En cuanto el coche de Martha entró en el patio, el portón fue empujado para abrirse desde adentro.

Lionel, a quien conocían, y otros dos hombres oskianos con los que no estaban familiarizados salieron juntos por la puerta.

Cuando Kyler, quien conducía, vio a Lionel, asomó apresuradamente la cabeza y lo saludó atentamente: "¡Lionel, hacía tiempo que no te veía!".

En ese momento, Lionel se había visto obligado a salir para ‘saludar’ a Martha y a los demás. Parecía un poco desorientado, e incluso su velocidad de reacción era mucho más lenta de lo habitual.

Después de que Kyler lo llamó, después de unos segundos, finalmente volvió en sí, forzó una sonrisa y dijo: "Sí... Hacía tiempo que no te veía...".

Cuando terminó de hablar, recordó rápidamente las instrucciones de Charlie y se apresuró a decir: "Ah, por cierto, el Jefe está abajo, y está enfadado. Será mejor que bajen rápido".

Kyler y los demás se pusieron nerviosos, e incluso Martha, quien iba en el asiento del copiloto, se puso