¿Creen que se le paso la mano a Aimara?
Capítulo 34 Jann logra darle alcance antes de que suba al carro, Carla está llorando a mares y evita que él la toque. —Lo siento, no te vayas por favor, hablemos primero —le pide al verla tan mal. —No Jann. Nunca les he hecho nada, ni las conozco, no sé por qué me tratan de este modo —se defiende. —¿Estás segura que no sabes qué hiciste? —indaga conociendo que en ocasiones hace de las suyas y se hace la victima luego—. Sé que Maite es una mujer difícil de tratar, pero creo que tanto ellas como tú, están llevando estos conflictos al extremo y no creo que sea por nada. —Desde que estás con esa mujer has cambiado mucho, por eso me había alejado de ti, cuando me enteré de lo sucedido vine corriendo a tu lado y he sido yo la que he estado contigo en todo esto, no es justo que termines defendiéndolas. Replica ofendida. Abre la puerta del copiloto y sube dispuesta a irse. —Baja del carro y hablemos, ya estoy cansado de esta discusión sin sentido —le pide molesto, no quiere seguir dándo
Capítulo 35 —Jann, ¿Estás bien? ¿Qué sucede? —le pregunta Carla preocupada al verlo de rodillas en medio del estacionamiento. Una última imagen se queda presente en su memoria, es de Carla junto a Miguel en una cama, ambos durmiendo abrazados. —Deja de gritar por favor, ya está pasando, fue solo una terrible jaqueca —apenas logra decir. Poco a poco se pone de pie con ayuda de Carla. Una vez que siente que puede mantenerse en pie sin ayuda, la suelta, ese recuerdo hace que su humor cambie por completo, pensando en si fue esa la razón por la que rompió con ella. Pero primero necesita averiguar qué tan cierto es el recuerdo y que no sea su mente haciéndole una mala jugada. —Creo que deberíamos de ir con el doctor para que te examine —le pide al notarlo aun con dolor. —Vamos a desayunar, si el dolor persiste entonces vamos con el doctor —niega señalando la entrada del hotel. No muy convencida, Carla acepta llevándolo al restaurante del hotel. —Deberías de salir con uno de los chof
Capítulo 36 Leticia se está terminando de arreglar cuando escucha que alguien toca la puerta entrando a la habitación. —Hola, hija ¿ya estás lista? —Maite ve el hermoso vestido que se ha puesto—, si ese hombre no cae a tus pies, empezare a dudar de él. —Hola mamá —sonríe por su comentario tan expresivo—.Ya casi estoy lista, Jann tiene al bebé. —¿Cuáles son los planes para esta noche? —se sienta en la cama viendo cómo termina de maquillarse —Solo saldremos a cenar, no creo que hagamos gran cosa, al parecer su memoria está regresando y anda con un poco de dolor de cabeza, así que no quiero agobiarlo. Le comenta esperando que la salida que tiene preparada ayude a que su memoria termine de regresar. —Si su memoria está regresando, eso es muy bueno y en tu correo envié algo que quizás te va a ayudar a que sus recuerdos terminen de llegar —se pone de pie para ayudarla con el collar. —¿De qué se trata? —la ve por el espejo. —Unos archivos de su ex prometida que él me pidió guardar, e
Capítulo 37 —No se supone que sea algo que cuentes con tanta emoción —comenta incapaz de voltear hacia ella. —No te imaginas las veces que me tocó contarlo sintiendo tanta vergüenza, pero después de un tiempo comprendí que, aunque no fue algo planificado ni fue lo mejor, si nos trajo cosas buenas como nuestro hijo y una nueva forma de ver el amor. Se sienta en la cama y coloca la mano en su hombro, acercándose más a él, necesitando ese contacto que no ha podido tener desde que despertó. —Lo siento mucho, pero es un sentimiento que no puedo corresponder —se pone de pie necesitando distancia. —No te estoy pidiendo que me ames porque soy la madre de tu hijo, pero sí que seas fiel a tus principios y respetes tus decisiones —se coloca frente a él, buscando su mirada. —Entiende que al despertar la única mujer a la que amo es a Carla, en mi mente está ella, es mi prometida, la mujer con la que estoy a punto de casarme y aunque debo de reconocer que han habido cosas que me hacen dudar de
Capítulo 38 La ama de llaves le avisa a las chicas que el almuerzo ya está listo, por lo que las dos se van al comedor, pero Leticia se da cuenta que hay tres platos, en vez de dos. —¿Jann aviso que vendrá? —le pregunta a la chica que está terminando de poner la mesa. —El señor Jann tiene rato que llegó, pensé que lo sabía, primero fue hacia el jardín y al rato lo vi caminar hacia el despacho —le explica. Leticia y Aimara se ven entre sí sorprendidas, ya que ninguna de las dos lo vio llegar. —¿Será que nos ha escuchado hablar? —le pregunta Leticia en voz baja a su prima. —No lo sé, pero en caso de que nos haya escuchado, es muy probable que sepa entonces lo de las fotos y la historia detrás de ellas —se encoje de hombros restándole importancia a la situación, esperando que si las escuchara. Ambas se sientan y esperan a ver si el aparece para acompañarlas. —Buenas tardes chicas —entra al comedor viéndolas, pero sin hacer comentario sobre lo que escuchó. —¿Qué tal te fue esta ma
Capítulo 39 Aimara va pasando en su auto y ve a Carla frente a las oficinas de Jann por lo que se detiene enseguida y va tras ella. —Zorra desvergonzada —le da una cachetada que gira su cara y la hace tambalear, sin impórtale que se encuentran en la calle y los transeúntes se detienen. —¿Tú qué te has creído? —pregunta sorprendida viendo a su alrededor. —¿Me vas a decir que no sabes quién soy realmente? Eres una perra, oportunista. Te metiste en mi relación, destruiste la tuya y sigues de mal tercio, ¿es que acaso Miguel solo fue un pasatiempo? —se acerca cada vez más a ella, queriendo dañarle la cara de ángel que tiene. —¿Acaso te ha enviado Leticia por mí? ¿Qué tienes que ver tu con Miguel? —pregunta aun sin entender, poniendo distancia entre las dos. —A diferencia de ti, yo no necesito que nadie me mande hacer nada y no es por mi prima que estoy aquí, al parecer sufre de amnesia selectiva. Te refrescare la memoria, fui la novia de Miguel con quién te revolcabas cada vez que te
Capítulo 40 Leticia termina de alimentar a su hijo y se sienta en el jardín a tomar un poco de sol. Ve a su hijo con sus ojitos muy abiertos intentando ver todo a su alrededor, sonríe sin poder evitarlo. —Señora, el señor Michael pregunta por usted —se acerca la ama de llaves interrumpiendo a Leticia. —Dígale que estoy ocupada y no lo puedo atender, para la próxima no lo dejen entrar a la casa, él no es bienvenido. Frunce el ceño, cansada de él y Carla. —Lo siento señora. La ama de llaves vuelve adentro y ella se queda atenta a lo que pueda pasar, entonces escucha las voces de sus escoltas y a él llamándola a gritos. Con su bebé en brazos, entra a la casa sabiendo que hasta que no salga, él no dejará el show. —Basta Michael —le entrega su hijo a una de las chicas — deja el escándalo que no estás en tu casa, sabes que aquí no eres bienvenido ¿acaso no te cansas de molestar? Xiomara debe estar muy preocupada por ti. —Por favor hablemos, luego si ya no quieres verme más, prometo
Capítulo 41 Temprano en la mañana Jann se despierta debido al llanto inconsolable de su hijo, preocupado, sale corriendo hacia la habitación de Leticia encontrándola en la cama, el bebé acostado y ella sentada en orilla con el teléfono en la mano. —¿Está enfermo? —se acerca a su hijo sosteniéndolo en brazos. —Al parecer son cólicos, la pediatra dice que es normal a su edad. A tener paciencia. Responde cansada, casi no pudo dormir preocupada por su pequeño. —¿Puedo ayudarte en algo? —camina con él bebe por el cuarto al ver que el llanto disminuye un poco. —Quédate con él un momento para ir al baño, hasta que los gases no salgan, probable que no deje de llorar —se levanta con cuidado debido al dolor a la parte baja de la espalda. Leticia se va al baño para aprovechar de asearse y hacer sus necesidades, para cuando sale, ha dejado de escuchar al bebé llorar. Encuentra a Jann en la mecedora y el pequeño Andrés dormir sobre su pecho. —No lo escuché botar algún gas, quizás solo neces