***NARRA GRACE***Monterrey, Nuevo LeónNathan es el amor de mi vida, pero no puedo ser egoísta, mi hermana también siente amor por él, yo sería incapaz de dejarla de lado, solo porque él, me ama a mí, no sería justo para ella.–No Alma Rosa, siempre me vas a importar – Dije llorando – Somos hermanas y por distintos motivos, tú no cuentas con mi padre, ni tampoco yo y eso nos hace que, solo nos tengamos la una a la otra. Yo no quiero que, estemos separadas por un hombre y no puedo aceptar a Nathan sabiendo que, tú lo amas.–Y yo no puedo dejar que lo rechaces, sabiendo que el te ama a ti Grace – Alma Rosa lloraba conmigo – Nathan me gusta mucho, en su momento creí amarlo y después me convencí que no podía amar a alguien que amaba a otra mujer y sabiendo que esa otra mujer es mi hermanita menos. Además, tú más que nadie mereces ser feliz, Grace.–Coincido con Alma Rosa amiga – Julia nos abrazó a las dos – Deja de ser necia y acepta hablar con Nathan, él pobre debe de estar desconsolado
***NARRA CAMILO***Monterrey, Nuevo LeónMe estaba preocupando lo que me dijo Nathan, de lo de él y Grace, estaba esperando a que ella o Julia, me vinieran a visitar, necesitaba hablar con cualquiera de las dos, pero en especial con Julia, la extrañaba, necesitaba verla, ya los días aquí se me estaban haciendo eternos. Como había dicho Nick, aquí ya no se sentía la diferencia entre un día y otro.Tomé uno de los libros que había pedido en la biblioteca y me disponía empezar a leerlo cuándo se acercó a la celda, uno de los guardias. –Buenas tardes, Camilo, tienes una visita de parte de sus abogados – Me dijo el oficial.Me alegraba que fueran los abogados, porque ya me estaba desesperando él no saber cómo iba el avance de mi caso, no me pensaba quedar todo el tiempo aquí, si yo no era el que había cometido el crimen.–Buenas tardes, oficial, claro que sí.Me preparé mentalmente para ir al encuentro con los abogados. Esta vez les preguntaría cómo iba la investigación, necesitaba saber
***NARRA CAMILO***Monterrey, Nuevo LeónEl abogado me miró, creo que la forma en la que le pregunté, no era la correcta, pero yo era el que estaba encerrado, no él, yo ya estaba cansado de tanto esperar, nadie me decía como era que iba el asunto, porque al que le interesaba era a mí. –Ya sé que está impaciente, joven, Camilo, tiene razón en estarlo, pero nosotros siempre trabajamos para el beneficio del cliente, las demoras son porque hay mucho trabajo que recopilar.Por supuesto yo entendía que este proceso llevaba su tiempo pero una cosa era decirlo y otra cosa era estar del lado contrario. Porque yo era el único que podía sentir como me sentía, ellos simplemente podían hacer qué las cosas funcionaran a mi favor.–Solo debemos esperar un poco más, Camilo, porque ya con Roxana, está detenida, tu situación va a mejorar, porque tú solo eres culpable de haberla escuchado a ella – Me dijo Lu.Yo simplemente había querido estar bien con Roxana y como Nicolás era también mi amigo, se me
***NARRA NATHAN***Monterrey, Nuevo LeónLu y yo salimos del reclusorio, estábamos fatal y muy estresados ambos por ver a Camilo, en las condiciones que lo habíamos visto. A mí me pareció que, había envejecido un par de años, se veía fatal y me dolió mucho ver cómo ese lugar tan horrible que es la cárcel, le robaba la vida a mi amigo Camilo y no sólo a él, Lu estaba demasiado afectada de verlo así, al subir a la camioneta mientras conducía para ir a su casa, me di cuenta de ello.–Lu, perdona si te incomodo los pensamientos ¿Qué es lo que tienes? Te veo de un modo, en el que no estabas cuando entramos ahí – Me atreví a preguntarle – Tienes que relajarte, con Roxana detenida, Camilo saldrá, más pronto de lo que esperamos.Roxana había sido la que metió a Camilo en todo esto, porque cuando supo lo de Nicolás y la muerte de Diana, se vio envuelto en esta situación y ya lo estaba protegiendo sin darse cuenta, ahora eso iba a salir a la luz, que fue introducido sin que él se diera cuenta,
***NARRA NATHAN***Monterrey, Nuevo LeónPero eso ya había pasado y ya no se podía remediar y ahora tenía esa oportunidad, de no dejar pasar más el tiempo, porque así como lo decía Lu, las cosas se podían enfriar e iba a ser más difícil querer arreglarlas después. –Lo sé Nathan, por eso te digo que lo peor que puedes hacer es dejar de luchar. En esta vida siempre hay dos posibles respuestas, sí o no. Al menos tienes que morirte en la raya, intentar todo por recuperarla y además ya me había hecho ilusión el ser testigo de su boda – Me recordó, Lu – No me dejarás vestida y alborotada, como dicen.Con toda justa razón y ella, ya lo había dicho con toda la sabiduría del caso pero yo no quería que la respuesta fuera un no, yo quería que lo de Grace y mío fuera para siempre y me diera un sí, para toda la vida una vida que podíamos llevar juntos, porque sabía que ella me seguía amando.–Tienes razón, Lu – Me sudaban las manos – Ya estamos llegando a tú casa y me muero de nervios de saber sí
***NARRA GRACE***Monterrey, Nuevo LeónDesperté en la casa de Lu, por un momento me sentía aturdida y descontrolada sin saber, ni tener idea de dónde me encontraba. Me levanté despacio del sillón a modo de quedar sentada y una vez que lo hice, levanté la vista y mi mirada se encontró con la suya, con la de Nathan, él me miraba fijamente como si quisiera traspasarme y mis ojos y los suyos se quedaron suspendidos en ese contacto visual, de manera que, ni yo sabía si estaba soñando o era real, hasta que, escuché su hermosa voz.–Hola, no estás soñando, Grace. No lo estás, estoy aquí contigo, ambos estamos aquí juntos en casa de Lu – Me dijo leyendo mis pensamientos, respondiendo a mis dudas – Estamos solos tú y yo.Él siempre lo hacía, podía leer mis pensamientos, era algo que nunca había sabido comprender, pero me hacía sentir, más conectada con él, era como si comprendiera todo lo que yo sentía. Por eso no me preocupaba.–Hola, Nathan, no sé qué decirte, yo no esperaba verte aquí, aho
***NARRA GRACE***Monterrey, Nuevo León–No pasa nada, eso ya lo he dejado atrás, pero ahora no sé que vaya a ser lo mejor que podamos hacer, yo quiero ser feliz y creo tener derecho, después de la vida que he tenido, pero me asusta pensar que Alma Rosa, no pueda soportar el vernos casados – Sollocé – La quiero Nathan, aunque suene increíble, el saber que es mi hermana lo cambió todo para mí.Es como si hubiéramos vivido sabiendo que éramos hermanas toda la vida, fue un instante en el que nos pusimos frente a frente y nos dimos cuenta que nos había hecho falta solamente eso, porque nos queremos y yo no puedo ser egoísta con ella.–No esperaba menos de ti Grace, siéndote sincero y conociéndote como te conozco, me puedo dar cuenta perfectamente, que desde que supe que ustedes eran hermanas, no había dudas que tú ibas a aceptar a Alma Rosa porque eres la niña más noble que conozco, eso me hizo amarte desde que me diste de tu lunch en el kínder ¿Lo recuerdas?Eso nunca lo iba a poder olvi
***NARRA NATHAN***Monterrey, Nuevo LeónNo podía creer que, pese a que me sentía muy nervioso, de presionar un poco las cosas con mi hermosa Grace, ella me estaba dando la oportunidad de mi vida, de volver a estar a su lado y esto lo iba a aprovechar, lo tenía que aprovechar, porque ya no habría más oportunidades para mí, si dejaba ir a Grace nuevamente, la iba a perder para siempre y no quería eso, simplemente no lo quería, porque esta vez si que me iba a morir sin ella.–Te amo Grace, gracias mi amor, por darme una oportunidad de volver a estar a tu lado – La seguí abrazando – No sé, como pudimos pasar tanto tiempo separados, que me pareció una eternidad.El tiempo que había pasado lejos de Grace, me sentí muerto en vida, me fue difícil, hacer las cosas cotidianas con normalidad. Fue como si estuviera pagando una penitencia, fue peor que la vez anterior. –Nathan, mi amor – Me dijo Grace – Te veo muy flaco y hasta ojeroso ¿Has estado comiendo?La incertidumbre me había desgastado p