Sus corazones palpitaban a mil millas por segundos, las mariposas se hicieron presentes en Adara y aunque David se sentía extraño porque acababa de besar a la hermana de su mejor amigo y había sentido un cosquilleo del que tenía años sin experimentar, lo ignoro. ─no, no, esto está mal ─ susurro Adara después de separarse un poco de David y David sonrió ─vamos Adara deja de ser tan conservadora ─murmuro David mientras de nuevo la tomaba y le daba otro beso Beso que hizo que el cosquilleo recorriera de nuevo en Adara y que inconscientemente cerrara sus ojos una vez más. Besos, besos y más besos fue lo único que pudo presenciar la luz de la luna, Adara quedándose con la satisfacción de sentir sus labios de nuevo juntos a los de él, esos labios carnosos que tenía David, sintiendo la dulzura y el calor que él emanaba con cada roce de labios y eso sería la perdición para ella. Aunque David no se quedaba atrás sintió que quedo impregnado con solo besarse, no hubo necesidad de llegar a ot
Tres semanas después Las semanas habían pasado volando, en donde David no dejara de dejarme papelitos en mi asiento en clases (Aun no descifraba como lo hacía) o dejar chocolates en mi habitación cuando iba a mi casa y por obvias razones yo no estaba, por supuesto que yo no me quedaba atrás, hacia lo mismo con la única excepción de que yo no iba a su casa y trataba de dejarle en la mochila que cargaba cada vez que nos encontrábamos a escondidas. Hoy al llegar a la universidad me habían encontrado con un desayuno en donde habitualmente me sentaba, cosa que me hizo reír. Sé que no desayunaste porque prácticamente ayer no dormiste y por ahí me entere que te quedaste dormida, también que saliste sin comer espero que te guste mucho ─David Me dio risa porque sinceramente era cierto, salí de la casa volando porque pensé que tenía clases a la primera hora es decir las 7:00 y en realidad tenía desde las 8:40, efectivamente me había quedado hasta las tres de la mañana realizando un informe y
Los siguientes segundos pasaron como una película, mientras David salió corriendo por su auto, yo estaba con las manos en mi cabeza en estado de shock y frustrada por aquella escena, luego de segundos David entro de nuevo a la casa ─Adara necesito que te tranquilices ─grito David al verme extremadamente nerviosa y pálida─. No quiero llevar a dos personas al hospital, ven ayúdame a levantar a tu mamá y sacarla para subirla al carro Ayude a David tal y como me decía, luego me dio las llaves del auto para que abra la puerta y él pueda meter a mi mamá al auto ─ ¿Dónde queda el hospital más cercano? ─pregunto David nervioso ─ está… creo que está a 15 minutos de aquí ─respondí subiendo a la parte del copiloto y David empezó a manejar como loco ─vamos antes de que pase más tiempo, después no alcanza a que llegue la ambulancia ─dijo David mientras manejaba como loco y mi estómago se revolvió, si no me concentraba en algo pronto vomitaría en el carro de él ─Si, si… está bien ─murmure ─ll
Cuando nos separamos, lo quede mirando por un par de segundos mientras sonreía, me parecía irreal que hoy estuviéramos aquí, y empezaba a comprender lo que me había dicho Sabrina y también había entendido que no se debía mendigar amor, porque este surge de manera natural. —Ven acá minion ─murmuro para luego atraerme hacia él y me beso de nuevo Es en este preciso momento en donde me declaro adicta a sus besos, a su sonrisa, a sus ojos y adicta a todo lo que tenga que ver con él. Definitivamente no voy a olvidar el 18 de noviembre ─ No es por interrumpir el momento romántico, pero tengo hambre ─pronuncie y él se rio─, no te rías, enserio muero de hambre ─ ¿Te parece si cocinamos? ─sugirió y asentí ─ La pregunta del millón ¿Hay alimentos para cocinar? ─pregunte y asintió ─Si, he ordenado que me traigan algunas compras ─respondió y asentí ─ ¿Acaso alquilaste esta casa? Por cierto, es muy bella ─ pregunte una vez mas ─ Esta casa es de mis padres, pero teníamos tiempo que no ven
Un mes después 18 de diciembre 00:01 Había pasado un mes desde aquella salida a la playa con David, la relación durante este mes se podría decir que se había fortalecido. A esta hora precisamente me encontraba en casa de David, ya que me había escapado en pocas palabras de mi casa, para ser la primera en desearle un feliz cumpleaños o eso creía yo ─ ¿Amor qué haces aquí? ─pregunto David saliendo de su casa algo confundido ya que le había dicho que ya me iba a dormir ─Quería darte una sorpresa ¡Feliz cumpleaños! Que sigas cumpliendo muchos, pero muchos años más y espero que sean a mi lado, te deseo lo mejor del mundo y que cumplas todos tus sueños, deseos y metas que te has propuesto ─pronuncie para luego acercarme a darle un abrazo David me acerco más a él y como siempre los besos no tardaron ─ Que así sea, que vengan muchos más cumpleaños y que sean a tu lado, mi amor ─dijo esbozando una sonrisa y lo imite pues amaba y sentía que se oía tan bonito su manera de decirme «mi amor»
─ Estás loco ─reí ─. ¿Yo con tu mejor amigo? Jamás, o sea coincidimos en la cafetería, pero no era yo eso te lo puedo asegurar o pregúntale a las chicas ─segura ─insistió y asentí ─muy segura, aparte cualquiera puede tener la misma ropa que yo ─dije sonriéndole y me miro con los ojos entrecerrados ─puede ser ─acaricio su barbilla ─En fin ¿eso es todo? ─pregunte y asintió─, bien mamá se me olvido mencionarte que iré a almorzar con las chicas ─informe para dar por terminada la conversación e irme a mi habitación y mi mamá negó rotundamente ─No te mandas sola, asi que de ninguna manera vas a salir pues es 24 de diciembre y pasaremos en familia ─casi gritó mi madre y Eithan asintió ─yo la cuidaré mamá para que no se vaya ─se apuntó Eithan y mi madre negó ─no la cuidarás ni nada por estilo, ella sabe que si llega a salir abra castigo ─sentencio mi madre y asentí ─. Y antes de que te vayas a encerrar a tu habitación ¿podemos hablar a solas? ─ ¿para qué? ─pregunte ─tenemos que hablar
David Eithan se quedó por un momento pensativo y sonrío ─Esta clase de bromas no me gustan ya, y no ha de ser verdad porque simplemente ella no me ha dicho nada, yo quiero escucharle de los labios de ella y no de ti ¿entiendes? ─respondió y me miro─, como te dije yo no quiero que, por tu forma de ser, mi hermana sea la que termine llorando por ti ─espera hay algo más que... ─me interrumpió ─vamos nos llama mi padre, dejemos este tema aquí como conclusión porque es Navidad y no quiero terminar discutiendo con mi mejor amigo ─ se encamino a la cena nuevamente ─luego no digas que no te lo dije ─murmuré para mi Adara Después de la cena todos los presentes nos sentamos en la sala de estar y empezaron a hablar de temas triviales. ─Adara, hija ¿por qué no ha venido el chico apuesto? ─pregunto el señor Esteban y de reojo miro a David, adoraba a mi suegrito ─mi novio está con su familia Don Esteban, es 24 de diciembre y tiene que celebrarlo con ellos ─respondí siguiéndole y el señor Es
Un mes después No todo es color de rosa y precisamente hoy en la mañana había discutido con David, por lo que me encontraba con un humor de perros, estas semanas habíamos tratado de solucionar la situación con mi hermano, pero simplemente él no cedía, sin embargo, no me rendiría. ─podrías cambiar de cara ─reclamo Sabrina y la mire enojada ─no tengo otra, así que no confórmate con esta ─respondí y Sabrina apretó los labios ─no te desquites con nosotras por favor ─dijo Leonela y asentí de mala gana ─no me encuentro de buen humor, perdón chicas ─ahora ¿por qué discutieron? ─pregunto Sabrina y las mire ─los benditos celos ─baje la mirada mientras ellas se rieron. Como si ellas no fueran celosas ─ ¿Adara celosa?, wao eso sí que es nuevo ─se burló Leonela y me largue a reír ─ Y ¿por qué los celos? ─preguntó Sabrina ─por Paulina, ya saben volvió a aparecerse en nuestras vidas ─hice una mueca ─eso es problema amiga ─dijo Leonela muy seria ─ ¿ahora qué pasó? ─pregunto Sabrina ─no l