La noche fue lenta mientras Aura dormía, de repente se encontraba en el estudio de su antigua casa, la oficina cubierta en paneles de madera y estantes de libros retumbaba debido a que su padre gritaba ‘Ese hombre, ese hombre me las va a pagar ¡No le perdonaré nunca lo que hizo!’ su rostro contorsionado por la ira estaba grabado en su mente ‘tengo el plan perfecto’ murmuraba, mientras buscaba unos papeles y de repente miraba directamente a Aura.
Ella se despertó agitada, hacía mucho que no tenía pesadillas, y con su padre mucho menos, miró el reloj eran las cinco de la mañana, aun podía dormir un poco más, por lo que intentó dormirse, pero no pudo. Así que decidió despertar y hacer un poco de ejercicios temprano, se puso unos auriculares y subió a su pequeño gimnasio casero.
“Y es que no duermes mujer” dijo Carla mientras entraba b
Aura iba de camino a la oficina en silencio mientras se cuestionaba todas las posibilidades, todas las diferentes rutas que él podría haber tomado y todos los posibles escenarios en los que se podía encontrar. Se despidieron ayer alrededor de las siete de la noche y ya no tuvo más información de él. Maurizio no le escribió cuando se le hizo tarde cuestionando por qué no lo había llamado y no le respondió en la noche eso quiere decir que el momento de su desaparición debió de ser entre las siete y alrededor de las nueve de la noche, pero dado que su celular se encontraba en su casa y su madre no, era difícil de entender. Quizás llegó a su casa y salió con su madre, todo eso sucedió antes de las 10 de la noche. Para cuando Aura llegó a la oficina ya eran casi las nueve treinta de la mañana, pero igual y ella no trabajaba bajo un horario estricto y con el caso de Maurizio prácticamente resuelto tenía un poco de tiempo libre el cual había planeado utilizar para tra
Andrea la miró atentamente, intentando recordar que le había dicho a Aura, hasta que por fin entendió “Quizás te aconsejé mal” dijo en voz baja, dándose cuenta de las circunstancias en la que se encontraban ambos “es una relación muy peligrosa” agregó ella “especialmente si se da cuenta Jorge” las relaciones entre abogados y sus clientes eran profundamente desaconsejadas y aunque no estaba establecido en el código de la empresa, no era algo aceptado.“Ya lo sabe” respondió Aura “y aunque es mas complicado de lo que te imaginas, por el momento ya tomé mi decisión” dijo Aura en una voz relativamente baja y suave, la firmeza era visible en sus ojos.“Estás enamorada de él” declaró Andrea en el mismo tono bajo “aunque no se si felicitarte o no” agregó con una semi sonrisa que no l
Desde el exterior se veía el militar que Beck le había indicado, era un hombre joven le hizo un gesto con la cabeza cuando se acercaba como si quisiera confirmarle que era él. Se saludaron y presentaron rápidamente, e ingresaron a la zona militar, el sol ardía y su mente ya solo pensaba en Maurizio.Vio el reloj en la pared eran las doce del mediodía ya, siguió en silencio al teniente Bianco. Cuando entraron al ascensor, él la observó detenidamente, Aura estaba vestida con elegancia, su apariencia destacaba en ese lugar sombrío “Tenemos suerte” dijo el hombre.“¿Suerte?” preguntó Aura levemente confundida“Si” dijo el teniente Bianco “el señor Rinaldi acaba de informar que salió a comer, por lo que podrá entrar a la sala donde se encuentra su cliente” Aura seguía sintiendo su mirada sobre ella, y como se
Aura no podría creer este último mes, había hecho demasiadas cosas y a la vez ninguna, se había acercado a Jorge Russo y a la vez rompió esa barrera totalmente al iniciar una relación con su hijo. Una que le causaba tanto dolor de cabeza a sus planes.Ni siquiera pensaba ya tanto en su plan, de repente le sonaba descabellado y sin sentido, quizá si debía soltar esto, ya van mas de siete años sin conseguir nada, a estas alturas todas las pruebas que pudieran delatarlo podrían estar eliminadas, quemadas, ‘en el rio debajo del puente’ dijo en voz muy baja mientras sonreía irónicamente.‘No puedo creer que esté pensando en abandonar esto’ pensó con pesar, le había dedicado tanta parte de su vida a esta búsqueda que abandonarla era perder el sentido de dirección, se había convertido en abogada por esto, hab&i
“Hola Vanni” dijo Aura unos segundos después, recuperándose rápidamente de su confusión “me alegra mucho verte” agregó con una semi sonrisa “te ves muy bien ¿Cómo estás? ¿Cómo va todo?” añadió rápidamente.“Estoy muy bien, mi Lucecita” respondió el hombre con cariño mientras se acercaba a ella y la abrazaba sin importarle el hombre que estaba a su lado en ese momento “acabo de llegar de misión, ayer pues, te he extrañado mucho. Lamento haber sido tan brusco la última vez que nos vimos” añadió honestamente, aunque no estaba de acuerdo con ella, su conciencia estaría marcada de por vida de haberse dado cuenta que algo le hubiera pasado mientras el se negaba a hablarle. Ellos siempre habían sido muy unidos, siempre buscando la forma de distraerse de todo lo que suced&i
Stella se volteó inmediatamente al ver el intercambio de la pareja. Supuso lo que debía estar pasando entre ellos y decidió darles privacidad.Aura sintió un estremecimiento recorrer su cuerpo, y sentía sus mejillas enrojecerse ante el erotismo en la voz del hombre. Giró su rostro hacia la ventana a la derecha para calmar sus emociones, el trayecto se le había hecho interminable. Pronto llegaron al apartamento de Aura, Stella se mostraba todo el tiempo cautelosa, asustada de incomodar a Aura o molestarla.El lugar era amplio, pero modesto, tampoco era el lujo al que Aura estaba acostumbrada, se preguntó porque estaría viviendo ahí, pero no era el momento. “Puedes tomar la primera habitación a la izquierda” le dijo Aura mientras señalaba una puerta en el segundo nivel “al frente esta Carla y al fondo estoy yo” añadió “ya pusieron tu
La mente de Maurizio giró a mil por horas, ella acababa… acababa de decirle que estaba enamorada de él. “Dile a esa voz tuya” dijo mientras se acercaba a ella y besaba su cuello “que me encanta” pasó lentamente su lengua por el lóbulo de su oreja mientras Aura sentía su piel estremecerse “¿Qué mas te dice la voz?” añadió él en un tono altamente sensual a su oído. Aura sentía su cuerpo calentarse y la necesidad de sentirlo dentro suyo crecía por segundo, sentada sobre el sentía su miembro crecer debajo de ella y era algo casi insoportable “me dice que deberíamos subir a la habitación” se encontró diciendo ella sin darse cuenta, nunca antes había sentido esa urgencia de estar cerca de alguien, de besarlo, abrazarlo y que la besara, sentir su piel sobre la suya era algo fuera de este mundo. Maurizio llevó su boca a la de Aura en un apasionado beso que solo aumento la tensión sexual entre ambos “vamos a hacerle caso a lo que dice tu voz” dijo el con la voz entrecortada m
“Vale Maurizio” respondió Sergio con fastidio, pero su tono había bajado considerablemente “de verdad quisiera felicitarte, pero esa mujer no me convence” suspiró notablemente “Cuídate hermano” añadió y colgó sin esperar su respuesta. Maurizio se volteó y desde el balcón vio a la mujer en la cama, aun dormía, su cabello suelto estaba esparcido en la almohada ¿Cómo se negaba a decir que esto era lo que quería ver por el resto de su vida? La amaba tanto que le molestaba estar lejos de ella, era una agonía para su cuerpo. Sentía que su vida había por fin cobrado sentido, y que todo lo que le venía encima sería capaz de soportarlo con ella a su lado. Aura se despertó y el continuó observándola del balcón, sonrió al verla palpando la cama como buscándolo y tragó en seco al verla sentarse en la cama con el pecho totalmente desnudo, se sentía como un pervertido, de hecho, podría entrar y verla y tocarla de cerca. Pero por alguna razón decidió de disfrutar de la vista, sonri