El CEO al percatarse de que habíamos llegado se paró, los dos jóvenes frente a ellos se pusieron de pie también y la chica se presentó con una inclinación.

— Hola X–WAY, mi nombre es Amelia, aclaración, no tengo 18 tengo 24 años (según Corea) —Se presentó.

— De verdad, disculpa por eso —murmuró el CEO.

Ella le sonrío — No hay problema, como decía, tengo 24 años, no soy ninguna vieja ermitaña ni mucho menos una cuarentona como dicen los rumores, solo soy una chica como muchas otras, pero ustedes me deben conocer más por mi seudónimo, es un placer conocerlos X–WAY, soy Teen —hizo una leve inclinación al terminar de presentarse.

— ¿Ves?, te dije que se puede ver cómo es una persona por lo que hace —susurró el maknae a mi oído evitando que la chica le oyera.

— Quería conocerlos desde hace mucho, me alegra poder hacerlo —añadió ella sin prestarme una atención grande a pesar de lo que habíamos pasado horas atrás.

— Bien, los chicos ya están aquí así que ya estamos listos para leer y firmar el contrato —Todos nos sentamos—. Bien, yo no tengo nada en contra de tu publicación del libro número 14, pero para poder publicar el 15 tengo algunas condiciones.

— Por favor, dígalas —pidió la escritora.

— Bien, como sabes, tus libros en gran parte son un estímulo a las Wayners y no solo a ellas ya que otras personas que no oyen este tipo de música los leen y muchos terminan siendo fans del grupo, tu libro número 15 será tu publicación cumbre hasta la fecha, y hemos quedado en que no será de ficción.

Mis amigos y yo quedamos confundidos ya que hasta ahora todos los libros eran de ficción.

— Así es —asintió ella—, tanto SM Entertaiment como la empresa que me patrocina, desean que el décimo quinto libro sea basado en la experiencia y no en la imaginación.

— Exactamente, por esto mi primera condición es que tú vayas a vivir desde ahora a su casa, prepararemos una habitación solo para ti, además de esto tendrás pase libre a la mansión, toda sesión de fotografía, ensayos para MV y coreográficos, entre otras cosas o actividades a las que ellos mismos te inviten.

— Acepto esto, pero exijo dos cosas, uno, tengo que tener el permiso de los propios X–WAY, no voy a estar en su casa si ellos así no lo desean —El CEO nos miró y hubiese sido una idiotez negarnos—, y dos, Hoon debe disfrutar de todos los beneficios que se me den a mí.

— De acuerdo, prepararemos una habitación también para él. Mi segunda condición es que tu libro número 15 debe ser lanzado en cuatro meses, no en tres, este libro será tu cumbre y no quiero que te sientas presionada, no solo quiero que escribas, quiero que te diviertas en tu estadía junto a X–WAY.

— ¿Y cuál es la tercera condición? —preguntó la joven con un aire desafiante.

— Deberás dejar tu anonimato y darle la cara a tus fans —Al instante ella se levantó de su silla, tomó su bolso y salió de la oficina.

Hoon suspiró — Denme un momento por favor —También salió.

Pov. Amelia

Me dirigía hacia la salida cuando oí la voz de Hoon — ¡Oye! Amelia! ¿A dónde vas?

— ¿A dónde voy? —Me volteé para mirarlo—. Vuelvo de regreso, tomaré el siguiente avión de vuelta, sabes que es lo que opino sobre reflectores, cámaras y fama.

— ¡Escúchame!, ¡si tu intención era escribir novelas famosas sin jamás dar la cara entonces eres muy surrealista! —exclamó.

— Yo... —desvié mi mirada de la suya.

Él se acercó a mí y me abrazó — Lamento haberte hablado así, sé que tienes tus motivos y no me gusta lo que te están haciendo porque no te están dejando otra opción.

Se separó de mí acariciando una de mis mejillas con ternura.

— ¿Pero sabes? Solo estoy de acuerdo en algo, ya es hora de que el mundo conozca el rostro y la personalidad de la gran mujer que tengo frente a mí...a esa chica talentosa, intrépida, locuaz, amable, hermosa...es momento de que el mundo deje de prestarle atención a "Teen" y comience a oír el nombre de Amelia.

Le sonreí y le abracé, él correspondió el abrazo — Gracias, por siempre estar ahí.

— Y siempre lo haré, cada vez que me necesites estaré a tu lado, tanto en la cima como en la caída. Has trabajado y te has esforzado mucho, gracias a esto estás aquí ahora, cumpliendo tus sueños, no dejes que nadie ni nada te detenga ni mucho menos que tus miedos te frenen, ¿de acuerdo?

— Si —respondí mientras aún le abrazaba.

Minutos después volvimos a la oficina.

— ¿Y bien? ¿Cuál es tu decisión? —preguntó el CEO.

Miré a mi amigo y el asintió con la cabeza, suspiré — Bien, ¿dónde firmo?

“El tiempo a veces nos hace jugarretas, tal vez si no hubiese firmado aquel contrato no estaría en esta situación…y ahora no puedo retroceder”

— Sabía que elegirías correctamente —Puso unas hojas sobre la mesa, Hoon las tomó y tras leerlas hizo una pequeña afirmación con la cabeza, luego firmé el contrato y le extendí la mano al CEO.

— Será un gusto trabajar con usted y los chicos —Le dije.

— El gusto será nuestro. Podrán ir en su furgoneta.

— Gracias —hice una leve inclinación despidiéndome—, yo iré más tarde a la casa, primero daré un recorrido y haré algunas cosas —Hoon colocó una mano en mi hombro en señal de advertencia y giré para sonreírle—. Tranquilo —puse una mano sobre la suya—, sabes que siempre tengo cuidado —salí de la oficina, tenía mucho que pensar.

Pov. Seung

Transporte de los X–WAY.

— ¿Eres muy cercano a Teen? —preguntó Yeon al invitado.

— Sí, he estado junto a ella desde el comienzo de su carrera —Le respondió.

— Entonces la debes conocer bien, ¿cómo es normalmente? —Dae parecía muy interesado y con muchas preguntas por hacer.

— Bueno —quedó pensativo—, es muy amable, decidida, le gustan los retos, es cariñosa, está algo loca y es una gran persona...pero cuando se enoja da algo de miedo —Se frotó los hombros y sacudió su cuerpo como si hubiera sentido un escalofrío.

Daehyun rió — Me suena a que es muy sociable, ¿y que es ella para ti? Ya sabes, ¿qué relación hay entre ambos?

— Oh, ella es mi mejor amiga, hasta ahí llega nuestra relación —Los cinco chicos le miraron con cara de "si, como no".

— No sé, ustedes parecen algo más que amigos —Le respondió MinJoon.

— Para nada, ella es como una hermana menor para mí. Se mete en muchos problemas, muchos de sus seguidores piensan que es una persona tranquila pero la verdad es que no, es muy activa.

Kwan le ofreció una de sus amplias sonrisas — Parece una persona interesante, estoy ansioso por conocer la verdadera persona bajo el nombre de "Teen".

— Y yo estoy ansioso por llegar a mi callada habitación y saludar a mi almohada —Yo estaba con los ojos cerrados tratando de dormir y estos que parecían viejas chismosas.

Luxury house.

Hoon estaba buscando entre las maletas y mis amigos y yo nos adelantábamos cada uno a sus respectivas habitaciones.

— Hey Seung, ¿qué te molesta? —Daehyun fue el primero en sacarme de mis pensamientos.

— ¿No sé de qué hablas? —traté de esquivar el tema que había surgido.

— Vamos, todos nos hemos dado cuenta, siempre pones esa expresión cuando algo te incomoda —El maknae me señaló con su dedo índice.

— ¿Qué expresión?

— Esa que tienes ahora —sonrió con sorna.

Hice silencio por un corto momento — Es que...¿recuerdan a la chica que les comenté antes?

— Sí, ¿qué pasa con ella? —preguntó el líder adelantándose un poco a los demás.

— Pues...ella es Teen —Un gran “¡¿qué?!” salió al unisonó de mis amigos.

— Eso es increíble...ella está increíble —Yeon me guiñó un ojo y yo rodé los míos.

— Creo que te acaba de suceder un Deja Vú amigo mío —dijo en un tono burlesco Kwan.

— Pero por lo menos te quitó de dudas, si es Wayner y como referencia no le gustas —Ya había perdido la cuenta de cuantas veces Daehyun se ha burlado de mí en tan solo pocas horas.

— Bueno, dejémonos de charla, será mejor que limpiemos algunas zonas de la casa antes de darle una mala impresión —habíamos entrado a la sala y Yeon notó el gran desorden en ella.

— Sí, mejor recogemos antes de que se tropiece con alguna ropa interior y quede traumada —comenté levantando uno de los de mi maknae con dibujitos del hombre araña y este me lo arrebató escondiéndolo tras su espalda y sacándome la lengua.

Pov. Amelia

Eran las 3:12 am y estaba fuera de la casa donde dos guardias no me dejaban pasar.

— Esto es una falta de respeto, no me iré de aquí y gritaré hasta que el propio CEO de SM Entertaiment me oiga —Y literalmente estaba a punto de formar un escándalo.

— Comprenda —Uno de los guardias me cargó en un hombro y comenzó a alejarme de la entrada—, solo hacemos nuestro trabajo.

— Suélteme, no tiene derecho a... —decía cuando una voz interrumpió la mía.

— Bájala ahora sr Cheng.

Esa voz la conocía muy bien, miré en la dirección frente a mí y ahí estaba, S–wey, caminaba con una mano en los bolsillos hacia el guardia que me llevaba al hombro como si fuera un saco, este se volteó y quedé de frente a una pared.

— Baja a la chica, ella es uno de nuestros invitados y tiene pase libre a la casa —Le explicó.

— Pero no... —En ese momento le llegó al sr Cheng un mensaje al móvil, al leerlo y ver la foto que le habían enviado me bajó al instante—. Lo lamento señorita, no fue mi intención.

— Tranquilo —Le sonreí acomodando mi ropa—, aunque no lo creas me han detenido muchas veces en la puerta de una instalación, solo un consejo —Mi expresión cambió totalmente a una de enojo y hablé en un tono algo fuerte—, si vuelve a tratar de acercarse a mí le mato, no debería cargar a cualquier chica que se acerca y menos de esa manera —Me di media vuelta alejándome de ellos.

< Rayos, de verdad da algo de miedo cuando se enoja. > Pensó Seung con una expresión serena mientras me veía adelantarme.

< M****a, que espeluznante, debería ser ilegal mirar a alguien con esos ojos demoníacos > El guardia había retrocedido un poco.

Seung comenzó a entrar en la casa mientras yo recogía el bolso y algunas cosas que se habían caído de este cuando el guardia me había cargado. Ambos caminábamos por la entrada a la edificación y yo decidí romper el silencio.

— Amm, gracias por lo de hace un momento.

— No me lo agradezcas, considéralo una paga por ayudarme antes, estamos a mano ahora, además, no te podía dejar ahí —Se encogió de hombros restándole importancia.

— Está bien, pero es raro, ¿el concierto no fue agotador? Deberías estar descansando.

— Si lo fue, pero no lograba dormirme, quería pensar así que salí a caminar y me encontré con una pequeña chica metida en problemas —dirigió su mirada hacia mí con una sonrisa burlona.

— Oye, ¿no estábamos a mano?, dejémoslo estar —dije con una risa nerviosa ante su comentario.

Volteó su cabeza para evitar que me percatase de la pequeña sonrisa que le había causado, luego volvió a mirarme.

— Okey...quería preguntarte, me percaté de que la horda de fans a quien perseguían primero era a ti y tú me usaste para librarte de ellos ¿no?

Reí nerviosa — Amm, si, disculpa por utilizarse de señuelo pero para que se olvidaran de mí y poder escapar necesitaba un pez gordo y da la casualidad que pude divisar a uno.

Negó ligeramente con la cabeza — Entiendo, pero habías conseguido lo que necesitabas, escapaste, ¿por qué volverte a poner en riesgo ayudándome a escapar?

— Yo soy así —sonreí—, pero la verdad es que por eso te salvé el pellejo, no me lo perdonaría si por mi culpa te vieras envuelto en una mala situación.

— Vaya —sonrió con algo de sarcasmo—. Entonces debo agradecerle a tu conciencia.

— Si, me habla demasiado, a veces me dan ganas de ignorarle pero me grita más fuerte.

Él rió ante esto. Entramos a la casa y me mostró cual era mi habitación, deseándome buenas noches para luego seguir el pasillo y entrar a la suya.

Me adentré a mi habitación y me sorprendí, era muy espaciosa, con una gran cama en su centro con un cobertor gris y blanco y varias almohadas sobre el colchón.

Mis maletas estaban a un lado de la esta, las abrí y tardé media hora en colocar desde mis ropas hasta mis materiales de trabajo en sus lugares, luego me acosté en la cómoda cama, estaba exhausta y al instante me dormí.

En la mañana. 9:15am.

Yeon, Daehyun, MinJoon y Kwan desayunaban en la cocina comedor cuando llegó Hoon y se les unió.

— Good morning —Ellos le saludaron—. Que extraño, solo cuento cuatro.

— Seung está durmiendo aún, creo que se acostó tarde —aclaró Yeon.

— ¿Y qué hay de Teen? —preguntó Joon.

— Aún sigue dormida y seguirá así por una hora o más —Hoon se encogió de hombros como si eso fuese lo más natural del mundo.

— ¿No habías dicho que era una persona activa? —dijo Yeon antes de tomar algo de jugo de su vaso.

— Y lo es, pero nunca te interpongas entre ella, una bolsa de patatas fritas o su hora de sueño, yo me interpongo entre las patas fritas y no me dan ganas de probar su comportamiento interrumpiendo su sueño.

10:52 am.

Me desperté, aún estaba somnolienta pero tenía mucha hambre, fui al baño para darme una ducha y me puse una camisa blanca y un short corto del mismo color, solo pensaba comer y volver a la cama nuevamente.

— El viaje me ha agotado mucho —murmuré mientras iba al bolso donde debía estar...— ¡¡¡¡ Nooooooooooooo!!!! —grité.

Segundos después se escucharon unos toques en la puerta de la habitación y se escucharon las voces de Yeon, Daehyun y Kwan.

— ¿Estás bien?

— ¿Pasa algo allá dentro?

— Oímos un grito, queremos saber si estás bien.

En ese momento se abrió la puerta y solo vieron unos ojos demoníacos que les miraban.

— ¿Pero que...? —expresó Dae antes de que le interrumpiera.

— ¿Dónde está Hoon? —pregunté molesta y los seis chicos frente a mí señalaron hacia la sala y abrieron paso para que yo pasara, luego de que me había alejado un poco por fin respiraron.

— Díganme que no fui el único que sintió ese escalofrío con su mirada —pidió Kwan.

— No, a mí se me puso la piel de gallina —Daehyun se frotaba sus hombros sobre la chaqueta que llevaba.

— ¿Qué habrá pasado? —Yeon miró a los demás y todos se dirigieron a la sala.

Entré en esta para ver a mi amigo sentado viendo la televisión, él solo oyó una voz inhumana mientras que dos manos le aferraban por los hombros y un escalofrío le recorría.

— Park Jon Hoon —dije recalcando su nombre—. ¿Dónde, está, mi comida?

— ¿Hablas de la b****a grasienta? La boté.

Reí malignamente ante su respuesta y él tragó en seco — ¿Dónde está?

Los chicos miraban desde una distancia razonable y prudente.

— Sabes que no puedes comer eso —Hoon se cruzó de brazos.

— Hoon —dije en un tono seco—, sé que no tienes instintos suicidas —acerqué mis manos un poco más a su cuello—. No me gustaría perder a mi representante pero si es necesario lo haré —volvió a tragar en seco, sabía que no bromeaba—. Así que te preguntaré una vez más, ¿dónde escondiste mi tesoro?

Él se dobló hacia delante sacando de debajo del sofá un bolso — Toma, cuando engordes no vengas a mí.

Abrí el bolso y saqué uno de los paquetes de patatas fritas para luego mirarlo con una amplia sonrisa — No te preocupes, seré una gorda obesa sin arrepentimientos.

Los chicos se quedaron viéndome con sorpresa.

Pasé por su lado mientras comía, los miré y brindé de mi comida a lo que ellos se negaron automáticamente, me encogí de hombros y seguí mi camino.

— Vaya —Kwan le puso una mano en el hombro a Hoon—, cuando dijiste que nunca te metieras entre ella y las patatas fritas pensé que era broma.

— De verdad da miedo cuando se enoja —Yeon se rió nervioso mientras se frotaba los hombros.

— Si es así por las patatas de verdad no quiero saber qué pasaría si la despertara —Daehyun aún miraba en la dirección en la que se había ido la chica.

A Hoon se le curvó una ligera sonrisa — No lo lograrías, ella seguiría durmiendo como si nada pero cuando se despierte será mejor que puedas correr más rápido que ella.

— Eso me suena a alguien —rió el maknae.

5:42 pm.

Luego de haber recuperado mi preciada comida volví a dormir y me desperté casi a la hora de comer. Me dirigí calmadamente a la cocina, la alacena estaba llena y yo tenía hambre. Comencé a sacar algunos ingredientes y a cocinar.

Luego de una hora y quince minutos tenía listo el aperitivo (arroz chino) el plato principal (albóndigas de soja) y hacía el postre (arroz con leche), mientras añadía el azúcar al dulce me quitaron los auriculares que llevaba y por los cuales oía música, y una voz me sorprendió.

— Buenos días, o tarde.

— ¡S–wey! ¡Tonto, me asustaste! —exclamé llevando una mano a mi pecho.

— Disculpa, te había llamado dos veces, pero no me oías, y puedes llamarme por mi nombre —Se colocó un audífono y sonrió—. ¿Moon?

— Sí, es una de mis favoritas —dije, esa canción estuvo dentro de su álbum debut y me fascina, tomé los audífonos y los puse a un lado—. Siéntate y llama a los chicos sino se enfriará la comida, en diez minutos estará el postre.

Seung tomó asiento — Eso no será necesario.

En ese momento se escuchó la voz de Yeon — Mmm, algo huele muy bien.

Reí — Y di lo contrario, tomen asiento.

— Ya íbamos a pedir comida, la señora que nos cocinaba está de viaje y no hemos encontrado una de remplazo —contó Kwan.

— Pues con Amelia no necesitarán contratar a nadie, como la comida de ella no hay otra —Me elogió Hoon.

— Ven, te ayudo —Daehyun tomó la bandeja que iba a poner en la mesa.

— Yo también —MinJoon se unió a él.

— Gracia por ayudar MJ y D–Hyun —Les dije llamándolos por sus nombres artísticos.

— No te preocupes Teen, siéntate...¿sabes? Puedes hablar con nosotros informalmente y llamarnos por nuestros nombres —comentó Yeon mientras también ayudaba a poner la mesa.

— De acuerdo, pero ustedes deben hacerlo igual —tomé asiento—, llámenme Amelia, o Ame —Les sonreí.

Todos estábamos a la mesa y la comida estaba tapada por tapas metálicas sobre las bandejas para que conservaran el calor.

Yeon y Kwan dieron golpes en la mesa como si fueran retoques de tambores y a la cuenta de tres todos destaparon una bandeja.

— Sabía que algo me olía delicioso —Yeon fue el primero en comenzar a servirse.

— Se ve muy bien —Joon me elogió y yo miré mi reloj y me levanté de mi asiento apagando el fogón donde había dejado terminar de cocinarse el postre y volví a mi asiento.

— Vaya, arroz chino, albóndigas de soja y arroz con leche, oigan chicos, debimos hacer algo muy bueno por Amelia en nuestras vidas pasadas —La sonrisa de Daehyun me daba mil años de vida mientras hacía que un pequeño hoyuelo se formara en su mejilla izquierda, que lindo.

Después de desearnos provecho todos comenzamos a comer mientras elogiaban la comida.

— Me alegro que les gustara, así que no dejen nada —bromeé.

Yeon rió — Te aseguro de que no lo haremos.

— Ten cuidado —Joon sonrió mientras señalaba su plato—, si el postre está tan bueno como la comida te pediremos que cocines a menudo —Todos rieron.

— Eso no será problema para ella, le gusta cocinar —Les dijo mi amigo.

— No me culpes, es como un desestresante —Me justifiqué.

— Que desestresante más raro —golpeó mi hombro y yo le devolví el golpe.

— Tú no puedes juzgar, yo cocino, tú...auch —Mi amigo se había inclinado hacia mí dándome un pequeño golpe con la base de su cuchara en la frente para que me callara.

— Shhhh —Le miré con mala cara mientras me frotaba en el lugar del golpe y todos rieron.

— Se llevan muy bien ¿verdad? —preguntó Seung llamando mi atención.

— ¿Eh? —Le miré— Sí, es como —miré a Hoon con mala cara—, un obstinante y sobre protector hermano mayor.

— Bien, ya que entre las nueve personas que estamos aquí tu eres el más grande misterio juguemos, nosotros te preguntamos y tú tienes que respondernos con toda sinceridad —sugirió Yeon.

— Sí, me gusta esa idea, ¿te parece bien Ame? —Me preguntó Daehyun a lo que yo afirmé.

— De acuerdo, pero luego de que terminemos de comer —sonreí—, el postre lo comemos en el interrogatorio.

Minutos después estábamos en la sala, sentados entre los asientos y el suelo cada uno con un vaso de postre, todo comenzó con preguntas básicas sobre mis cosas favoritas.

— ¿Por qué, aunque tus libros han ganado fama, decidiste ser una escritora anónima durante tanto tiempo? —Y ahí estaba la pregunta incómoda, gracias Kwan.

— Me gustan las ventajas del anonimato, es todo, muchas veces puedo conocer a las personas que siguen mis libros y como no saben que yo soy la escritora hablan sin restricciones y así sé lo que realmente piensan y lo que puedo mejorar en mi siguiente trabajo.

— ¿Sueles escapar muy seguido de los fans? —preguntó Seung y le miré mal—. Es una pregunta —fingió inocencia.

— De vez en cuando Hoon se mete en problemas y he tenido que salvarle el pellejo, así que sí, a menudo.

— ¿Cuál es tu canción favorita? —preguntó Daehyun.

— Moon —respondió Seung por mí.

— ¿Cómo lo sabes?

— La estaba escuchando mientras cocinaba —comentó sin despegar los ojos de su postre.

— Bien, mis favoritas de su grupo son Moon, After, Fake, Sagrade y Dark, aunque realmente podría seguir mencionando y nos quedaríamos dormidos.

— ¿Cuáles son tus pasatiempos? —Esta vez era el turno de Yeon para preguntar.

— Escribir, tiro masivo con armas de fuego, hacer ejercicios, escuchar música, de vez en cuando huir de algunos guardias... —Me encogí de hombros ante las miradas incrédulas que me ofrecían.

— No lo duden, esta pequeña mocosa con cara de que no rompe ni un plato suele practicar paracaidismo los domingos —Le informó Hoon, esta vez sí estaban impactados.

— No los asustes, dices eso como si nadie más lo hiciera —reclamé.

— Aún recuerdo cuando saltaste por primera vez, casi me da un infarto.

— Es porque eres muy dramático —Le saqué la lengua.

— Te gustan las emociones fuertes ¿eheh? —comentó Kwan.

— Ahora, la pregunta más importante —Yeon hizo una pausa para aumentar la tensión—. ¿Quién es tu bias?

— Todos —respondí sin dudar.

— ¡Dios! Creo que me enamoré —Kwan fingió desmayarse sobre el sofá.

— Pienso que cada uno de ustedes tiene algo que les hace únicos y especiales, por eso es que todos son mis bias.

— ¿Cuál era tu sueño de pequeña? —preguntó el que hace pocos segundos había fingido desmayarse.

— Bueno, eran muchos —reí—, algunos muy descabellados, pero mi sueño era convertirme en alguien grande, trabajar en algo que realmente me gustara y donde pudiese compartir mi talento con el mundo...a los 18 años me convertí en Wayner y mi sueño fue conocerlos o raptarlos —Los cinco chicos rieron.

— Qué bueno que no hiciera falta la violencia —dijo Dae riendo.

— No digas eso —fingí un tono ofendido—, mi sótano está bien equipado y hubiesen vivido felices —comenté y ellos volvieron a reír.