CAPÍTULO 23. 

Me siento y pongo mi cabeza en el sofá mientras cubro mi cabeza con mis manos, pensando en la idea que me parece una locura, ver a Jeorge con una esposa fue algo que nunca me llegué a imaginar hasta ahora. 

Escucho como tocan la puerta pero no pienso levantarme. 

—¿Estás esperando a alguien? —Pregunta él con la pregunta que yo disponía a hacerle. 

—No, eso iba a preguntarte a ti. ¿Quieres abrir? 

Se levanta de mala gana y va directo a abrir la puerta. 

Escucho que saluda a una voz familiar pero no creo que sea exactamente él. 

—Sy, te busca... ¿Ismael? 

Me siento de golpe y trato de arreglar mi cabello, dios, a un problema se le suman como cinco más.  Seguro Ada fue y le contó todo y no he podido hablar con él sobre eso.

—Dile que pase. 

Los dos entran