Priscila
Todo estaba oscuro en donde me encuentro, por inercia me pongo la mano en el abdomen para cubrir a mis bebes, mis pies están amarrados a la silla en la que estoy sentada, no sé quién pudo hacerme esto y porque lo hizo también, considero que no tengo enemigos, a menos que todo sea obra de alguna persona que sepa que yo tengo unos bebes del Sr. Stane, algo que considero un poco descabellado pues nadie hasta donde yo se tiene conocimiento de lo sucedido entre él y yo.
De pronto la luz es encendida y para mi sorpresa la persona que menos espere encontrarme entra de pronto Gustavo Giler.
PriscilaSiento mucho sueño y mi cuerpo pesado, veo a lo lejos tres hermosos niños, dos niñas rubias lindas y un hombrecito bello, se acercan a mí y me dicen:Mami, mami, mami¿Mami?Si, tú eres nuestra mami.¿Dónde estamos?Estamos en un lugar maravilloso, pero sin papi lo extrañamos mucho, él tiene una hermosa voz mami.De verdad que no entiendo nada.Mami debes despertar, nuestro padre está muy preocupado por ti y por nosotros, dile que estamos bien y que pronto nos veremos, te queremos mami.El sueño de un momento a otro terminó, no entendía nada en absoluto, solo sentía un fuerte dolor en mi cuerpo y cabeza y de pronto pens&eacut
PriscilaLos cambios siempre son buenos al menos es lo que siempre he pensado yo, ahora no solo puedo pensar en mi sino también en estas tres vidas que crecen en mi interior, sé que este trabajo no lo estaré haciendo sola que tendré buena ayuda, aunque aún tenga miedo, cuando Alan me habló de comenzar desde cero se me vinieron muchas cosas a la cabeza, pues creo que una vida de “familia” donde no hay amor de pareja es un poco diferente a la que un día yo soñé.Si bien es cierto las cosas se dieron de una manera diferente y como bien me dijo él comenzamos al revés, ahora veremos qué pasa con los días, aun me faltan aproximadamente 4 meses para traer a mis hijos al mundo, pues sé que muchas veces los embarazos múltiples no llegan a los 9 meses, sino que se adelantan, debo irme preparando para lo que pueda pasar.La cas
Alan El saber que mis hijos son dos varones y una niña me lleno de emoción tanta que llegué hasta las lágrimas, decidí llamar a mis hermanos para comentarles sobre mis hijos y que deseaba hacer una reunión junto con ellos por su próxima llegada, ellos aceptaron gustosos, deseaban también conocer a Priscila, pues estaban seguros que ella seria la que me quitaría el status de soltero muy pronto, pero lo que ellos no sabían era que las cosas entre ella y yo eran diferentes. Ya en casa ayude a Priscila con algunas fundas de cosas para los bebes que decidimos comprar después que salimos de la consulta médica, había llamado a la decoradora cuando veníamos rumbo a casa para decirle los colores que deseábamos los dormitorios de nuestros hijos, por lo pronto serían dos, uno para la nena y
AlanNo sé cómo en medio de la plática las cosas se volvieron a dar, empezamos en un juego de seducción, no soy un hombre inexperto he tenido algunas aventuras de una noche, pero solo han quedado en eso, las cosas con Priscila son totalmente diferentes.Me apodere de su boca sin más con un beso con demasiada necesidad como si toda mi vida he estado sediento y solo ella puede calmar dicha sed, estoy embriagado de pasión, mis manos recorren cada centímetro de su cuerpo, cada una de sus curvas, sobo delicadamente su vientre pues siento adoración por el lugar donde crecen mis hijos, luego me dirijo a su trasero amasándolo con mis manos, luego la coloco de espaldas y lo presiono un poco hacia mí para que ella pueda sentir como me tiene ya. Ella está perdida en el placer que el estoy dando, puedo ver que entre abre sus labios para emitir uno que otro gemido, lo que hace que yo me si
PriscilaDos semanas después…Me encontraba sentada en el sofá de la sala perdida en mis pensamientos, en mi mente se revivían las escenas de todo lo que ha pasado entre Alan y yo, no me percate que alguien estaba tocando la puerta de manera insistente, una de las chicas del servicio había ido a abrir la puerta cuando sin más una voz que reconocí de inmediato me hizo volver en sí, era Samira mi amiga, ella tenía alrededor de dos meses que había vuelto a Inglaterra desde su país natal, ahora mismo estaba pasando una situación difícil pues su novio la había dejado por otra y para rematar sus padres estaban enfermos, mi pobre amiga había pasado tiempos muy duros los que la habían hecho caer en la depresión, sin embargo yo le había pedido que viniera cuando deseara para poder platicar y así se sintiera mejor.
AlanCon lo que me dijo Priscila que el imbécil de Gustavo le había escrito yo debía tomar cartas en el asunto, quizá buscar a las personas que en su momento me aleje para no verme involucrado, pero las cosas cambian ahora la amenaza es para la madre de mis hijos, mi mujer.Inicio de llamada.-Amigo, ¿Cómo estás?-Sr. Stane, me alegra escucharlo han pasado algunos años que no sabía de usted, ¿Cómo está su vida?-Dejémonos de formalismos Ethan, yo estoy relativamente bien-Entonces diré ¿a qué le debo tu llamada?-Para empezar, te comento que pronto seré padre, pero lastimosamente hay un fantasma del pasado que me quiere arrebatar a mi mujer.-Gustavo Giler, sino me equivoco.-Exactamente, él conoci
AlanLas cosas parecían claras, según los hombres de Ethan las personas a las que enfrentaríamos eran profesionales, para nuestra buena suerte aun la tenían en un lugar en el que el acceso no es complicado, pero debíamos hacerlo lo más pronto posible pues las cosas se tornarían peor con el paso de las horas, quizá hasta la podrían trasladar a otro país, y allí si sería imposible rescatarla.No podía dejar de pensar en como estaría ella, mis bebes, de pronto toda esta situación la pueda llevar al parto de manera prematura poniéndola en más riesgo a ella y a mis hijos.Según Ethan, la persona que esta a cargo de ese grupo de delincuentes está jodiéndole a él algunos negocios, lo considera una piedra en el zapato de la cual se quiere deshacer de una vez y por todas, aparentemente Gustavo es
Alan No me he caracterizado por ser un hombre desesperado ni ansioso pero esta situación me tiene los nervios de punta, ya ha pasado más de una hora que llegamos a este hospital y aun no me dan noticias ni de Priscila ni de mis hijos, Marcos me acompaña y creo que ya lo tengo mareado de tantas vueltas que estoy dando de la ansiedad en la que me encuentro ahora.Una de las enfermeras que salió hace unos minutos me pidió unos datos de Priscila, entre esos datos me pedían el parentesco con la paciente y sin más le dije que era mi esposa, aunque no estoy muy alejado de la realidad pues Pris es mi mujer, aunque legalmente aun no, solo espero que salgan bien de todo esto para poder hacerlo de manera formal.-¿Familiares de Priscila Méndez?-Aquí Doctor, yo soy el esposo, dígame como esta ella y los bebes.-Sr. Su esp