Charlie estaba seguro de que muchas facciones estaban involucradas en este tipo de mercado gris. Su cadena de distribución seguramente cubría todo Estados Unidos y Europa.

Por lo tanto, era consciente de que no podía eliminar esta cadena por completo.

Sin embargo, dado que se habían encontrado con un problema así, y esta noche resultaba ser la fecha de entrega acordada, Charlie decidió darles una lección.

Independientemente de quién fuera el proveedor de materias primas de las pandillas de Vancouver, someterían a los subordinados enviados por este proveedor y luego los forzarían a darles información útil.

A la mañana siguiente, la organización italiana desaparecería sin dejar rastro, y las personas que vinieron a traficar con ellos también desaparecerían. Esto serviría como una advertencia para que el proveedor se mantuviera lejos de Vancouver.

En ese momento, el destello de luz en el horizonte se estaba acercando.

Sin embargo, la otra parte se detuvo a una distancia de casi una