Meses después.

El día inició agitado,a Mikaela le empezaron los dolores de parto a las cinco de la mañana.

Eduardo corría nervioso de un lado a otro,sin saber qué hacer,tal como padre primerizo y de verdad lo era,con Mathias no tuvo la oportunidad de vivir esos momentos.

—Ni abras la boca,Eduardo. por tu culpa estoy en estas,quiero que esa niña salga ya,¡este dolor es insoportable!

—Mi amor,no quisiste una cesárea.

—¡Ya ni me lo recuerdes!

Ellos llegaron a la clínica y tres horas después nació Angelina fuerte y sana,su madre no demostró apego alguno hacia ella.

La enfermera se la colocó en frente para que le diera pecho y Mikaela estaba de mal humor.

—Quite a esa chiquilla de mi vista,¿cómo alguien tan pequeño puede causar tantos malestares?---Masculló y giró la vista a otro lado.

—Yo si quiero sostener a mi hija -- .Eduardo muy risueño la cargó por largo rato y contempló extasiado la belleza de su hija.--¿Qué nombre le vamos a colocar?

—Dolores,porque es lo único que me ha causa