Dado que los hombres muertos no cuentan cuentos, al hacerlo significaba que Gopher podía asegurar una oportunidad para sí mismo.

Al instante en que Gopher estiró su mano, Porter tomó acción y agarró su muñeca con fácil rapidez. Ejerció una pequeña fuerza en la muñeca de Gopher, al apretarla ligeramente.

Sin embargo, eso fue suficiente para hacer llorar de dolor a Gopher. Charlie dijo: “Porter, no lesiones su mano. No será de valor si está lisiado”.

Gopher no entendía lo que quería decir Charlie con valor, pero había sido testigo de la fuerza de Porter antes y sabía que el hombre solo necesitaba ejercer una pequeña fuerza para romper su brazo derecho. Fueron las palabras de Charlie que lo rescataron temporalmente de ese predicamento.

Porter asintió respetuosamente, obedeciendo las palabras de Charlie. Se volvió a su subordinado y dijo: “¡Átalo!”.

Un soldado dio un paso adelante para amarrar las manos de Gopher. Le dio una patada por si acaso a Gopher, haciendo que Gopher tambalear