Toda marchaba bien en la empresa Collins pero había un persona que estaba irritada por ese progreso, Landon.

Desde que Dinora resolvió todo con facilidad el no ha podido estar tranquilo, no acepta que ella haya podido lograr algo que era casi imposible con esos simples métodos con nada de dificultad, era difícil creer semejante acontecimiento inexplicable.

—¿Señor me necesita? _preguntó Vicky la asistente de Landon a la cual mandó a llamar.

—Así es Vicky, te necesito para que investigues algunas cosas personalmente sobre Dinora, espero y no me decepciones, quiero respuestas cuanto antes _dijo Landon autoritario, siempre tiene esa manera frívola de dirigirse a las personas.

—Si señor, usted solo dígame, estoy a su disposición _respondió Vicky de manera suave y dulce como siempre.

—(Diablos, ¿porqué siempre tiene que poner esa cara tan linda?) _pensó Landon.

—¿Señor pasa algo? _pregunró Vicky al ver que Landon estaba distraído.

—No pasa nada, ahora bien, te diré lo que tienes que hacer,