***NARRA GRACE***Ciudad de MéxicoEvité a toda costa que mi amigo, se acercara demasiado a esas tipejas.–Camilo, vámonos por favor, te lo pido – Lo abracé llorando –Sácame de aquí.Quería desaparecer de la presencia de esas mujeres, tan corrientes y vulgares, que no les importaba formar un escándalo a la vista de todos. Como si no tuvieran decencia exponiéndose a las habladurías. Así que evitaría a toda costa que siguieran arrastrando mi dignidad por el suelo.–Grace, ¿Qué tienes bonita? – Me preguntaba Camilo muy preocupado – ¿Te sientes mal?–Sí, me siento muy mal. Por favor, ya no quiero estar aquí.Lo dije con urgencia, lo menos posible debía estar cerca de esa gente, mal educada y sin principios, eran unas arribistas, pensando cómo iban a engatusar a Nathan. No tenían escrúpulos de enredar así a una persona.–Te ayudo Grace, vámonos.Mi amigo me sacó abrazada de la dulcería y no podía contener el llanto, cuando estaba por decirle lo que me pasaba. Nick se había bajado del auto
***NARRA GRACE***Ciudad de MéxicoEntramos a la clínica Camilo y yo, Julia Roberts de inmediato comenzó con una revisión de rutina y a anotar cosas en una tabla que traía y después de que me revisó comenzó con las preguntas.–Grace, me dijiste ayer que te seguiste sintiendo mal y ahorita al revisarte vienes con la presión arterial muy baja, imagino que ahora te sientes peor que ayer.–Sí Julia Roberts, me siento mal – Le dije sinceramente – Me siento débil y con sueño. Estoy fatal la verdad.–Necesito que vengas mañana temprano conmigo en ayunas a realizarte éstos análisis, estás muy pálida y tu temperatura es muy baja. Dime Grace ¿Has tenido relaciones sexuales sin protección?–Amiga, pero ¿Qué preguntas son esas? Aquí con Camilo presente – Me puse nerviosa – Si las he tenido pero todo con protección y hace unos tres días terminé de mi periodo así que no estoy embarazada.Eso estaba descartado, pues siempre habíamos tomado esa precaución, aunque ahora me encontraba un poco delicada.
***NARRA NICK***Ciudad de MéxicoMientras íbamos camino a Santa Fe, me di cuenta que a Grace la estaban llamando sus padres, no quise comentar nada en ese momento para no hacerla sentir mal, quería que al menos se distrajera un rato comprando zapatos.Al llegar a Santa Fe, bajamos del auto y después la tomé de la mano y comenzamos a caminar. Mi amigo Camilo iba muy contento y mientras Grace y yo, entrabamos a una tienda de zapatos él se quedó fuera respondiendo una llamada de Rox. Estábamos viendo una gran variedad de calzado, veía que Grace no se decidía por ninguno.– ¿Te gusta algún modelo de aquí, Grace? – Le pregunté a mi novia – Creo que todos se te van a ver hermosos.–Sí, me gustan varios Nick pero no quiero ser abusiva contigo. Te amo y lo único que quiero es que estés conmigo, sin importar si me compras algo o no. – Estaba apenada por eso.–Pero pasa que yo, te quiero comprar todo. Te amo Grace, verás que estaremos como Camilo y Rox en una eterna luna de miel todos los días
***NARRA NICK***Ciudad de MéxicoPodía ser muy su padre y todo lo que quisiera, ella ahora era mi responsabilidad y así iba a ser de ahora en adelante, todo lo iban a tener que tratar conmigo. Grace no tenía que pasar malos ratos con ellos. Yo daría la cara por ella, ante todas las adversidades.–Lo siento Don Manuel de tenerle que decir así las cosas, no me dejaron otra alternativa, Grace y yo hemos decidido vivir juntos – Dije pavoneándome con orgullo – Nada de lo que usted o su esposa hagan o digan, harán que cambiemos esa decisión. Ahora yo soy responsable de mi mujer.–Usted, es una persona de lo peor ¿Cómo se atreve a engatusar a mi hija? Después del trato que le dio. Es usted el colmo y es la última vez que se lo pido. Comuníqueme a mi hija, por favor. –No se la puedo comunicar, ella está dormida. Mañana ya nos veremos en la empresa, a menos que nos vaya a despedir a los dos. Excelente noche Don Manuel.–No Nicolás, no te puedo correr por ética laboral y a Grace menos. Ella e
***NARRA NICK***Ciudad de MéxicoTeniendo esa presión de Camilo era imposible dejarlo pasar, esperaba que esto no fuera un motivo para iniciar un pleito entre ella y yo.–Grace, mientras estabas dormida sonó tu celular – Le dije apenado – Era tu padre quién llamaba y me tomé el atrevimiento de responder la llamada.–Nick, ¿Por qué hiciste eso? Creo que no te das cuenta que las cosas se pueden poner peores con él y con mi mamá – Me dijo ella molesta – No tienes derecho de responder un teléfono que no es tuyo, si mi padre hubiera querido hablar contigo, te hubiera llamado a ti.–Grace, bonita. No te alteres – La calmaba Camilo – Nick hizo mal pero no había como bajar el volumen de tu teléfono y no quería que te despertaras.–No lo justifiques Camilo, Nick hace siempre lo que quiere desde que lo conozco y no me parece justo que se aproveche de las situaciones. Conozco a mi papá y debe de estar lo que sigue de enojado ¿Qué le dijiste Nick? – Me dijo Grace llorando y temblando de coraje –
***NARRA NATHAN***Ese domingo por la noche, después de despedirme de Alma Rosa, que la verdad no la quería dejar ir, me fui a mi casa, no podía dormir fuera también el domingo y me esperaba un round mortal con mis padres, que me iban a reclamar lo de ayer sábado y el no llegar a dormir. Llegué muy rápido y antes de poder meter mi llave en la cerradura, mi mamá me abrió la puerta.–Vaya, vienes solo. Al menos no has tenido el descaro de traer a esa mujer a nuestra casa – Escupió mi madre –Nathan, tenemos que hablar.Mi madre se encontraba verdaderamente enojada, tanto así que ni siquiera me habia saludado en cuanto abrió la puerta. No me acordaba cuando habia sido la última vez que se encontraba en ese estado y podía jurar que nunca la había visto así. Pero ella sola se quería enojar porque así lo quería. Mis asuntos personales solo me debían importar a mí, no a ellos.–Buenas noches mamá. Primero salúdame y después me regañas, porque sé de sobra que lo harás, te conozco perfectamente
***NARRA NATHAN***No podía creer lo que veía, para mi mamá y para Alicia al parecer no había pasado el tiempo y seguían con eso de Grace y yo podíamos regresar, la necedad ante todo y querían seguir controlando nuestras vidas a su antojo y conveniencia. Eso le teníamos que poner punto final.–No sé si ellos lo sepan o no, mamá, pero lo que sí sé es que tú no eres la persona indicada para estar diciendo esas cosas. – Dije deteniéndola. – Deja que ellos arreglen sus propios problemas.Era vergonzoso ir con habladurías de ese tipo, si Grace se quería dar contra la pared, que ella misma se curará las heridas después, aquí no se iba a obligar a nadie si no quería entrar en razón. Sus sentimientos no los podíamos cambiar hacia mí. Pero era importante que ellos arreglaran sus problemas y no que terceros se metieran en sus asuntos familiares.–Nathan, no me hables así. Te guste o no, yo soy tu madre y me merezco un respeto. Además si les quiero avisar de esto en el caso que ellos no lo sepan
***NARRA NATHAN***–Pensé que vendrías a acompañarla como el día que se desmayó. Ayer ella vino con un amigo Camilo, se llama creo. Se siguió sintiendo mal y la cité para análisis de laboratorio, creí que sabías.–No, ¿Por qué iba a saberlo yo? Quién debe saber y atender a su mujer es su noviecito. Ni siquiera le deja que tengamos contacto vía telefónica, no creo que le permitiera siquiera avisarme de su estado de salud. –Ya lo sé Nathan, ella misma me lo dijo que regresó con ese desgraciado y si te sirve de algo no estuve de acuerdo, pero es mi amiga y estaré para ella sin importar lo equivocada que ella esté y también lo estoy para ti.–Gracias Julia, sabes que de mi parte es lo mismo.–Permíteme Nathan, ahí viene Grace.Miré en dirección a la puerta y la me le quedé viendo, venía con Camilo, el tipo con el que estaban ella y Nicolás en Santa Fe y venían riéndose como si su salud le pareciera un chiste. Últimamente no conocía a Grace.–Buenos días – Les dije a ambos al verlos entra