Bradley Cuando llegué, él estaba hablando con él maestro, le estaba insistiendo en que quería hacer su trabajo solo, pero le dijo que no que el trabajo era de tres. Y que si no quería reprobar su materia que se uniera a un grupo y ese niño francés se fue molestó. Al día siguiente buscó a Elior y le preguntó, si podía unirse al grupo de nosotros, Elior le respondió que sí.Empezamos a visitar su mansión para hacer el trabajo de grupo, él nos contó que no podía reunirse todo el tiempo con nosotros porque estaba haciendo un curso de defensa personal. Cuando cumplí años lo invité a mi fiesta… me sorprendió que fuera pensé que no iría porque él seguía siendo muy callado. Un día Elior comentó que se inscribió en la escuela de fútbol, él le preguntó dónde quedaba esa escuela y se inscribió también. A veces ellos dos llegaban riendo a clase contando lo bien que les iba en las prácticas de fútbol. Y así empezó nuestra amistad poco a poco nos fuimos volviendo inseparables.Conocimos a Camila u
—Pero cuál de ustedes tres gusta de mi no me diga que tú porque tú tienes fama de jugar con todas y tú amigo Ignacio es igual.—Yo no, es mi amigo Bradley, mañana tiene práctica de golf. Si te interesa conocerlo ve ahí e invítalo a salir.No sabía nada al siguiente día en la preparatoria fui a mi práctica del golf. Mis otros dos amigos estaban en su práctica de fútbol. Hasta que después nos dieron un descanso de diez minutos. Ella se me acercó parecía nerviosa. Iba vestida con ropa deportiva; una falda blanca, unos tenis del mismo color y una visera.—Hola soy Abby —me dijo con una linda sonrisa.—Hola ¿Qué haces aquí? —la miré frunciendo el ceño no imagine que ella iría porque en ese momento Elior no me había dicho nada, de que hablo con Abby, así que estaba un poco nervioso no sabía ni que decirle.—Bueno yo quería saludarte tú juegas muy bien —me dice.—¿Gracias, te gustaría que fuéramos a tomar algo cuando termine la práctica? —le preguntó lentamente.—¡Sí, por supuesto! —exclamó
Camila Cuando llegue de la cafetería, subí a la habitación me quite el uniforme y me di una ducha, salí y me coloque una pijama de short y franela y unas pantuflas. Baje a preparar mi cena tengo hambre me preparo dos huevos revueltos y me los voy a comer con un espagueti que dejó mi tía está mañana en la nevera antes de irse al trabajo. Me han dicho que comer espagueti de noche engorda pero por alguna razón que no se cual es, yo como todo lo que quiero y eso no pasa… Me sirvo un vaso de agua, abro el microondas porque ya sonó, avisando que termino de calentar lo saco y me siento en la pequeña mesa redonda de cuatro sillas a comer mis espagueti con huevos.Pienso que Ignacio, si se cuida en las comidas y entrena mucho, cuando estuve en París él se levantaba temprano para ir a correr. Y en las tardes entrenaba en el gimnasio dos horas, que chico más estricto cuando se trata de su aspecto físico.Todavía recuerdo el agradable olor de su perfume y esas noches en París que dormíamos abr
—Porque comprobé mi sospecha de que ella era una espía de la presidenta Isabel Besnier. Siempre que se lo preguntaba la muy cínica y mentirosa me lo negaba. Un día dejó su móvil por ahí y me tomé el atrevimiento de revisarlo, escuche y leí sus conversaciones por WhatsApp con Isabel Besnier. —La miró con asombro —¿Recuerdas el día en la noche que te aconseje alejarte de el joven Ignacio?—Sí, lo recuerdo.—No te lo dije con mala intención. La verdad yo sospechaba que desde hace tiempo ustedes tenían algo. Esa noche decidí aconsejarte porqué leí una conversación donde Isabel Besnier con Ofelia le dijo que pronto iba haber boda. Ella estaba apurada por casar al joven Ignacio y estoy segura que era para alejarlo de ti… Me dio pesar contigo por eso quise aconsejarte. Incluso trate de hacerte entrar en razón para que no viajarás a París. Porque estaba segura que la presidenta no se iba a quedar de brazos cruzados. Se que ella haría hasta lo imposible para separarlos y por lo visto anunc
Camila Antes de irme me miro en él espejo, llevó puesto un jean azul, mis tenis blancos. Y una blusa de tirantes blanca, mi cabello suelto. Me apliqué un poco de polvo, rubor en mis mejillas y brillo labial.Mi tía ya se fue, me dijo que quedó en hacerle la guardia a una colega por eso debía entrar más temprano hoy al hospital. Antes de irse pasó por mi habitación, para decirme que me dejó preparado el desayuno. Así que bajó a desayunar me siento en la silla del comedor a terminar de comer mi sándwich y beber un jugo de manzana mientras reviso en mi móvil mis redes sociales.Al terminar salgo de la casa y caminó por una pequeña cuadra para llegar a la avenida.Miro mi reloj son las seis y cuarenta.Llegó a la parada a esperar el bus para irme a la universidad hoy comienzo las clases.Cuando el bus se detiene, me subo y veinte minutos después me deja cerca de la entrada. Hay un arco grande con letras doradas que dice:“Universidad La Élite de la Excelencia” También hay un gran escu
Ellas se paran cerca de un casillero. Una es rubia de ojos azules, debo reconocer que parece una modelo. La otra se nota que es asiática, es delgada y alta con la cara parecida a la porcelana. Están bonitas como las que salen en las series coreanas de Netflix, tiene una bebida de tonalidad rojo en su mano.La otra tiene el cabello castaño y ojos grises de piel blanca. Su cara me parece tan familiar están hablando y riendo, la de cabello castaño se me queda mirando y al parecer es con rabia… Creo que no le agrado ¿Y ni siquiera sé por qué? La ignoro y me acerco al balcón, estamos en el tercer piso, quiero contemplar la vista la verdad hay es puro edificios y también estudiante paseando en carritos de golf. El césped se ve tan cuidado hay estatuas, bancas. Ya me voy, tengo que trabajar adecué mi horario de estudios a mi horario de mesera en la cafetería. Cuando estoy caminando escucho una voz.—Tú nueva párate ahí —me detengo y la chica de cabello castaño comienza a caminar hacia mí.
Camila Voy a llevar la carta a la mesa tres y luego tomo la orden de la mesa cinco, cuando fui pidieron unos capuchinos. Me tome una pastilla para el dolor de cabeza que me dio después que Natasha la ex de Elior me jalara por el cabello. Así se me va la tardes de una mesa a la otra Ceci trabajo en la mañana creo que no, nos vamos a ver casi. Por nuestro horario de la universidad. Cuando ella está libre yo estoy estudiando. Cuando soy la que está libre ella está en la universidad. Estoy frente a una señora delgada y alta de ojos grises y un señor de piel morena usa gafas. Les traje dos cafés americanos y galletas, cuando le coloco el papel de la cuenta en la mesa le escuchó decir: —Es bonito estar enamorado ¿Cierto niña? —¿Ahh? —le digo. —Dejala Roy no la moleste —dice la señora —Es solo que a tú edad el amor nos llena de ilusiones y las hormonas están a mil.—dice él. —¿Están ustedes casados? —le preguntó —Sí ya tenemos treinta y cinco años juntos —contesta la señora con una son
—Ahhh ese es todo el alboroto. —digo frunciendo el ceño porque, ya hace tiempo que sabía que ellos son muy populares, la verdad no me impresiona y creo que es porque los conozco desde hace años. Me empujan las que están detrás de mí, tanto que llegó a la parte de adelante. Si son ellos están en el primer piso van pasando por el frente del edificio donde estudió. Elior va caminando con su morral de medio lado, lleva puesto una camisa negra manga corta, y unas gafas oscuras jean y tenis.Bradley lleva un suéter blanco que hace juego con su tenis del mismo color y unos audífonos grandes en su cuello… Me preguntó si las chicas aquí se volverán así de locas y emocionadas cuando ven a Ignacio… Porque no me siento preparada para eso, así que creo que voy a morir de celos, no que está pensando Camila ya ustedes no son nada.—Elior me mira —¡Hola bella! —saluda con una gran sonrisa.—Hola Elior —le respondo también con una sonrisa.—¿Cómo está Camila? —dice Bradley —con una sonrisa de boca c