"Lo que sea, solo mientras sea por ti"
Somos capaces de hacer lo inimaginable, por una persona que nos necesite y nos importe en realidad.
Angy.
La bala rosa mi mejilla pero caigo justo a tiempo en el suelo evitando mi muerte segura, estoy agotada, los párpados me pesan y tengo el cuerpo hecho un asco. Me pongo en pie tan rápido como puedo y arrojo el cuchillo impactando justo donde quería, en la garganta de mi agresor quien cae despavorido; le doy una última mirada antes de trepar unos de los árboles en busca de algún otro contrincante, pero al no encontrar a nadie más opto por irme a casa.
La silueta del chico de cabellos negros aparece en mi campo de visión, tiene una sonrisa ladina y una mirada juguetona.
—Bien hecho, ya veo porque Dylan te escogió entre tantas —comentó dando media vuelta y entrando directo a el túnel que creamos hace unos meses como vía de entrada a nuestro nuevo hogar.
Di una última mirada a los lados en caso de que alguien se atreviera a seguirme y al no dar con nada sospechoso entro también por el hoyo que conduce al túnel, es una especie de camino para llegar a la caverna que no parece tanto una "Caverna" puesto que nos las hemos arreglado para volverla un tanto agradable.
Al tomar todos esos desvíos que nos ingeniamos para confundir a nuestros enemigos, llego a la entrada la cual tiene una enorme puerta echa del metal más duro de este mundo, doy tres toques y una patada para dejar claro que soy yo quien está afuera con la señal, la morena me abre la puerta con un arma apuntando al frente justo a mi rostros y cuando ve que se trata de mi la aparta dejando que entre.
—Deberíamos cambiar la contraseña, me voy a quedar sin botas antes que acabe el año.—Observo a Mika quien por lo visto se encuentra feliz sentado a un lado de la televisión mientras come unos bocadillos, le quito una de las manos y gruñe en respuesta.
—En vez de pensar en eso, ¿Por qué no piensas en cómo sacar a los chicos de ese infierno que llaman manicomio? —antes de que me dé cuenta ya me ha quitado el bocadillo y se lo ha comido con gracia en su rostro.
—Porque, querida cuñada ya Trisha y yo nos encargamos de eso. —Señala a la morena quien saca cómo puede un maletín negro de debajo del sofá donde estaba y lo pone en nuestra mesa improvisada.
A pesar de estar vendada por casi todo su cuerpo, la chica camina con suma elegancia e incluso podría decir que en cualquier momento podría saltar y correr sin ningún problema.
—Una chica me debe favores, así que prometí no cobrarlos todos por tan sólo uno que pague. —Comento Trisha tomando asiento y sacando hojas del maletín. —Su nombre es Nina Sprous, ex integrante de una banda que fue entrenada para ser asesinos bajo la fachada de cantantes de country.
Tomó una de las hojas que resulta ser una foto de Poe atado a una silla, tiene la boca tapada y sus ojos están completamente en blanco. En este momento pueden decirme cualquier palabra de aliento y la tomare como una gran mentira, este chico está sufriendo y puedo notarlo con tan solo ver una simple foto.
—Se infiltró dentro del manicomio bajo el nombre de Tessa Maxwell, los primeros meses no obtuve ningún información o señal de vida de su parte y eso ocasionó que desconfiara de ella y fuera hasta el refugio donde los demás están escondidos. —Suspiró y le dio un soplido al café que lleva entre sus manos.
—RewCalister, su amigo de la infancia me informó que ella se había ingeniado un buen plan para comunicarse conmigo sin que nadie se diera cuenta, cada tres noches deja contenido bajo las lapidas que están tras del lugar; nadie va a ese sitio porque está en contacto con la zona prohibida la cual —se levanta y da vueltas en su lugar. —Es esta en donde nos encontramos.
— ¿Cómo saber que alguien no la ha seguido?, quizás ya saben que es una infiltrada. —Niega con la cabeza y toma la mano de Mika lo que hace que el chico le bese en los labios, algo que causa una sensación de celos en mí. No son celos de amor porque no siento nada que no sea aprecio por el chico, pero si celos llenos de envidia porque daría lo que fuera por estar en esa escena junto a Dylan.
—Ella al igual que nosotros es una chica muy astuta, muchas veces ha robado los gobiernos y se ha infiltrado sin que nadie se dé cuenta. Imagina que Poe, Galatea y Miguel se casaron y tuvieron un hijo en común, bueno esa chica seria Nina quien posee las mismas habilidades que esos tres.
Doy media vuelta y pienso por instantes en como digerir la información que tengan para mi sobre Dylan y los demás en esas hojas, quizás me volví un arma letal al entrenar día y noche con Mika y Trisha para estar preparada en cualquier momento que sea necesario.
Pero, seguía teniendo sentimientos y eso no podía cambiarlo, ellos se volvieron parte de mí con tan solo conocerme siendo un espíritu de ambulante y cuando me salvaron, eso fue prueba suficiente de que harían hasta lo imposible por mí. No quiero ni imaginarme lo mal que la están pasando en ese lugar y de tan solo tener pensamientos fugaces me siento enferma; quiero liberarlos pero aún no tengo ni una mínima idea de cómo, están metidos hasta el fondo en un manicomio que fue creado en realidad para retener a personas como ellos, como nosotros.
—Me daré una ducha antes de ver esto, estoy del asco.
Soy ignorada de manera rotunda por las dos personas que casi se vuelven una en el sofá donde están inspeccionando sus cavidades bucales muy al fondo.
— ¡Vayan a una habitación! —grito desde la mía y mientras quito cada prenda que cubre mi cuerpo con cautela, puesto que tengo varias heridas que aún no han sanado del todo bien.
Desde que desperté a mitad de la nada con Trisha y Mika en un auto sin placa, entendí que mi vida había dado un giro de 360 grados en tan solo ocho horas de ser rescatada.
Ahora no soy yo quien necesita ayuda, no soy quien está aprisionada en un lugar lleno de personas con mentes enfermas y retorcidas, ahora son ellos. Las personas que sacaron mi trasero de ese infierno entraron a uno hecho especialmente para ellos y como buena amiga y novia que creo soy, los sacaré de allí antes de que se den cuenta.
"Dentro del mismo infierno"Estar entre la espada y la pared, no puede ser peor que estar sin elección alguna.Tessa.Camino por los pasillos blancos del manicomio, los cuales enfocan la luz de las bombillas de una manera tétrica, no por la escasez sino por lo potente que se ven. El lugar está muy iluminado para ser de madrugada y el silencio me causa escalofríos, suspiro y noto como el vaho sale hace tanto frío que mis manos están heladas.— ¿En dónde están todos?—Pienso, por más que agudizo mis oídos no logro escuchar nada, incluso hubo un micro momento en el que pensé estar mue
"Contra pronóstico, solo por ti"Angy.Mika grita desde las afueras y caigo de cara al suelo desde la cama. Busco mi arma bajo la almohada y la cargo para luego quitar el seguro.—No voy a morir sin antes salvar a Dylan—pienso, olvido por completo arreglar mi pijama y corro hasta la salida.La puerta está abierta y hay señales de lucha por todo el lugar, los cuadros rotos al igual que la televisión, los floreros y el sofá rasgado. — ¡Angy!— la voz del chico me hace ponerme en modo de defensa y salgo apresurada pero con cautela.Trisha está a un
"Una mente perversa divida en dos""Podemos elegir con quien formar una familia, pero jamas tendremos la opción de escoger donde nacer y crecer"Tessa.Doy un pequeño masaje a mis hombros tras la jornada de trabajo que me dejo totalmente agotada, mi última actividad es dar la bienvenida a dos pacientes nuevos de nombres Támara y Claus quienes para su desgracia han vuelto a caer en este infierno que llaman sanatorio mental.Empujó la puerta frente a mí y mis ojos caen sobre los chicos atados a las sillas, con la mirada vacía y una sonrisa aterradora. Ambos me miran fijo y no puedo evitar escudriñ
"Dame una razón para ser cruel si todo en ti me dice que te trate bien"Hay personas que están para ti sin darte cuenta y justo a esas personas es a quien le fallas cuando no te importa nada.Angy.Quiero dejar de pensar por una vez en lo que sería de mi vida si aún tuviera familia, me gustaría pensar en tonterías en momentos como estos, en los que me encuentro sola en la habitación con una foto vieja de Dylan que su hermano menor terminó por regalarme cuando lo visité mientras tomaba una ducha y le amenacé para hacerlo.—Si estuvieras aquí todo sería muy diferente... —murmuro por
"Los recuerdos se van desvaneciendo con el tiempo"Dylan.Comienzo a tener mareos y dolores de cabeza poco usuales, los choques eléctricos se detuvieron hace semanas cuando le dije a mi madre que no recordaba nada de mi pasado.Mentí, recuerdo cada sueño como sí lo hubiera vivido y no soñado en mitad de la noche, ya no despierto gritando porque al menos reconozco que es real y que no.—Dylan, ¿quieres ir a jugar con tus amigos?Veo por sobre mi hombro a Tessa; Su uniforme blanco me causa nauseas debido a que me recuerda a los dos enfermeros que venían por mi cada madrugada para infringir dolor tanto físico co
"Pesadillas"Dylan.Despierto.Estoy en medio de la nada, para ser exacto en medio del vacío mismo.Todo a mí alrededor está de color negro, no veo más que oscuridad y una luz a penas visible es lo que me ilumina en este lugar.— ¿Estoy muerto? —Murmuro resignado, estoy comenzando a creer que fallecí en alguno de los tantos experimentos que hizo mamá conmigo.—No.Tras esa voz llena de maldad se escuchan pasos acercarse, bajo
"Entre cielo y tierra, no hay secretos ocultos"Galatea.Estar metida de cabeza en un mundo que desde un principio no es lo tuyo es algo asquerosamente aterrador, Lucia mi enfermera de guardia danza dentro de la habitación en busca de ropa que le sirva para atraer a dos enfermeros nuevos. No tendría nada de malo, sino fuera en mi armario donde está hurgando, si algo detesto más que a nada es que tomen mis cosas prestadas,¡Son mías y punto!—Querida, este vestido me luce. Está divino, mira como queda mi espalda al descubierto.La odio, el simple hecho de que la hicieran mi guardiana en este lugar me enferma, desde qu
"Cosas que no tienen explicación"Angy.— ¡Támara está muerta! —Mi compañera y yo nos miramos como si Mika hubiera perdido todo sentido y uso de razón antes de seguir disfrutando del único desayuno normal que hemos tenido en tanto tiempo. — ¡No me ignoren!, esto es importante.Arroja varias hojas a la mesa y una cae en mi plato de cereal, la miro y le pego un mordisco algo que causa el asco de mi cuñado y la risa de mi amiga.—No estoy jugando, Angy esto podría ayudarnos a sacar a Dylan. —Me detengo por completo y saco la hoja de mi boca para prestarle toda la atención que se mere