Al mismo tiempo, en la casa de la Familia Ji...

La crisis que el Grupo Ji había estado enfrentando durante los últimos dos meses hizo que los tres fueran golpeados. Hoy, finalmente se habían liberado de la potencial bancarrota y finalmente pudieron dar un suspiro de alivio.

En la sala de estar de la Familia Ji, los tres miembros de la Familia Ji, así como Gu Ruoruo y su madre, estaban sentados en el sofá. Parecían cómodos y relajados.

"Yinfeng, en unos pocos días, tu prima regresará. Recuerda recogerla en el aeropuerto y llevarla a casa para cenar. Si no fuera por ella, nuestra familia podría no haber podido superar este obstáculo".

Qin Silian miró a Ji Yinfeng, que estaba sentada a su lado. Su rostro estaba teñido de un leve tono de alegría. El aplomo de una dama rica, que solía tener, volvió.

En los últimos dos meses, Qin Silian también lo pasó mal.

En el pasado, no importaba a dónde fuera, la gente la estaría halagando y adulando.

Sin embargo, después de que el Grupo Ji se m