El cambio de tono de Zhao Xiaowan sorprendió a Tang Ruochu antes de que sus labios se curvaran en una sonrisa burlona.

"¿Necesito tu permiso para enviar a mi padre a los Estados Unidos? Por favor, deja de interferir en los asuntos de mi familia".

"Chuchu, ¿cómo puedes...?".

"Por favor, lárgate. Quiero acompañar a mi padre sola". Tang Ruochu la interrumpió sin piedad.

Mientras hablaba, se dio la vuelta e ignoró a su madrastra.

Zhao Xiaowan nunca había querido quedarse. Ella miró maliciosamente a Tang Ruochu antes de irse apresuradamente.

Tenía que contarle a Ruoruo sobre el plan de enviar a Tang Song a Estados Unidos. Entonces, podrían estar preparadas para manejar los eventos futuros.

Después de que Zhao Xiaowan se fue, Tang Ruochu agarró las cálidas manos de su padre y le susurró: "Papá, me aseguraré de que aquellos que te lastimaron sean debidamente castigados. Protegeré al Grupo Tang y te lo devolveré una vez que te recuperes".

Después de que terminó de hablar, se quedó mira