Madison estaba a cientos de kilómetros de mí, pero no era una opción el pararme a pensar en ella. No cuando ella estaba a salvo.

Indy es un lobo con confianza, pero incluso los lobos con confianza pueden verse acorralados en una esquina sin salida. Con el tiempo se rinden a la derrota. Pero esto no fue una derrota, no todavía. No hasta que esa bruja esté muerta.

Al darme la vuelta, encuentro a Klaus mirando por la ventana. El lobo blanco está de pie sobre sus patas traseras, sus patas delanteras apoyadas en el marco de la ventana justo al lado de Klaus.

"¿Hay algo?". Le pregunto. El lobo me lanza una mirada de reojo indiferente.

Klaus me sacude la cabeza. "Cada vez hay menos gente que pasa por aquí. Indy tiene razón. Este es el momento".

"¿De verdad quieres hacerlo?". Él nunca había sido de los que se lanzan de cabeza a un ataque.

Frunce brevemente el ceño y se vuelve hacia Indy. "Dime todo lo que sabes".

"No hay mucho más. Ya te dije que la hicieron parecer como si no existiera.