El silencio en el pasillo reinó por completo, Vanya se levantó y miró a Aisha entonces sonrió de lado a pesar de que todos se encontraban sorprendidos por la repentina confesión.

_ Por si no se ha dado cuenta de la situación en la que nos encontramos pues se la hago ver _ ella señaló un cuarto _ ahí se encuentra Luca, él está conectado a un monitor junto con varios cables, además de eso tiene una placa de titanio en la pelvis y en el fémur. No estamos tranquilos por ese simple hecho que se pudo haber prevenido a la perfección pero la loca de su hija me quiso matar como si valiera menos que la nada.

_ ¡A mí no me dices loca! _ gritó Aisha _ yo no lo estoy, mamá por favor ven conmigo y ya dejemos a estas personas en paz que también ellos están pasando un momento demasiado desagradable por un accidente, yo no provoque esto.

_ Repítelo varias veces quizás lo crees, para ser franca dudo mucho que hayas sido violada, yo no creo ni siquiera lo que comes.

_ ¿Cuál es el escándalo aquí? _ llegó