Capítulo 44.

Me pertenece.

Ada.

Hablar con Celia resultó en una amena conversación reconfortante, pues ella siempre encuentra alguna tontería que de cierta manera logra hacer ver los problemas como algo más pequeño de lo que verdaderamente son, dije que lloraría tan solo tres días, aún tengo uno a mi favor, me arregle para dar una entrevista virtual para el cargo de asistente administrativa, es difícil que las empresas contraten a mujeres cuando estamos en cinta, por los permisos y demás beneficios… ese se había vuelto mi mayor temor, tanto mi madre como yo rezamos antes de conectar la computadora que Celia me había prestado..

—¡Eres hermosa hija!, con el cabello lacio y tus anteojos eres verdaderamente preciosa y te ves como eres, muy inteligente. Y esos ojitos hinchados ni se notan. —Mi madre siempre me apoyaba, respire profundamente esperando que mi futura jefa se conectara. —No le hables sobre tu embarazo, ya cuando firmes el contrato puedes hacerlo.

—Gracias por estar para mi sie