Isabela Estoy tallando el piso y sé que necesito ayuda, pero, no quiero pedirle a nadie que venga a rescatarme, solo sigo tallando el piso con el cepillo, paso el trapo y veo que finalmente lo he conseguido. Recojo todo y lo pongo en el cuarto de limpieza. Me acuesto en el sofá e intento que no se mueva ningún cojín, me quedo quita y escucho mi celular sonar de nuevo, es un mensaje de Sergio: Isabela, necesito saber que estás con vida y cómo arreglar esto. Sé que me equivoqué, pero, tu vida y tu felicidad valen más. Llámame, por favor, solo necesito escuchar tu voz. Veo las noticias y una llama mi atención Próximo sábado reunión entre las primeras damas a la presidencia. En el té con Doña Piedad confirmaremos si la relación de Sergio e Isabela ha llegado a su fin o si habrá boda.Maldita gente. El teléfono de portería suena y no contesto desde el celular llamo y les insisto a los de seguridad no dejar subir a nadie. Roger, el de mi seguridad se disculpa y me dice que la señorit
Sergio Yo castigo a la orquesta del brazo de la señorita Caine y sus dos hermanos, Milo me ve con los ojos entrecerrados y le extiendo el brazo para que se haga a mi lado y nos tomen una foto a los cuatro. Mis hermanos son más desenvueltos así que no les tengo que decir que sonrían. Mi mamá definitivamente va a colgar esto en la sala de casa. —Que guapo eres Milo. —Gracias, Sergio manipulador —los dos reímos. —No entiendo por qué si eres tan inteligente, guapo y romántico estás soltero. —Es la timidez —Dice Sebastian y los cuatro nos despedimos para seguir cambiando en la alfombra. —Tímido por qué. —hay gente que nace tímida y otros que nacen para robarse la fiesta —me da un golpe en la espalda y yo le rodeo con el brazo. Todos damos una ronda de saludos a los padres de los integrantes de la orquesta, a los donadores de instrumentos y muchos se interesan por la campaña otra se interesan por mi vida privada. —Isabela está indispuesta, lo que pasa es que con gripe nosot
Todos esperan una respuesta a la propuesta de Sergio, como si decir no fuese una opción. Me inclino un poco y le doy un beso en los labios a Sergio. —Para siempre y por siempre llevaré tu corazón conmigo. Sergio pone el anillo en mi dedo. La orquesta sigue tocando la canción, todos se unen a bailar con nosotros y a celebrar el amor, el cielo se llena de globos en forma de corazón, Sergio reconoce que se le fue la mano porque están siendo lanzados por todo Mainvillage. —No están subiendo. —Algunos que soltaron en la propiedad, pero, hay aviones tirando los corazones, para que no tengan dudas de mis intenciones. —Te amo. Beso a Sergio sin importar quien nos mire y con todo el amor posible porque sé que los últimos días ha sido una loquita, un juego de poder que se nos estiró demasiado. Silencios que se convirtieron en combustible para crear una pelea entre los dos, no sé cómo, ni por qué, pero, lo vamos a lograr. Es un salto de fe, enorme. Nuestras familias y amigos rompen nuest
Sergio No sé si hablar de política en estos momentos sea lo más apropiado porque después de enviar un mensaje personalizado a todas las personas que estuvieron sentadas en la reunión del desastre político más grande de mi vida, no sé si ella quiere retomar sus deberes o si simplemente quiere tantear el terreno, la cosa es que espero con ansias y en gran medida el sexo de reconciliación y esto es un tema sensible. Mi prometida insiste y reconozco lo que tengo por venir dugrtate la semana próxima: —Tengo un debate y es necesaria la declaración de campaña. Si vamos a hacer algo diferente tipo un concierto o una gala en fechas específicas para que no lo copien ni choquen las agendas. En general, ocupo un plan de campaña. Sergio sonríe en espera de que le dé la respuesta a todos sus problemas. —Tú de verdad eres solo la cara de esto—los dos reímos. Le doy varios besos en la mejilla y bajo a su cuello, cerca de su oído le recuerdo que soy un hombre excesivamente ocupado y enamorado y qu
Nadie recordaba nada sobre el desayuno al prometido, pero, no voy a negarme a hacerlo, otras veces le he servido comida a Sergio. Son él y su padre los que llaman nuestra atención y su madre de inmediato se pone en medio de ambos. —Esto es una casa.—les recuerda Olivia. —Nueva regla: nada de política en fines de semana dentro de ninguna de las casas. Se pelean el lunes a viernes—declara Olivia y se pone en medio de su esposo y su hijo, la mujer dedica una mirada amenazante a su esposo y otra a su hijo. —Claro, Sergio, cómo no ayudarte, si eres mi primogénito. —Sergio, ven a quebrar huevos porque el lunes tienes que trabajar mucho —le grita su hermana y todos retomamos nuestras tareas. Mi suegra me pregunta qué me voy a poner para la reunión y le enseño una foto del vestido. —Estás nerviosa por reunirte con ellas—No, pero no me siento tan cómoda. —Siempre que necesites ayuda o con quien quejarte... Eres bienvenida. —Estás siendo una muy buena suegra.—Lo sé, ahora ve a prepararl
Isabela Las tres sonreímos y después piedad nos pide que saludemos a los curiosos. La casa es definitivamente impresionante, nos muestra detalle a detalle y comenta sobre los arreglos que jamás nos serán concedidos.Es una mansión preciosa, los Westborn se han asegurado de ello, mientras nos la muestra hasta me aprecie triste que cada cierto tiempo exista la posibilidad de que la pierdan. —Es un té, pero ahora que no hay cámaras es mejor que nos tomemos una copa de vino. Verónica se disculpa nuevamente y anuncia que tiene que marcharse antes. Las tres le miramos y Mei Lin se asegura de que esté bien de salud, la mujer se vuelve a disculpar y se va. —Isabela, Mei y yo llevamos años haciendo esto. Tengo dos opciones para ti, te tomas una agua caliente con hierbas o tomas vino, vodka o tequila en una taza. —No soy una borracha—Me finjo ofendida y las dos me ven asombradas. — A mí me dan café con vodka —Ambas mujeres ríen y seguimos con el paseo por la casa. Más para mí que para ella
Sergio Mis hermanos oficialmente son mi familia de asistencia de campaña, Milo me sirve un whisky y le da un sorbo, me lo acerca mientras mi hermana me hace masajes en el cuello y Bastian basurea a toda la competencia, Lo escucho y asiento y Bash me da una cachetadita. —Sergio, me siento como tu mamá. —Le doy un sorbo a la bebida. — Porque la gente dice que soy tu hombre y a mí no me das joyería. —Te voy a decir lo que no le dije a mi mamá, ella me dio la vida, pero, no me la follo y a u tampoco, así que no le des fuego. —¿Quién quiere follar con la mamá? —Hay fantasías locas. —Sergio, tengo que regalar algo en la primera cita —pregunta Milo y los cuatro nos giramos hacia él. —¿A dónde van a ir? —pregunta Sebastian. —A ver una obra. —Uhh, qué aburrido. —En la primera cita se habla, porque si vas al cine o al teatro es para —Olimpia eleva una ceja. —Tanteo táctico —Los dos Sebastian ríen, pero me dan la razón.—Por eso Olimpia nunca va a ir a esos lugares. —Olimpia tiene una
Isabela La policía hacer las preguntas más estúpidas, después de una hora de explicaciones y repeticiones Sergio les dice que es suficiente y que cuando tengan información nos llamen. Patrick entra en la sala despide a los detectives. —Isabela, ¿tienes algún acosador? —pregunta. —No, yo... mi esposo. Mi exesposo...—Vi que tu exesposo tenía varias órdenes de restricción contra algunas personas, pero, hay una que llama mi atención, porque la llevó a juicio y la orden no es absolutamente para protegerle, sino específicamente para mantener a esta persona lejos de ti. —Xander era muy seguido por sus fans, hay gente que se dedicaba a mirarnos, una vez se metieron en casa y un par de veces destruyeron mi camerino y mis cosas, en casa, luego unas vacaciones y también, nunca supe quién era solo que alguien nos acosaba y el equipo legal de Xander y él se hicieron cargo de ahuyentarle. —¿Creen que fue él?—No específicamente, pero, has tenido acosadores antes y suele repetirse, la gent