- ¡¿Como?!
- Ven, vamos.
Carolina entra y se van.
En el auto Luiz mira a Carolina
- Quiero ser tu amigo.
- ¿Cómo se llama, jovencita?
Carolina todavía un poco avergonzada
- Carolina, señor.
Luiz risa
- Carolina son amigas ahora, ¿verdad?
- Llámame Luiz.
Carolina sacude la cabeza a medias con razón
- Está bien.
- Luiz.
Luiz sonríe
- Verás que te daré la libertad que siempre has soñado.
- Libérate para vivir.
- Libre para ser feliz.
- Libre para amar.
- Tendrás mucho dinero y poder.
Carolina, todavía un poco tensa, sonríe con esa realidad.
Luiz detiene el auto cerca de una iglesia y mira a Carolina
- Carolina quiero contarte un poco de mi vida.
-Así que puedes confiar en mí.
- Moriré, Carolina.
Carolina se sorprende.
- Me queda poco tiempo de vi
Luiz sabía que iba a morir y decidió viajar y dejar a sus hijos con Zilda, no les contó su sentencia de muerte, con razón pensó que era un castigo, solo tenía a los niños en la cabeza. Se preocupaba por sus hijos, no tenía tiempo para recuperar su amor y respeto. El único que supo de su muerte fue su amigo sacerdote. Alguien le confesó todos sus pecados, y fue que tuvo la idea de encontrar una buena mujer para cuidar a su hija Tatiane y llevar a Rodrigo por un buen camino. Meses después. Carolina termina su última cirugía y llegó el momento de ver el resultado en su totalidad. Ella en bikini se mira en un gran espejo y sonríe cuando ve. Luiz, aplaudirla - Te ves maravillosa. - Una mujer nueva. Algunas enfermeras la miran y admiran su cuerpo de mujer, incluso las enfermeras. A Carolina le gustan las miradas. Carolina va y abraza a Luiz y le agradece entre lágrimas. Luiz esta
- A mi hijo Rodrigo le pido perdón por no ser el padre que él quería que fuera, sé que nunca le interesó mi fortuna, hizo la suya y solo estuvo cerca de su madre, mi amada difunta esposa y mi dulce hijita Tatiane. . Rodrigo sigue siendo duro con sus sentimientos por su padre a pesar de que está muerto, Carolina nota su reacción. Y el abogado Antônio sigue leyendo: - Mi hermana Zilda y su hijo Carlos, no te preocupes, vivieron bien hasta el último día de sus vidas, Carolina es una buena persona y sabrá atender tus deseos y preservar mi pedido. Zilda se levanta - Eso es una acumulación. - No lo entiendo bien, revoquémoslo. - Mi hermano no estaba bien cuando dijo estas palabras, no puedes dejarnos en manos de esta mujer. Para el abogado Antonio. - Me imaginé que dirían eso, por favor pase doctor. Entra el médico personal de la familia - El señor Luiz a pesar de la enfermedad, estaba al
Zilda para enfrentar - No creas que esto seguirá así. Carolina sonríe y va al dormitorio principal y se entera de que Rodrigo había tomado la habitación de sus padres como suya, Carolina le dice que tome todas sus cosas y las ponga en otra habitación. Y toma el control de la habitación. Tatiane va al dormitorio y mira desde la distancia, Carolina se da cuenta. - Ven aquí, niña bonita. Tatiane se pone un poco tímida - Te quedarás aquí viviendo con un agente. carolina sonrisa - Voy a. - ¿Te gustó? - Tu opinión es muy importante para mí. Tatiane como - ¿Verdad? -Me cuidarás de verdad, como una madre. Carolina abraza a Tatiane - Sí mi linda. - Te prometo que nunca te dejaré solo. Tatiane la abraza con cariño y Carolina la recibe. Luego llega Rodrigo y Zilda - Me alegro de que hayas llegado. -
- ¿Dormiste con el? Carolina se ofende, pero mantente firme - Creo que este no es un tema para tratar frente a una chica. - Y además, no es asunto tuyo. - Pero la respuesta es no. Carlos sonrió, imaginando que estaba mintiendo, supo que su tío era un mujeriego incluso cuando era mayor. Carolina se calma - Créame, no soy su enemigo. - Ni siquiera Rodrigo. - Incluso después de lo que me hiciste. - Vine en paz y quiero llevar alegría a todos mientras estuvieron aquí. Tatiane sonríe feliz - Me gustó estar aquí Carol. Carolina sonríe. Y Rodrigo se ríe mucho - ¿Paz, alegrías? - Y lo que veremos, Carol. - Mi esposa. Carolina lo mira y lo enfrenta con la cabeza en alto. Al día siguiente Carolina organiza las cosas en la mansión, y cambia algunas cosas que no le gustan mucho a Zilda, quien ya se sentía dueña después de
Comen y Rodrigo está sorprendido y enojado de que Carolina se haya portado bien, correctamente a la hora de comer. Carolina le sonríe. - Un brindis por mi marido. Rodrigo brinda no muy satisfecho. La gente no deja de comentar sobre ellos, y algunos se acercan a saludarlos y pronto se enteran de que están casados ante la sorpresa y el susto de muchos allí que conocieron a Rodrigo y su familia. Poco después, Marta los hace ir a una discoteca donde estaban los amigos de Rodrigo, para su enfado. A todos les gusta Carolina, y la tratan bien sin saber quién era, solo por ser la esposa de Rodrigo. Carolina estaba emocionada y quería bailar disfrutar de la noche incluso con la fea cara de Rodrigo en esa situación que despreciaba. Pero mientras bailan, él se siente bien y le gusta, y comienza a emocionarse. Llegan tarde en la noche a la mansión riéndose de lo bien que se divirtieron. Y cada uno va a su habitación, ardi
Carolina retrocede. - Rodrigo realmente pensó que deberíamos continuar con esto. - Sé qué pensar de mí. Rodrigo se acerca de nuevo - No quiero pensar, disfrutemos esto y veamos qué pasa. Rodrigo besando a Carolina y ella se aleja - Entonces, fue solo un sexo. Rodrigo se acerca de nuevo a ella, ella se aleja y él la abraza - ¿Cuál es el problema? Soy su esposo, es mi esposa. - El agente disfrutó esto juntos. - Me gustó y a ti te gustó, no se puede negar. Rodrigo besando y Carolina deteniéndolo - Y cuando cumpla tres años, que será de nosotros, o de mí. - Aún querrás eso. Rodrigo se aleja - Entonces este es tu interés, mi dinero que robaste. Carolina se ofende - No robé nada, tu padre así lo quería. - Y es tu culpa, me contó las muchas peleas contigo. - El dinero puede ser bueno, y vivir la vida de un mill
Rodrigo pide más bebidas y ven que algo anda mal con él. - ¿Que es el amor? - No todo el mundo es tan lindo. - Muchos viven toda su vida sin amor. - Ni de los que deberían tener, no recibes nada, y sin embargo la vida insiste en que hay que dar amor. - Si nadie me lo dio, ¿por qué tengo que hacerlo? Los amigos se miran y Carolina les pide que le ayuden con Rodrigo. Entonces los amigos y Carolina se llevan a Rodrigo a casa totalmente borracho, Carlos y Zilda lo encuentran en el camino por las escaleras, Carolina lo pasa con Rodrigo y lo llevan al dormitorio. Rodrigo murmura varias cosas mientras está borracho y llora, Carolina lo consuela y se queda allí con él. Cuando llega el amanecer Rodrigo se despierta con dolor de cabeza y Carolina llega con café y se lo da, para que empiece a tener resaca, ella se acuesta junto a él, para su sorpresa, cariñosa y amable con él, sintió que no. No me lo merezco.  
Joan llorando- Lo siento señora.- Mi mente está llena de problemas, sé que no es de tu incumbencia, mi esposo perdió su trabajo y estamos llenos de facturas que pagar y tengo a mi hijo en la escuela, estoy muy preocupada, distrayéndome, lo siento ...Carolina mira Rodrigo- No hay vergüenza Rodrigo.- Cállate.Rodrigo avanza.- Cállate, puede que hayas heredado todo, pero nadie me manda- No pierdas el tiempo.- Joana es una empleada y debe honrar sus actividades.- No seas ama de casa, Carol.- La verdadera dama de esta casa siempre ha sido y siempre será mi madre.- No es un limpiador de baños.Carolina le da una bofetada a Rodrigo.Piensa en defenderse, pero llega Tatiane.- No Rodrigo.Rodrigo mira a Joana y le tira la remera- Tirar a la basura.- Puedo co