Miro al cielo antes de calmarme. No necesitaba mucho estrés en este momento.

"Hola Christine, hola Emma", digo con voz controlada.

Hoy no quería lidiar con el drama. Así que iba a ser lo más civilizada posible y luego alejarme de esta situación.

Christine se burla, pero no le presto atención. Mi atención estaba en Emma. Aún tenía la venda alrededor de su hombro. Verlo me recordó ese día. La forma en que voluntariamente recibió una bala por mí.

Quería acercarme a ella después de ese incidente, pero no estaba segura de si mis acciones serían bien recibidas. A sus ojos, probablemente aún era su némesis.

Mis ojos la perforan. "Nunca tuve la oportunidad de agradecerte por lo que hiciste, pero siempre estaré agradecida", le digo, señalando su hombro.

No sé qué esperaba, pero no era que se burlara de mí con desdén. Claro, sé que nunca seríamos las mejores amigas, pero esperaba que con lo que nos pasó, dejáramos de lado nuestras diferencias.

"No necesito tus malditos agradecimientos, ¿y