuchar la voz de su padre, serena se levanta de su cama abruptamente. Observa a su alrededor y se da cuenta que estaba en su nueva habitación.—¿Cómo llegué aquí?—Uno de los vecinos me dijo que te vio saliendo de la casa. —el padre de Serena suspira inquieto —Hija, se que sientes que te ahogas en esta casa, pero no salgas de noche y mucho menos en el bosque, es peligroso. Fue una suerte que el vecino te encontrara.—¿Vecino?Aun confundida se sienta sobre su lugar mientras intenta recordar lo que pasó, pero solo recuerda un par de ojos rojos que la veían como si ella fuera la presa, después de eso, no recuerda nada, por mas que lo intenta no recuerda nada.El padre de Serena observa la hora, mira a su hija y le dice que debe regresar para terminar un trabajo pendiente, angustiada ella intenta decirle que no la deje sola, pero se retracta al darse cuenta que su padre se ve estresadoAl marcharse su padre, comienza a llorar nuevamente porque esta segura que se burlaran de
Serena no podía sacar de su mente la extraña sensación que su cuerpo sentía al recordar la magnífica imagen que tuvo de su nuevo vecino, su cuerpo,… fue tanto para ella que al pensar en esa imagen pegada en su mente la hacía imaginarse así misma con él tocando y disfrutando de sus caricias.—¡Señorita Hernández!—¡Si… claro que quiero… —¿Ahh, así que quiere el castigo entonces?. Serena reacciona asustada cuando ve la cara de su profesor de biología frente a ella, el profesor mota las mejillas sonrojadas de su alumna y se da cuenta de lo que estaba soñando despierta. —Deje sus fantasías para cuando esté en casa señorita Hernández, si se repite aunque sea nueva, la enviaré a dos horas de castigo escribiendo que “no debo soñar despierta en clases”Todos comenzaron a reírse sutilmente haciendo que Serena se avergonzara por la advertencia de su profesor. Al salir de clases mientras caminaba por los pasillos pudo ver a Dalton a lo lejos, “parece que no es difícil para él hacer amigos y c
“Es una en verdad es una pena”—¡No!... —los manos de mi padre me retienen al despertar asustada —¿P-Papá?—Si soy yo. —me abraza al verme temblar. —Serena, ¿Qué te sucede, estás… pálida?Al ver mis manos que no paran de temblar, me doy cuenta que estaba llamando demasiado la atención de mi padre, pero recordar lo que pasó en el bosque me aterra de miedo, “Era el, un vampiro” mi padre me arrulla en sus brazos para calmarmeNo puedo hacer mas que pensar en lo que me sucedió, lo que pasó fue tan vívido que mi corazón se detiene por el miedo de saber que vampiros estaban viviendo frente a nosotros, mi vida y la de mi padre esta corriendo peligro con esas personas aquí.—Escucha hija, debo regresar a la jefatura de policía. Hazme un favor, ya no salgas de noche y mucho menos al bosque, te lo dije antes es peligroso. Fue una fortuna que Antton Baltimore estuviera cazando cerca de donde estabas. —¿C-Cazando?. Por supuesto que estaba cazando, mató a un chico de mi clase sin piedad y estuvo
—¡¿Pero quien demonios te crees para tratarme así?!.Intenté quitármelo de encima pero no pude hacerlo, su fuerza es descomunal, ninguna persona ordinaria podría tener tanta fuerza como la que él posee. Su mano sigue apretando mi cuello con más fuerza, comenzaba a perder la conciencia cuando de repente el me sueltaComienzo a toser y rabiosa busco a Dalton pero, se había ido, 《¿Qué carajos fue eso》Mi mente trata de encontrar una explicación una respuesta para lo que acaba de pasar, pero lo único que se me ocurre es que esa familia está demente. ¡Muy demente!. Salí de los baños y corrí hasta el salón donde nuevamente el profesor me reprendió por haber llegado tarde pero eso no me importaba ahora porque solo busca una explicación para que Dalton me atacara en los baños, creí que iba a morir.Al terminar las clases, corrí hacia el auto de mi padre, el vio que estaba nerviosa y me preguntó si había pasado algo pero le dije que solo estaba cansada, mentir no es lo mio, pero por su bien era
—Tranquila, solo esta durmiendo. Viro mis ojos y tenia razón, esta dormido, olvido que a veces que habla dormido. Molesta por entrar a mi casa le dije que se fuera, pero Antton solo se ríe de mi y eso pone mi humor de mal en peorMe levanté de mi lugar y subí a mi habitación tan rápido que por poco me caigo en el camino, aseguro la puerta muy bien para que no entre, pero lleve un susto del demonio cuando lo vi sentado sobre mi cama. —¡¿Acaso me quieres matar de un susto?!Cuando se pone de pie y me observa como su cena, mi corazón se enloquece, intenté abrir la puerta, pero en un parpadeo él ya se encontraba de mi con sus manos a cada lado de mi cabezaMi respiración es dificultosa, mi piel se eriza cuando su mano derecha toma mi cabello y lo hace a un lado, sus labios dejan un beso sobre mi piel mientras sus manos me toman de la cintura y se aferran a ella, cierro mis ojos mientras siento como me hace girar sobre mis talones lentamente hasta tenerlo frente a mi—Abre los ojos. —ord
Que estúpida fui al creer que Antonio vendría a ayudarme, su hermano tiene razón, el que se alimente de mi no significa que soy especial para él, ni siquiera soy la chica su tipo, solo soy una estúpida puberta que siente una loca atracción por los chicos mayores que ella y con apariencia peligrosa.—¿E-Estas bien?. —cuando la gordita se acerca me hace recordar que no estaba sola —¿Cómo puede tratarte de esa forma? Es cruel.—Supongo que todos los chicos son así, no me sorprende.—Oye… te molesta si pregunto porque te dijo eso de que no le importas.Un nudo se forma en mi garganta mientras ella me recuerda sus palabras, entre cierro mis ojos y me pongo de pie, le agradezco por haberme ayudado y al escuchar el auto de papá, me acerqué a él, sé da cuenta que algo me pasa ya que nota mi nerviosismo. Al subirme al auto veo que la chica sigue en el mismo lugar.—Espera papá… —me bajé del auto y me acerqué a ella otra vez. —¿Nadie viene por ti?.—Vivo con mi tía pero parece que se retrasó.—
—Esta anocheciendo. —la chica se veía preocupada —¿Qué le habrá pasado a mi tía?.—No te preocupes. —dije calmando su preocupación.—Oye… se que no es de mi incumbencia lo que pasó hace un rato pero, … ¿Acaso estas saliendo con un universitario?.Decirle que si sería algo estúpido y arriesgado ya que podría decirle a los demás y si alguien le preguntase a él,… La única que quedaría en ridículo sería yo así que le dije que no, solo tuvimos unos problemas porque se burlaba de mi, ella sonrío y dijo que comprendía muy bien ese sentimiento de ser usada solo para el beneficio de otros, su tristeza me llama la atención—Pero hay algo extraño en ellos, son… algo pálidos.. además el chico ese al que llamaste Dalton… ¿Cómo pudo suspenderte del suelo de esa forma?Ahora la que comenzaba a preocuparse era yo ya que esta chica estaba haciendo demasiadas preguntas. 《No puedo creer que sea Dalton tan imbecil para exponerse de esa forma frente a ella》—Es un chico, no hay nada de raro en es
Comencé a caminar hacia la casa porque era imposible llegar a pie a la secundaria. “¡Te odio maldito vampiro sexy!” Ahora solo debo encontrar alguna excusa para que papá no me crea y… lo único que se me ocurre es que me dejó botada el autobús. “¿Acaso es una venganza por lo de ayer?—¿A dónde vas?. —cierro mis ojos del susto cuando lo tengo frente a mí. Si, aún no me acostumbro a esto”. —Vamos, te llevaré a la escuela niña.—Déjame de llamarme niña, que no es mucha la diferencia de edad entre nosotros. —espeté molestaMe toma del brazo y está vez tenía una expresión muy, pero muy sombría que me estremeció.—Sube, al auto. —cuando su mano se desliza hacia arriba por mi brazo, hombro hasta llegar a mi nuca, mi cuerpo tembló cuando sentí que tocó ese punto donde siempre deja besos. —Sube al auto.Solo buscaba una respuesta a esta maldita manipulación, ¿Cómo es que logra que obedezca a sus órdenes con solo tocarme, cuando pude reaccionar y tener control de mi misma otra vez, ya el auto se