Alessandro se encontraba en el bar siendo cariñoso con una mujer que no era Lucia y eso a ella la estaba carcomiendo por dentro, pero no debía hacer nada y menos delante de sus amigas, así que la única manera de drenar lo que sentía era bailando como ella sabía hacerlo y si tenía con quién mucho mejor.La música retumbaba por todo el lugar y el hombre colocaba sus manos en la cadera de ella y se movían al mismo compas. Claudia y Gloria no entendían porque de un momento a otro eso estaba ocurriendo y ellas lo único que hacían era observarla y bailar desde su zona, pero notaron que había alguien que no le quitaba el ojo de encima y se trataba de su querido jefe Alessandro.Durante un rato, el hombre la observó bailar, reír y disfrutar en brazos de otro hombre a la mujer que se habían clavado en su corazón. No era fácil presenciarlo. Se sentían incómodos de ver su felicidad. Y, cuando Alessandro no pudo más, se levantó y fue directo a dónde estaba ella sin importar que tenía a otra per
Lucia no podía creer como de un momento a otro había pasado de estar enfurecida con Alessandro y ahora estába acostada con él en su cama y terminando de hacer el amor con el hombre que la estaba volviendo loca, no comprendía su poca sensatez al momento de tomar decisiones.Alessandro estuvo con otra mujer en sus narices y ella también estuvo a punto de cometer una locura y todo por vengarse de un hombre que no se decidía, un día quería estar con ella y al otro le decía que mejor estaban a distancia, pero justo en este instante ambos estaban acostados sobre la cama de él, después que aso la euforia, Lucia no sabía si arrepentirse o simplemente vivir el momento.- Que piensas? -- Alessandro le pregunta mientras le acaricia el rostro.- No sé si está bien lo que estamos haciendo -- él hace que gire y le ve el rostro de frente.- Somos adultos -- ella asiente -- hicimos lo que dictaba nuestro cuerpo.- Ese es el problema -- Lucia se sienta y se tapa con una cobija para poder conversar sin
No sabía si haría bien contándole a sus amigas los acontecimientos vividos con Alessandro y más ahora que Gloria no estaba contenta por lo sucedido, tenía toda la razón, sin embargo ella era la menos culpable.No podía seguir diciendo mentiras, pero no sabía si ellas entenderían la situación que estaba viviendo.-Lucia, si tienes algo que contar, debes hablar – Gloria y Claudia seguían en la terraza con ella a la expectativa de lo que iba a contar.-No es tu obligación, así que tranquila – Claudia estaba siendo más condescendiente.-Vamos a sentarnos y les cuento – Lucia hizo un relato lo más resumido posible, tratando de no ser tan explícita y sin dar fechas.-Todo esto sucedió desde cuándo? – Gloria fue la primera en hablar.-Cómo les dije, fue de un momento a otro – trataba de evitar las preguntas de Gloria – nada era planificado.-Lucia, no te quiero juzgar, pero hay algo que no entiendo – la escucho atentamente – cuando ustedes estaban viviendo su romance, Carlos y y
La casa se sentía vacía desde el momento en que llegué y Alessandro no estaba, tenía cinco días de viaje sin dar ninguna explicación. Después que nos vimos en la cafetería no regreso a casa y asumí que estaba con Flavio, pero al no llegar al trabajo al día siguiente supe que pasaba algo más. Mary lo único que me dijo es que Alessandro llamo y dijo que tenía un viaje de trabajo y volvía en cinco días, solo asentí y no pregunte nada más ya que no valía la pena. Claudia no me insistió en el tema y Gloria, bueno con ella sigue siendo complicado conversar ya que me hablaba lo justo y necesario, decía que no pasaba nada, pero ambas sabíamos que todo había cambiado desde el día que descubrió lo que estaba viviendo con Alessandro. Nada podía hacer en este momento así que iba a tratar de que todo siguiera lo más normal posible. Al entrar la tarde cada uno de los empleados fue dejando su puesto de trabajo y al momento de levantarme para irme, veo entrar a Alessandro a la empresa del brazo co
Lo menos que necesitaba en este momento era ver a Alessandro, pero nada podía hacer ya que se dirigía justo a la mesa en dónde estaba con mis amigos.-Buenas noches – ellos responden y yo me quedo en absoluto silencio – interrumpo?- Para nada, siéntate con nosotros – el ofrecimiento lo hace Mario y mientras eso sucede yo lo aniquilo con la mirada – deseas algo de tomar?- No quiero incomodar – sin embargo lo dice y se sienta a mi lado – solo vine un momento.- Puedes cenar con nosotros – Mario sigue hablando con él mientras yo lo ignoro—a menos que no comas pizza.- Si me gusta, pero no estoy aquí para eso – Claudia me observa para ver mi reacción – quisiera conversar con Lucia.- Lucia! te están hablando – Mario se dirige a mi y yo trato de ignorarlo también – Alessandro disculpala.- No tienes que disculparte por mí – Mario sonríe, lo único que hizo fue provocarme—y tú – Veo a Alessandro – no tengo ganas de hablar contigo.- Es solo un momento – niego rotundamente y Mario
Eran las tres de la mañana y seguíamos hablando de infinidades de temas que teníamos pendientes, sin embargo sentía que faltaba algo más por hablar y no entendía que era o quizás solo eran imaginaciones mías.-En que piensas? – Alessandro me toma del rostro y me da un casto beso, es lo que ha hecho en toda la noche y supongo que no ha intentado nada más para poder terminar de hablar.-Crees que no hay nada más que decir? – Alessandro me observa, pero yo siento que tiene algo más que de enorme y no se atreve – sucede algo?- Por qué lo crees? – no lo niega y tampoco lo acepta – hemos sido sincero el uno con el otro o no?- Si, eso es lo que hemos hecho en toda la noche – aunque yo seguía ocultando las intenciones que tuvimos de sacarlo de la empresa y que las chicas saben que vive conmigo.- Entonces por qué tienes esa duda? – era una sensación, pero no sabía cómo explicarla – ven para acá Me toma de las manos para que me mueve y me sienta junto a él.-Crees que está todo clar
Necesitaba llegar rápido a la oficina para adelantar algunos trabajos que tenía y así dejar de pensar tanto en Alessandro y la noche tan maravillosa que pasamos juntos, conversar y aclarar cada uno de los temas fue un alivio para mí, sin embargo sabía que me ocultaba cierta información, pero todavía no podía determinar cuál era, aunque yo también le oculte ciertas cosas.Tengo que dejar de pensar en eso y pasar la página, el día de hoy seria distinto porque estamos juntos y lo mejor es que esa regla dejara de existir para beneficio de todos.Llegué a la empresa y saludé a Mary con más ánimo que de costumbre, al llegar a mi escritorio lo primero que hago es ver hacia la oficina de Alessandro, pero trato de no hacerlo y concentrarme en lo más importante que es el trabajo.A los treinta minutos de haber llegado salido a Claudia y le pregunto por Gloria, me dice que esta en la terraza hablando con otros compañeros, ella y yo debemos tener una conversación para poder aclarar todo y que
Los párpados me pesan, siento una pesadez en el cuerpo que no me deja moverme como quisiera, pero estoy tan cansada que me quedo tranquilo y trato de relajarme.Escucho gente a mi alrededor hablando, pero no les presto atención ya que solo escucho murmullos y nada concreto así que sigo adormilada.-Lucia! – escucho que me llaman a lo lejos – despierta.-mmm… quiero dormir – solo quiero descansar.-Te sientes bien?—quiero descansar, es lo único que pienso.- Déjala tranquila – escucho la voz de alguien más – necesita descansar – esa persona tiene razón y si no fuera porque me pesan los párpados, juro que los abriría y le daría las gracias a quien sea.Por fin se escucha un silencio profundo y lo agradezco y entro en un sueño tranquilizador en dónde estoy en un campo verde y lleno de flores.***Que pasó? Por qué está en ese estado? Que le hizo? Por qué colapso de esa manera?Esas eran las preguntas que se hacían todos en la casa, luego de la situación vivida fuera de la empres