***NARRA LU FABIANO***Monterrey, Nuevo LeónMe preocupaba qué Grace no abriera los ojos porque veía que al parecer se estaba quedando dormida y ya eso no me agradaba para nada, mi mente se puso en modo mamá, tenía que atenderla en lo que llegaba, Julia.–Muy bien Julia, entonces aquí los espero mientras tanto le voy a hacer un té a Grace, para que entre en calor, porque me dice Alma Rosa, qué la siente muy fría.Haría todo lo posible para que Grace, se mantuviera despierta en lo que llegaba a Julia a asistirla, no quería que se le fuera a bajar la presión o que se desmayara.–Está muy bien Lu, póngale una frazada en las piernas, cúbranle la espalda y los brazos para que pueda entrar en calor y si tienes calefacción te puedo pedir que lo pongas a un nivel moderado y ya con eso verás que va a entrar en calor.Me acerqué a la calefacción y le aumente a la temperatura para que Grace empezará a sentir un poco más de calor, no podíamos dejar que se enfriara más.–Julia, ya le subí a la cal
***NARRA NATHAN***Monterrey, Nuevo LeónEn cuanto entre a la casa de Lu y me dirigí a la sala me di cuenta de la presencia de Alma Rosa y se encendió enseguida un foco de alarma. Y luego cuando Grace, me lanzó una mirada reprobatoria, presentí que Alma Rosa la había puesto en mi contra.Yo no me quería acercar porque me daba miedo que me rechazará entonces deje que Julia empezará a revisarla pero no me quería salir de ahí. Estaba demasiado preocupado por Grace, porque ella era todo para mí y no me importaba la presencia de Alma Rosa.–Alma Rosa, un favor te ¿puedes hacer cargo de Nicky, por un momento?, necesito hablar con Nathan. Cuando Lu, le pidió eso a Alma Rosa, supe por dónde iba el asunto, definitivamente Grace, no quería que yo estuviera presente. Me dolía que se comportara de esa manera, yo solo quería estar a su lado. Tuve ganas de llorar ahí mismo, pero me contuve.–Claro que sí Lu, yo me hago cargo de la niña, no te preocupes.Le respondió Alma Rosa, y sentí mucho coraje
***NARRA NATHAN***Monterrey, Nuevo LeónNos quedamos los dos en silencio porque en realidad yo ya no quería decir nada me dolía toda esta situación porque si bien yo tampoco había tenido culpa en eso no veía porque Grace, me castigaba de esta manera. –No te aflijas Nathan, verás que muy pronto la solución se arreglara en buenos términos y todos vamos a estar felices y contentos.El optimismo de Lu era increíble porque desde que la conozco no la había visto decir algo negativo de nadie. Mientras que yo, siempre llegaba a conclusiones erróneas y pensaba mal de muchas personas incluyendola a ella.–Sí, Lu, no te preocupes, voy a mantener la mente abierta de que esto pronto va a tener una solución favorable, para los que estamos metidos en este dilema sin tener absolutamente nada que ver.Porque yo si hubiera sabido desde mucho antes que, Alma Rosa y Grace eran hermanas, no me hubiera metido en una relación con ella, precisamente para evitar un problema mayor; aquí me quedaba claro que
***NARRA CAMILO***Monterrey, Nuevo LeónEstando preso, no sabía ni cuantos días pasaban o no pasaban, era como si el tiempo se congelara en esa eternidad devastadora para siempre. Sentía que mi alma ya no existía y si existía se estaba consumiendo muy lentamente dentro de ese lugar. Al menos estábamos Nick y yo juntos ahí dentro para hacernos compañía aunque él, también estaba luchando y consumiéndose en su propio dolor, no sólo por estar preso sino porque afuera había quedado Lu y su hermosa Nicky y él estaba perdiendo todavía más tiempo por no estar al lado de su pequeña.–Camilo, no sé tú pero yo pienso que nunca vamos a salir de aquí – Me dijo Nick una noche – No me has contado que te han dicho los abogados que ese te ha puesto.A ese se refería Nathan, era todavía su odio, que no lo dejaba pensar bien, pues Nathan, había sido el que había dado la cara por mí, así que no podía hablar mal de él, o referirse de esa forma.–Ese se llama Nathan, no te refieras a él de manera despect
***NARRA CAMILO***Monterrey, Nuevo LeónDesearía nunca haber callado lo de Diana, desearía tantas cosas, pero no era tiempo de desear, era tiempo de pensar y ojalá que con mi mente pudiera llamar a alguien de fuera que viniera a verme. Al día siguiente, después de nuestra hora de desayuno y cuando nos iban a llevar al patio, un guardia, me llamó.–Camilo, buen día tienes una visita – Me informó – Preguntaré si la quieres recibir o no.–No sé, si es mi abogado, sobra decir que sí lo quiero recibir siendo alguno de ellos tres, claro – Declaré – Sí es otra persona, depende de quién sea.–Es un joven llamado, Nathan Archibald ¿Lo piensa recibir o le digo que no?Él iba a ser nuestra salvación, estaba seguro de eso, Nathan a pesar de que tenía mucho rencor hacía Nick, él nos iba a ayudar a buscar a la mujer de Boris.–Claro que sí, dígale a Nathan por favor que sí lo recibiré – Dije feliz – Vamos, por favor.El guardia me llevó a encontrarme con Nathan, quién me esperaba en la misma sala
***NARRA NICK***Monterrey, Nuevo LeónCuando me enteré que Nathan, había venido a visitar a Camilo, me molesté, pues a él era al único que habían visitado sus abogados en tres ocasiones y de los míos ni sus luces, pueda que Camilo, haya tenido razón, y mi caso era más complicado que el de él. Pero aun así estaba esperando que se dignaran un día de estos a visitarme, de lo contrario, yo creo que los conoceré el día del juicio.Lo bueno de esa visita, era que Camilo, había enterado a Nathan, del asunto de Boris y su esposa, pues esa era una pieza clave, porque de eso dependía que la investigación diera un giro y no en nuestra contra, ellos tenían que estar también tras las rejas. Ese hombre que salía de la casa de Diana, antes de que yo entrara, tenía mucho que ver.No se podían quedar de brazos cruzados, tenían que dar con ellos a como diera lugar, y yo de tonto dejándome chantajear del posible encubridor, porqué qué hacía justamente afuera del departamento de Diana y porqué estaba fi
***NARRA NICK***Monterrey, Nuevo LeónBoris, había jugado bien sus cartas, según él, pero a mí, no me iba a engañar; por eso el extorsionador iba a salir extorsionado, pues no había que subestimar al enemigo, le iba a jugar con las misma partida, en nadie se tenía que confiar al cien por ciento y el redondito cayó en su propia jugada. Pero como dice el dicho, a todo pavo le llega su navidad y él estaba a punto de ver la verdadera cara de una mente maestra, ese hombre no me llegaba ni a los talones, era un novato, él pensaba que se iba a librar fácilmente de mí y se había confiado, me había dejado entrar en su juego.–Lo bueno es que te arrepientes de todo, Nick, eso es un punto a tu favor, porque si no te arrepintieras de lo que hiciste, la justicia iba a caer sin piedad sobre ti y te pueden condenar a la pena máxima por eso.Yo no iba a caer tan fácilmente, de algún modo me hubiera proclamado inocente, no sé, algo que me librara de cumplir todos los años que me pudieran imputar, no
***NARRA LU FABIANO***Monterrey, Nuevo LeónMe dolía mucho ver a Nick sufrir en la cárcel y que la mujer de Boris y él mismo anduvieran en la calle con esa total libertad. El abogado Martínez, sabía de mi relación con Nick y nos permitió un poco de espacio, ese mismo día durante la visita. Nick y yo, nos pusimos de pie y nos abrazamos llenos de amor, cómo si no fuera a haber, nunca un después.–Lu, mi amor. Por favor agota todos los recursos para que yo, pueda salir de aquí. Te lo suplico – Las lágrimas se desbordaban de los ojos de Nick – Quiero estar contigo, con Nicky y rehacer nuestras vidas. Te amo, quiero recuperar todo el tiempo perdido con ustedes.Era desesperante verlo en ese estado, yo también quería que saliera, pero teníamos que ser pacientes, todo tenía que ser estudiado, para poder presentar algo sustentable, algo que no pudiera dejar en duda que él era inocente.–No llores, amor, vamos a salir de esto. Tú me conoces – Aseguré – Agotaré todos los recursos, para poder h