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04. Cita Romántica

ENCONTRÉ EL AMOR 

CAPÍTULO 04

No puedo creer que David quiera verme, pensé que solo me llamaría y ya, pero no creí que me pediría que nos viéramos; por eso debo apurarme con todo lo que tengo por hacer, y poder estar lista a tiempo.

Ya son las 10:40 de la mañana y no he comenzado hacer nada de lo que tengo pendiente por hacer, espero que me rinda el tiempo, pero menos mal que no está como otras veces que parece la casa de los cochinos, pero si no comienzo ahora mismo no terminaré a tiempo, por lo que me cambio de ropa inmediatamente por algo mucho más sencillo y liviano de manejar y que así pueda moverme de forma adecuada por la casa. Para estar más tranquila coloco un poco de música para empezar a realizar todos los quehaceres pendientes de esta casa.

Ya han pasado varias horas desde que comencé a limpiar, hasta que por fin termino por completo, ahora si la casa se ve limpia y habitada por personas y no por animales.

Ahora comienzo hacerme algo de comer tal vez me haga un poco de espaguetis hasta que me decido completamente por mi primera opción, empiezo por colocar un poco de agua a hervir y poder hacer un poco de ellas claro que con mucho queso ya que me gusta lo mucho que se compacta con la pasta y lo delicioso que es estando derretido, eso es otro nivel, además me gusta porque no es mucho lo que hay que hay que hacer para prepararla.

Pasa un largo tiempo de espera hasta que mí comida por fin se encuentra lista, me acerco a la cocina para servirme un poco.

Al terminar me dirijo hacia el sillón de nuestra sala mientras, para colocar mi plato servido en la pequeña mesa del frente y así poder tener las manos libres, al tenerlas libres tomo mi celular para revisar mis redes sociales que por cierto no las he visto desde que me topé con el mensaje de mi madre y mucho después cuando contesté la llamada.

Al desbloquearlo con mi huella veo que tengo mensajes recientes y para mi sorpresa son de David —Podemos vernos más tarde— me desconcierta un poco pero mi mamá no estará en casa así que creo que sí puedo y le respondo a los pocos minutos, —Si, si puedo más tarde, pero dime a qué hora— Le digo para saber con exactitud —7:30 para que puedas estar lista, no te apresures— miro mi reloj son las 5:00 da bastante tiempo, —Esta bien, por cierto hay otro cambio de planes ya no podremos ir a otro lugar, crees tener problemas con venir a mi casa 

— No, no hay problema con ello, yo voy en mi auto— respondo sin cuidado. Cuándo termino de hablar con él me dirijo a la cocina a servirme un poco más del delicioso espaguetis que prepare, veo el gran reloj de la sala que apunta ser las 5:30 —El tiempo pasa muy rápido, refunfuña mi subconsciente— cuándo termino de comer mi segundo plato de espaguetis voy camino arriba para llegar a mi cuarto y descansar un poco antes de empezar con todo lo de arreglarme para el momento en que me encuentre con David.

Ahora que lo pienso no le he contado nada a mi mejor amiga de lo que me ha sucedido hoy, sé que estaba en piscina con sus primos pero según ella a ésta hora podría localizarla, dudo un poco en si hacerlo o no ya que no quiero interrumpir nada de lo que esté haciendo.

En fin me decido y la llamo. Mi celular con su nombre en la pantalla empieza a sonar esperando a que ella conteste su teléfono; al esperar escucho la voz de Isabella desde el otro lado, mientras nos saludamos y me cuenta sobre su salida a la piscina a sus primos ella me interrumpe para decirme.

—Qué querías de mí, tu no me marcas así como si nada, tu siempre escribes— Efectivamente, lo que decía era verdad casi nunca la llamo, siempre escribo.

—Tengo mucho que contarte, —Respondo con un poco de nervios— Al empezar a contarle sobre la llamada y la invitación de David, con un poco de ansiedad y desesperación en mi voz sin saber qué ocurrirá, pero lo único que sale de la boca de Isabella algunas veces pueden llegar a ser locuras.

—Yo sabía que ustedes seguirían siendo novios.

—Yo le aclaro que no sé para que él quiere verme. Digo un poco molesta, — No me gusta que me estés dando hilos de esperanzas de algo que tal vez no vaya a suceder. Termino de decirle, pero ella aún sigue de terca, algo claro de ella es ese defecto que no le he podido quitar en lo absoluto y es ese positivismo que tiene para algunas cosas, aunque también le acierta en algunas cuestiones y más en las que yo le tengo mayor negatividad, ella es tan positiva no sé de donde tiene eso pero también me alegra que sea así, ya que soy lo contrario, —En eso sí somos polos opuestos— No niego que eso es bueno, pero ésta mujer no para de hablar, solo escucho lo mucho que habla a través del celular.

—Mire señorita me hace el favor y dejas eso locos pensamientos negativos. —Como siempre recomendándome ser positiva a veces eso es un poco fastidioso pero lo soporto. Y le respondo lo qué sé que está esperando.

—Sí, claro cómo la señorita mande. — Respondo un poco flojerosa— creo que algo se le olvida a mi amiga porque conociéndola me recomendaría —Ella interrumpe. —Me haces el gran favor te ponerte bien hermosa, mamasota y terminar apoteósica de manera que el termine babeando sobre sus pies por ti.

—Sí, ya lo sé, justo pensaba que te hacía falta decirme eso. Y ella vuelve hablar.

—Pero en serio colócate un buen vestido que sea coqueto pero a la vez elegante o decente, pero sin importar que colócate más hermosa de lo que ya eres. —Rodee mis ojos al escuchar eso de ella, porque no creo ser tan hermosa, me considero simple, una chica más del común.

—Hay Isabella tú y tu positivismo que te abunda, mañana te contaré todo lo que suceda, te dejo ya debo empezar a bañarme. —Miro mi reloj y marcan las 6:00, debo ser rápida arreglándome y no quedar como payasa. —Odiaría algo así—Digo en mi mente.

—Cuídate mucho, y si por si acaso llegas a perder tu virginidad te recomiendo que te cuides no quiero ser tía aun, no estoy preparada para bebes, además que no soy la tía millonaria que pueda darle gustos, y por cierto si no te sientes preparada y no quieres hacer nada aun no dejes que el abuse, solo le das una patada en medio de sus piernas y escapas de ahí en tu auto lo más rápido que puedas modo rápidos y furiosos. —Rio un poco al escuchar eso, —Estas completamente loca. —Digo con una pequeña risa en mi voz, pero ella solo dice que habla muy en serio.

—Ya entendí, pero deja de ser tan alarmantica con eso, además deja de pensar en cosas como esas yo no creo que eso vaya a suceder para nada, es que no sé ni entiendo todavía el para qué vamos a vernos y tú sigues creándome ilusiones que tal vez sean falsas, y de esa manera llenas mi cabeza de millones de probabilidades de estar con él.

[...]

Cuando cuelgo la llamada decido meterme a la ducha para tomar un buen baño; cuándo salgo de éste con la disposición de comenzar arreglarme, aunque no sé qué ponerme por más que sea quiero que me vea bien arreglada, pase lo que pase también quiero verme genial, miro mi closet y decido ponerme un vestido rojo según es el color del amor y la pasión así que no tendría nada de malo intentarlo, cuando termino de arreglarme tomo lo necesario y me dirijo a mi auto para emprender el largo camino y así saber de una vez por todas que es lo que está sucediendo realmente. Le dejaré un mensaje avisándole que ya voy en camino me doy cuenta que lo ve inmediatamente y agrega un mensaje al chat para responder —Entras apenas llegues, dejaré la puerta un poco abierta para que puedas entrar sin tocar. —OK. Está bien, no te preocupes trataré de no demorar. —De acuerdo, no manejes tan duro, llega con bien por favor. —No te preocupes no andaré duro, solo espérame allí. —Te quiero— Responde, yo solo veo el mensaje pero no respondo, guardo mi celular en el pequeño bolso para entrar a mi auto y poder conducir hasta su casa.

David Grey

Estoy en estos momentos completamente decidido a recuperar a Aisha, y quiero hacerlo antes de que sea demasiado tarde; y sé que solo ha pasado un día, pero la extraño demasiado, estuve pensando toda la noche de si querer alejarla de mí para siempre o no, pero era muy claro que ansiaba mucho estar con ella, por lo que decidí recuperarla. 

Por ese motivo me levante muy temprano queriendo prepararle una sorpresa, la cual ya tengo lista para ella, es por eso que le pedí que viniera más tarde porque sentía que no me estaba rindiendo el tiempo, apenas termine de organizar toda mi sorpresa me fui de una a darme un baño —Siento que huelo a mapache, literal— cuando termino de darme el baño que necesitaba con urgencia, me doy cuenta de que no sé con certeza que camisa usar, me pregunto ¿Roja o Negra? Lo pienso detenidamente hasta que me decido por la negra, —Es elegante— Son las 7:30 debe estar por llegar, por lo que me retiro hacia mi cuarto.

En estos momentos me encuentro por fin solo, mis papas ya se devolvieron a su casa aunque claro me alegraba que hayan venido a pasar sus vacaciones conmigo, los extrañaba, tenía tiempo sin verlos por mis clases, por eso me quede por acá y no pude ir a verlos. Ahora que se fueron es mucho más fácil que Aisha viniera ya que así podíamos estar solos, con mucha privacidad ya que tenemos mucho de qué hablar, estaremos ella y yo en esta casa, donde nuestras voces podrán hacer eco y nuestras respiraciones se escucharán con más afinidad y eso me alegra tanto, siempre me coloco ansioso cuando sé que hablaremos o estaremos uno cerca del otro. Sí, así es como me siento cada vez que la tengo cerca, ella me brinda tanta paz y una estabilidad emocional inconfundible que solo ella me puede brindar, nadie más, solo ella, con solo el tenerla cerca me siento lleno de energía y en las mejores circunstancias posible, tenerla conmigo hace sentir mi vida con una explosión de emociones que me hace subir al cielo y bajar de el por un beso de sus labios que son mi mejor medicina, sin duda alguna ella es mi felicidad completa, la luz de mi ojos.

Autora: Yarenis Guzmán 🌸

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